El rugby reflota una ciudad japonesa arrasada por el tsunami de 2011
Kamaishi, que vio morir a un millar de los 35.000 habitantes, estrena en un clima de agradecimiento un estadio clave para recuperar la zona
El conocido como milagro de Kamaishi empez¨® a las 14.46 horas del 11 de marzo de 2011, cuando impact¨® el tsunami que se llev¨® m¨¢s de 20.000 vidas en Jap¨®n y provoc¨® una crisis nuclear en Fukushima. Guidados por sus profesores, casi 600 ni?os sobrevivieron a una ola de hormig¨®n con una huida desesperada a las monta?as, a unos 800 metros de altitud. Fue toda una haza?a para una ciudad que perdi¨® a un millar de sus 35.000 habitantes y que ha agradecido este mi¨¦rcoles el papel que ha jugado el rugby en su reconstrucci¨®n. En el solar donde estaban las dos escuelas que albergaban a aquellos estudiantes, Uruguay ha derrotado a Fiyi (30-27) en el Mundial en el partido inaugural de un estadio con aroma a resiliencia.
El tsunami, que alcanz¨® los 11 metros, mat¨® a 150 personas en un centro de emergencias muy pr¨®ximo a la escuela, destinado a proteger a los vecinos de cualquier movimiento s¨ªsmico. En lugar de partir hacia las monta?as, se quedaron y perecieron. Al borde del Pac¨ªfico, Kamaishi recibi¨® la peor parte de una cat¨¢strofe que se ceb¨® con el noreste del pa¨ªs, un ¨¢rea en la que se da?aron el 30% de los hogares, el 60% de los centros de negocios y vio c¨®mo el 98% de su flota pesquera era aniquilada. El Estadio Memorial de la Recuperaci¨®n, la ¨²nica nueva construcci¨®n para el Mundial de Jap¨®n, honra a las v¨ªctimas.
Kamaishi era una ciudad acerera que perdi¨® poblaci¨®n a finales del siglo XX y que tuvo una vinculaci¨®n especial con el rugby. El club local, el ¨²nico de las dos primeras divisiones japonesas que no es propiedad de una empresa sino de sus aficionados, fue hegem¨®nico en los ochenta ¨Cgan¨® el t¨ªtulo entre 1979 y 1985¨C y sus jugadores eran conocidos como los hombres de hierro del norte. La huella del oval qued¨® marcada en los contempor¨¢neos, pero el clima de agradecimiento ha sido intergeneracional, pues la construcci¨®n del estadio ha acelerado la rehabilitaci¨®n de la zona. Apenas quedan unas 20 familias viviendo en alojamientos temporales y est¨¢ previsto que encuentren una residencia permanente a finales de a?o.
El encuentro cont¨® con todos los honores, desde la presencia del pr¨ªncipe Akishino a un ambiente de hermanamiento en una instalaci¨®n que llen¨® sus 16.000 localidades. El m¨¢nager del club local, Yoshihiko Sakuraba, subrayaba en los d¨ªas previos el mensaje ciudadano. ¡°Quieren agradecer al mundo todo el apoyo y la ayuda que nos dieron despu¨¦s del tsunami. Estos partidos del Mundial son su forma de devolverlo¡±. El estadio tambi¨¦n acoger¨¢ el 13 de octubre el duelo entre Namibia y Canad¨¢.
Pese a que el rugby no es hegem¨®nico en Jap¨®n, su peso es nuclear en el noreste. Los organizadores han aprovechado el gran rendimiento en el Mundial de 2015 ¨Cgan¨® tres partidos tras 24 a?os sin lograr una sola victoria- para impulsar el deporte en la primera visita del torneo a tierras asi¨¢ticas. El milagro de Kamaishi reivindica el esp¨ªritu de solidaridad del rugby y su capacidad para resta?ar heridas.
En el partido, Uruguay rompi¨® los pron¨®sticos y logr¨® ante Fiyi la tercera victoria mundialista de su historia tras derrotar a Espa?a en 1999 y a Georgia en 2003. Los Teros fueron superiores en un gran primer tiempo y aguantaron el intento de remontada de una selecci¨®n que est¨¢ ocho puestos por encima en el r¨¢nking mundial. Fiyi, que domin¨® a Australia durante una hora en su debut, pag¨® las rotaciones o el escaso descanso ¨Cmenos de cuatro d¨ªas- y es la primera selecci¨®n eliminada del Mundial. En un grupo que completan Gales y Georgia, Uruguay aspira con argumentos al tercer puesto, lo que garantizar¨ªa un billete para Francia 2023.
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