Orlando Ortega comienza mandando en los 110m vallas

Adri¨¢n Ben, debutante de 22 a?os, estaba muy nervioso antes de su primera serie de 800m y al ver tan tranquilo a su compa?ero de habitaci¨®n, le pregunt¨®: ¡°?Qu¨¦ pasa? ?t¨² no te pones nervioso?, ?c¨®mo haces?¡±; y su compa?ero sonri¨® y le respondi¨®: ¡°?C¨®mo me voy a poner nervioso, papi? Llevo haciendo esto toda la vida¡±.

El compa?ero de habitaci¨®n de Adri¨¢n Ben, que este martes (a las 21.10) se convertir¨¢ en el primer espa?ol que disputa una final de 800m, es Orlando Ortega, medallista de plata en los Juegos de R¨ªo, que disputa sus terceros Mundiales y que este lunes pas¨® brillantemente la primera serie de los 110 metros vallas. Lo hizo con unos espectaculares 13,15s conseguidos aparentemente sin despeinarse y sin que se le crispara la larga barba que se deja, la mejor marca de todos los participantes, entre los que asoman los dos rivales m¨¢s peligrosos y conocidos, el jamaicano Omar McLeod, el campe¨®n de R¨ªo (13,17s) y el ruso Shubenkov (13,27s). Su condici¨®n de m¨¢ximo favorito no le pes¨®.

Para Ortega, un Mundial es pura rutina, parte de su vida competitiva que tom¨® un giro decisivo cuando se fue de Cuba tras el Mundial de Mosc¨² 2013 para establecerse en Espa?a, donde pod¨ªa ser profesional. Todo es novedad y descubrimiento para Ben, un talento gallego que lleg¨® a Madrid, a la Blume y al centro de alto rendimiento, el verano de 2016 desde Viveiro, donde se entrenaba sobre las baldosas del paseo mar¨ªtimo, para estudiar fisioterapia y para ser campe¨®n.

En 2019, el campe¨®n de las vallas y el novato de talento sufrieron un d¨ªa de deslumbramiento y posterior iluminaci¨®n. Ortega lo padeci¨® en Glasgow, en los campeonatos de Europa en pista cubierta, donde no consigui¨® medalla. Al d¨ªa siguiente decidi¨® dejar de entrenarse en Espa?a con su padre y se march¨® a Chipre, donde dice que es feliz y donde aprendi¨® a decir: ¡°?Glasgow? ?Qu¨¦ es Glasgow?¡±, como lo dec¨ªan los galos de la aldea irreductible y Ast¨¦rix cuando les preguntaban qu¨¦ pas¨® en Alesia, donde los romanos los derrotaron. As¨ª curado de los problemas ¨ªntimos que le torturaban, las marcas y el verano en las pistas de Ortega han estado a la altura de la felicidad que proclama y del favoritismo con el que afronta el Mundial que le deber¨ªa coronar. "Para ganar habr¨¢ que bajar de 13s, y espero ganar", dijo Ortega despu¨¦s de su serie que sali¨® conforme a sus planes de correr muy r¨¢pido y frenarse al final. "Estoy muy tranquilo. Hice lo que hab¨ªa que hacer cuando cambi¨¦ de entrenador. Mentalmente ha sido muy positivo. Es lo que necesitaba para progresar en mi carrera, y los resultados lo han demostrado".

El deslumbramiento y la luz le llegaron a Ben el d¨ªa de julio en el que qued¨® eliminado de los 1.500m del Europeo sub-23. Al d¨ªa siguiente, su amigo y compa?ero de entrenamientos en el grupo de Arturo Mart¨ªn, bati¨® el r¨¦cord de Espa?a de 3.000m obst¨¢culos en M¨®naco. Mart¨ªn estaba comi¨¦ndose una hamburguesa y cuando se enteraron, Ben y Valladares, otro del grupo, corrieron r¨¢pido a estar con ¨¦l y a felicitarlo. La crisis de fe en sus condiciones le dur¨® un d¨ªa. Se apunt¨® a un 800m en Barcelona y convirti¨® la rabia y el deseo en la mejor marca de su vida (1m 45,78s), m¨ªnima para un Mundial en el que ni so?aba participar y en el que su vida va a cambiar

¡°En atletismo, para llegar, siempre hay que tener fortuna y decisi¨®n. Se me quejaba Adri¨¢n de que siempre le tocaba la primera serie, la m¨¢s lenta, y yo le dec¨ªa que alg¨²n d¨ªa le dar¨ªa suerte eso. En la primera serie, ¨¦l fue ¨¦l que tom¨® la carrera entre sus manos; en la semifinal, tuvo la fortuna de que la corrieran dos locos que solo saben salir a tope y en cabeza, y logr¨® el mejor tiempo de su vida. Y est¨¢ en la final. Y no va a quedar el ¨²ltimo, seguro¡±.