Emery no mejora al peor Wenger
El entrenador espa?ol no consigue frenar la espiral decadente del Arsenal, que se desploma a ocho puntos de la Champions tras el peor arranque liguero desde 1982/83
La estampa negra de Unai Emery en la banda del estadio del Leicester, p¨¢lido repasando el escenario como un actor sin guion, tocado con una capucha empapada bajo la lluvia mientras un trompetista interpretaba Rendition of the Last Post en memoria de los brit¨¢nicos ca¨ªdos en las guerras mundiales, resumi¨® este s¨¢bado el estado funerario que atraviesa el entrenador espa?ol del Arsenal.
Antes del partido la cosa pintaba mal para los visitantes. Despu¨¦s del partido, la hinchada alborozada del King Power Stadium celebr¨® la victoria (2-0) y el segundo puesto provisional en la Premier mof¨¢ndose del t¨¦cnico rival con una canci¨®n que suele preludiar lo que profetiza: ¡°You¡¯re getting sacked in the morning¡!¡±. Algo as¨ª como que ¡°te echar¨¢n ma?ana por la ma?ana¡±.
La ma?ana del domingo no trajo novedades desagradables para Emery. Sigue en su cargo. Al menos, de momento, tras el peor arranque de temporada del Arsenal desde 1982. El equipo suma cinco partidos sucesivos sin ganar y apenas ha logrado seis victorias en todos los torneos este curso: tres en Europa League, una en la Carabao Cup, y dos en la Premier, contra el Bournemouth y el Aston Villa.
La revista digital The Athletic public¨® tras la derrota en Leicester que la plana mayor del Arsenal confirmaba al entrenador, citando fuentes an¨®nimas, ¡°al cien por cien¡±. Y no solo eso, sino que el propietario Stan Kroenke y el director deportivo Ra¨²l Sanlleh¨ª, le respaldar¨ªan pasara lo que pasara hasta junio, porque estaban convencidos de que el equipo evoluciona en buenas manos. En el seno de la directiva han resuelto trasladar un mensaje positivo. En las tribunas y en la prensa se anuncia la b¨²squeda acelerada de sustitutos. Luis Enrique y Mourinho encabezan las barajas.
El futuro de Emery se oscurece tras 17 meses en Inglaterra. En 2018, tras abandonar el PSG silenciosamente con un saldo de un t¨ªtulo de Liga francesa en dos temporadas, Emery firm¨® contrato con el club de Londres hasta el verano de 2021. Lleg¨® con la esperanza de demostrarle al mundo que su desventura francesa hab¨ªa sido meramente accidental en una trayectoria que bien val¨ªa un libro titulado Mentalidad Ganadora, secretos del entrenador m¨¢s eficiente para lograr el ¨¦xito. Confiaba en desarrollar un proyecto nuevo en un marco de profesionalismo y armon¨ªa. Algo que en Par¨ªs, debido al torbellino que rodea a Neymar, no hab¨ªa disfrutado. Los dirigentes del Arsenal pensaron que el guipuzcoano era la persona indicada para relanzar el proyecto estancado de uno de los cinco clubes ingleses con m¨¢s poder adquisitivo. Doble campe¨®n de liga inglesa este siglo, el Arsenal no alcanzaba puestos de Champions desde que fue segundo de la Premier en la temporada 15/16. Fue 5? en la 16/17 y 6? en la 17/18, cuando el ciclo de Ars¨¨ne Wenger declinaba bajo el peso del desgaste tras dos d¨¦cadas inolvidables.
El d¨ªa que Ivan Gazidis, a la saz¨®n director ejecutivo, present¨® a Emery, hace a?o y medio, hizo un pron¨®stico rotundo: ¡°Una de las cosas que m¨¢s destacar¨ªa de los equipos de Unai es que mejoran con el tiempo¡±.
El optimismo vitivin¨ªcola de Gazidis no se materializ¨® en resultados. Tampoco en la conformaci¨®n de un estilo reconocible. El Arsenal volvi¨® a quedar 5? en la ¨²ltima Premier y actualmente se encuentra a ocho puntos del 4? puesto, el que permite el acceso a los privilegios deportivos y econ¨®micos de la Champions. La estad¨ªstica sentencia. Los primeros 50 partidos de Emery no han sido mejores que los ¨²ltimos 50 de Wenger, en plena decadencia del ciclo del entrenador franc¨¦s. Se contabilizan 27 victorias para Wenger contra 25 para Emery; 88 puntos contra 87; 96 goles a favor contra 89; 585 ocasiones creadas contra 479; y una posesi¨®n media de bal¨®n de 61% frente a un 58%. Las ¨²nicas variables que se inclinan a favor del trabajo del espa?ol hablan de su mayor celo defensivo: este Arsenal concede menos goles y pierde menos partidos. Pero aburre a sus hinchas y tambi¨¦n a sus jugadores. Los desencuentros manifiestos de Emery con Mesut ?zil ¡ªla estrella¡ª y Granit Xhaka ¡ªel capit¨¢n nombrado por el propio Emery¡ª se?alan el germen del desasosiego en el vestuario.
El regreso del postergado ?zil en sustituci¨®n del lesionado Ceballos, y el sorprendente cambio de esquema, del 4-2-3-1 al 3-4-3, no solo no mejor¨® las cosas en Leicester. Aceler¨® la confusi¨®n en la que parecen vivir unos futbolistas que apenas aciertan a repetir acciones previsibles sobre un terreno de juego en el que cada vez disfrutan menos de la pelota. El Arsenal, ahora inclinado al contragolpe, controla cada vez menos los partidos. Ha dejado de ser un equipo divertido. Y cada vez pierde m¨¢s puntos.
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