El Sevilla llama a la puerta

Casi sin hacer ruido, con menos brillo del esperado, pero con una enorme efectividad, el Sevilla se ha colocado tercero, convirti¨¦ndose en el mejor equipo de LaLiga fuera de su estadio. Sufri¨® una enormidad ante un buen Valladolid, que demostr¨® por qu¨¦ todav¨ªa no hab¨ªa perdido en Zorrilla. Un gol de penalti de Banega acab¨® por decantar un choque donde el Sevilla realiz¨® un buen primer tiempo, para luego sestear y defenderse con orden ante un rival que le puso en muchos apuros, aunque, en honor a la verdad, tampoco le cre¨® demasiadas ocasiones. El choque fue duro, complicado, como corresponde al buen nivel de la competici¨®n y el momento de un Valladolid muy intenso. La duda siempre existir¨¢ en el an¨¢lisis de un choque jugado a cara de perro. Los m¨¢s exigentes aficionados del Sevilla se preguntar¨¢n por qu¨¦ el equipo se meti¨® tan atr¨¢s en la segunda parte, a lo mejor sin valorar el buen trabajo de un Valladolid fuerte y de una destacable intensidad. S¨ª le falt¨® algo de toque y pausa al Sevilla cuando m¨¢s apret¨® el rival, aunque bien valieron el sufrimiento y los apuros finales cuando el equipo, bien trabajado por Lopetegui, alcanza la tercera plaza a un solo punto de Madrid y Barcelona.

El buen trabajo colectivo del Sevilla tuvo tambi¨¦n hombres determinantes. Primero Banega, con su f¨²tbol de seda y su personalidad; tambi¨¦n Fernando, un futbolista con un impresionante sentido t¨¢ctico. Por ¨²ltimo, V¨¢zquez, el jugador que templ¨® los ¨¢nimos de un Sevilla condenado a sufrir en el tramo final del encuentro ante un Valladolid incansable. Los de Sergio pelean cada bal¨®n como si fuera el ¨²ltimo y tienen un magn¨ªfico sistema defensivo. Su porter¨ªa solo fue batida de penalti, en el minuto 13, cuando Banega lanz¨® el bal¨®n por la escuadra despu¨¦s de que el VAR mandara repetir su primer lanzamiento por el claro adelantamiento de Masip. Nolito fall¨® despu¨¦s de que Sandro la enviara al larguero y el choque entr¨® en el segundo tiempo en un terrible cara a cara. El duelo se volvi¨® ¨¢spero, el Valladolid apret¨® y el Sevilla se defendi¨® con todo porque ya no lleg¨® en ataque. Fueron los momentos de hombres como Diego Carlos y Fernando, fuertes en el juego a¨¦reo defensivo como su delantero De Jong. Con Ocampos expulsado y sufriendo mucho, as¨ª gan¨® el Sevilla, tercero.

No es f¨¢cil imponerse en un campo como Zorrilla. Probablemente con jugadores como Banega y Fernando el objetivo de derrotar al Valladolid en su feudo sea mucho m¨¢s asequible. Resulta gratificante la personalidad con la que juega Banega al f¨²tbol. Siempre pide el bal¨®n, jam¨¢s se esconde y tiene arrestos para volver a tirar un penalti si es necesario. El argentino vive d¨ªas felices. Su talento impuls¨® al Sevilla ante un buen Valladolid, que le propuso un partido muy ¨¢spero, de escasa pausa, con muchas conducciones y m¨²ltiples duelos individuales. Banega, colocado por Lopetegui en la mediapunta, se movi¨® con inteligencia para llevar el mando de un Sevilla que se adelant¨® en el marcador a los 13 minutos tras un claro penalti de Moyano a Nolito. Masip detuvo en primera instancia el lanzamiento de Banega, pero el VAR, que todo lo ve, caz¨® al portero adelantado. El centrocampista volvi¨® a pedir el bal¨®n. Lo col¨® por la escuadra.

Probablemente, el buen rendimiento de Banega va muy relacionado con el trabajo que Fernando hace por detr¨¢s. El brasile?o es un futbolista con un sentido t¨¢ctico incre¨ªble, vital para soportar el entramado defensivo del Sevilla. El Valladolid no le perdi¨® la cara al choque tras el tanto de penalti, pero sufri¨® una barbaridad ante la gran labor de Fernando, que se llev¨® todos los balones en el centro del campo. De hecho, la ¨²nica opci¨®n clara para empatar de los locales lleg¨® en una acci¨®n con la que los rivales machacan al Sevilla. Se trata de poner el bal¨®n en el segundo palo, donde los rivales se aprovechan de las dificultades de Navas en el juego a¨¦reo. Sandro le gan¨® al campe¨®n del mundo y remat¨® al larguero. Hasta ese lateral del ¨¢rea no pudieron llegar los tent¨¢culos de Fernando. Fue la ¨²nica ocasi¨®n clara de un Valladolid rendido al toque de Banega, que todav¨ªa dej¨® solo a Nolito ante Masip. La finalizaci¨®n del extremo dej¨® mucho que desear.

La segunda parte mostr¨® una imagen m¨¢s conservadora del Sevilla. Los andaluces intentaron que no pasara nada, pero se encontraron con un Valladolid que impuso un ritmo alt¨ªsimo en el juego. Los de Lopetegui se mostraron incapaces de buscar el segundo gol, por lo que cedieron la iniciativa a un Valladolid que lo intent¨®, aunque sin demasiada fortuna. El Sevilla se parapet¨® bien atr¨¢s, corriendo el riesgo de que pudiera llegar el empate en una acci¨®n aislada. No tuvo opciones reales el Valladolid, que acab¨® con un futbolista m¨¢s por la expulsi¨®n de Ocampos, demasiado acelerado. Lopetegui recuper¨® el bal¨®n con la entrada de ?liver Torres y luego de V¨¢zquez. El argentino fue protagonista por su dominio del juego, incluso con alg¨²n detalle de clase cuando el encuentro estaba en plena combusti¨®n. Son las acciones que definen a un futbolista diferente. Entre ¨¦l, Banega y Fernando forj¨® el Sevilla un buen triunfo, tras un meritorio primer tiempo y una demostraci¨®n de madurez y oficio en el segundo. Quiz¨¢s con menos f¨²tbol que el esperado, pero con un resultado ¨®ptimo: mejor equipo fuera de casa y tercero por delante del Atl¨¦tico y a un punto del Madrid y el Barcelona.?