El enjambre del Dortmund
Despu¨¦s de Klopp y Tuchel, el t¨¦cnico Lucien Favre ha recobrado la intensidad, la presi¨®n y la verticalidad para aspirar a todos los t¨ªtulos
Fue una gamberrada, un mensaje que no gust¨® nada en el seno de la directiva azulgrana porque la herida tardar¨¢ en sanar. ¡°Tiempo para practicar nuestros saques de esquina¡±, escribi¨®, con iron¨ªa tras el sorteo de esta Champions, el community manager de la cuenta oficial del Borussia Dortmund al tiempo que pon¨ªa de fondo el emparejamiento europeo ante el Bar?a. Clara referencia a su exentrenador J¨¹rgen Klopp y al tanto del delantero del Liverpool Origi, que descabalg¨® al equipo azulgrana de la pasada Champions en un remonte hist¨®rico y memorable. Pero la osad¨ªa del Dortmund evidencia la ambici¨®n ilimitada de un equipo que ha recuperado la confianza y su sello gracias a la llegada del t¨¦cnico Lucien Favre. Y se ha convertido en un equipo de abejas ¨Cen referencia tambi¨¦n a su indumentaria amarilla y negra- que zumban y pican, que vuelan y ganan.
Despu¨¦s de la revoluci¨®n de Klopp, que llev¨® al club a lo m¨¢s alto, el Dortmund pas¨® ¨¦pocas ¨¢ridas que ni siquiera t¨¦cnicos de la talla de Thomas Tuchel, Peter Bosz o Peter Stoger lograron superar. Tanto, que desde el subcampeonato de la Champions de 2013 ante el Bayern, el equipo no ha pasado de los cuartos de final en Europa. Momentos que pusieron a prueba al eslogan del club ¨CEchte Liebe [amor verdadero]- y a la famosa Gelbe Wand - S¨¹dtrib¨¹ne Dortmund, al muro amarillo que conforma su afici¨®n a cada encuentro. Prueba m¨¢s que superada porque en el curso anterior, por ejemplo, tuvo una media de 80.889 espectadores por duelo (seguido por el Bayern con 75.000) cuando su aforo es de 81.365. M¨¢s que ning¨²n otro club en el mundo. ¡°Dortmund es un sentimiento futbol¨ªstico¡±, lo define para EL PA?S el delantero Paco Alc¨¢cer, exazulgrana que ha recuperado el olfato y la punter¨ªa como tambi¨¦n lo ha hecho el Dortmund, pues es el m¨¢ximo goleador con 13 dianas en cuatro encuentros ¨Cle sigue de nuevo el Bayern, con 12-; 3,25 por choque. Medalla para Favre.
Aunque no tiene la pompa de Klopp ni Tuchel, ni siquiera la del efervescente Julian Naggelsman, Favre tiene la etiqueta de cruyffista por su f¨²tbol ofensivo y de toque, aunque siempre con la verticalidad como bandera. Por eso el Dortmund, tras a?os de desilusi¨®n, no dud¨® en pagar su cl¨¢usula de tres millones al Niza, donde Favre logr¨® en su primer a?o el t¨ªtulo de campe¨®n de invierno y acab¨® tercero. Antes, en cualquier caso, dej¨® su impronta en equipos como el Servette y sobre todo en la ¨²ltima d¨¦cada en el Borussia Moenchengladbach, al que salv¨® de un descenso anunciado a Segunda en 2011 para despu¨¦s ganarse el apelativo de Borussia Barcelona por su juego vistoso, adem¨¢s de darle la tentativa a un joven Ter Stegen que ahora ataja en el Camp Nou. ¡°Cuando me llam¨®, me sorprendi¨® su idea porque le gusta tener el bal¨®n y porque practicamos un juego ofensivo en el que se necesitan laterales que suban y bajen para ese f¨²tbol de ida y vuelta que se juega aqu¨ª¡±, explic¨® hace unos d¨ªas Achraf Hakimi, jugador del Madrid cedido al Dortmund. Precisamente, a Favre se le atribuye el papel de entrenador de j¨®venes, pues da carrete a quien sea sin mirar la edad como hizo con Demb¨¦l¨¦ y con Jadon Sancho ahora.
Con Favre y su 4-2-3-1, la l¨ªnea del contragolpe instaurada por Klopp se mantiene m¨¢s que viva, al tiempo que mezcla tambi¨¦n con la idea del toque que llev¨® Tuchel. As¨ª, no solo son los m¨¢s goleadores de la Bundesliga sino que tambi¨¦n es el equipo que mayor porcentaje (90%; perseguido por el Bayern con un 89%) tiene de ¨¦xito en la entrega del pase. Un ejemplo claro fue el pasado duelo ante el Leverkusen, cuando no se le cayeron los anillos por correr tras la pelota para despu¨¦s desmontar al rival (4-0). Un se?or equipo donde B¨¹rki ataja, los carrileros atacan, en medio corren como cosacos Witsel y Delaney y arriba desmontan rivales con las carreras de Jadon, con el quiebro de Reus, con la llegada de Thorgan Hazard ¨Chermano de Eden, atacante del Madrid- y con la pegada de Alc¨¢cer. ¡°El Borussia ha hecho un equipo para ganar la Champions¡±, se?ala Sergio G¨®mez, excanterano de La Masia fichado por el Dortmund aunque ahora cedido en el Huesca.
Una plantilla, sin embargo, que en este verano perdi¨® a Pulisic ¨Cel Chelsea pag¨® 64 millones- pero que a cambio, en una estrategia calcada a la del Bayern, fich¨® a los jugadores emergentes de la Bundesliga como Hazard (Gladbach), Schulz (Hoffenheim) y Brandt (Leverkusen). Adem¨¢s del regreso de Hummels, el central capataz. Equipo que ha disparado las ambiciones del presidente, Reinhard Rauball, que tras perder la pasada liga en la ¨²ltima jornada, solt¨®: ¡°Tenemos que ser campeones. El Bayern es un ochomil, pero se puede intentar escalarlo y es lo que queremos y lo que necesita Alemania¡±. Algo con lo que Favre no estaba del todo de acuerdo: ¡°Tenemos que tener cuidado con lo que decimos. Llevo tiempo dici¨¦ndolo y queda mucho por hacer y eso no lo podemos cambiar¡±. Un rifirrafe que no pas¨® a mayores ¨Caunque se temi¨® que el t¨¦cnico dimitiera como ha hecho en casi todos los equipos que ha estado- pero que deja clara la obligaci¨®n de Favre. De momento, funciona. Pero no hay mejor prueba del algod¨®n que el Bar?a.
Posible once: B¨¹rki; Piszczek, Akanji, Hummels, Guerreiro; Witsel, Delaney; Sancho, Reus, Hazard; y Alc¨¢cer.
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