Laia Palau: ¡°La resistencia sigue siendo mi lema¡±
La capitana de la selecci¨®n espa?ola de baloncesto asume el aplazamiento de los que ser¨ªan sus cuartos Juegos Ol¨ªmpicos como ¡°un gran reto¡± a los 40 a?os
Laia Palau tard¨® tanto tiempo en reconocerse en su oficio que durante a?os mantuvo la pasi¨®n suspendida, peleando en una lucha interna a la espera de la liberaci¨®n que lleg¨® con la madurez. El ¡®?qu¨¦ hago yo aqu¨ª?¡¯ fue su dilema durante gran parte de la carrera. Amag¨® dos veces con la retirada, pero las pr¨®rrogas que se concedi¨® resultaron m¨¢s apasionantes que la primera parte del partido. Y encontr¨® definitivamente su sitio y su gente haciendo de la resistencia su revoluci¨®n. Una resistencia que la ha llevado a coleccionar 12 medallas ¡ªm¨¢s que nadie en el baloncesto espa?ol¡ª y que la hab¨ªa colocado, a los 40 a?os, a un palmo de alcanzar las 300 internacionalidades (suma 298) y de disputar sus cuartos Juegos Ol¨ªmpicos. Pero el coronavirus confin¨® los sue?os y multiplic¨® el desaf¨ªo por 365. ¡°La vida no deja de ponerme retos por delante, pero yo soy muy tozuda. Estos Juegos ya eran un gran reto de por s¨ª y ahora son un a?o m¨¢s de reto. Ya estoy pensando en el pr¨®ximo verano¡±, confiesa la capitana de la selecci¨®n espa?ola, que ahora no se pone l¨ªmites para ¡°chapar la barraca¡±.
El aplazamiento ol¨ªmpico hasta 2021 ha cogido a Palau serena y fuerte, ¡°m¨¢s asceta que nunca¡± en su enclaustramiento. Son d¨ªas de reflexiones, sociales y personales, y ah¨ª surgen las inquietudes sobre lo mucho que queda para poder bailar el vals de la obrera en Tokio. ¡°No es oficial que se vaya a cancelar definitivamente la liga, pero casi. Se me plantea el v¨¦rtigo de tener cinco meses por delante sin ninguna competici¨®n, m¨¢s lo que llevamos ya paradas, y no s¨¦ c¨®mo me va a sentar. Desde que empec¨¦ hace 23 a?os no he estado nunca tanto tiempo sin jugar¡±, cavila la jugadora del Uni Girona ante la perspectiva de interrumpir 18 veranos consecutivos con la selecci¨®n.
Salvo en el oro continental de 1993 en Perugia, cuando ten¨ªa 14 a?os, y en el bronce de 2001, que lleg¨® un a?o antes de su estreno internacional, Laia Palau ha estado en todos los dem¨¢s podios del baloncesto femenino espa?ol: 12 de 14. Este verano se iba a convertir en la jugadora m¨¢s veterana en su deporte en disputar unos Juegos (en septiembre cumple los 41), sus cuartos tras Atenas 2004, Pek¨ªn 2008 y R¨ªo 2016. ¡°Los n¨²meros son la experiencia que hay detr¨¢s. Yo me digo ¡®joder, qu¨¦ persistente eres y qu¨¦ bien plantada est¨¢s¡¯¡ La resistencia sigue siendo mi lema. Es mi manera de estar en la vida. Cuanto m¨¢s avanzo m¨¢s valoro lo que hago y m¨¢s consciente soy de lo que me est¨¢ pasando. No pienso en que tengo 40 a?os. Estoy en el espacio-tiempo y crezco cada d¨ªa¡±, explica la base barcelonesa. Hubo un tiempo que pens¨® en dejarlo ¨Ctras la plata de R¨ªo en 2016 y tras el oro continental en Praga en 2017¨C, pero ahora La Inmortal, como la llaman sus compa?eras, aspira a aguantar con la tranquilidad de la obra culminada, de que lo que venga ser¨¢n retoques de cincel.
¡°Los Juegos Ol¨ªmpicos siempre han sido un evento intocable. Son el gran acontecimiento mundial y cuando ves que lo posponen uff¡ le da a esto la dimensi¨®n de una guerra¡±, valora Palau. ¡°Hay 12.000 deportistas a los que se les aplaza un sue?o, pero al final es l¨®gico. En los deportes colectivos con un mes y medio de preparaci¨®n estamos en condiciones de competir, pero entiendo que a muchos atletas este par¨®n les estaba arrasando. Nadie iba a llegar en condiciones, todo iba a estar marcado por el coronavirus, no iba a haber r¨¦cords del mundo¡¡±, se?ala antes antes de valorar su desaf¨ªo en t¨¦rminos rom¨¢nticos, no de plusmarca. ¡°Lo de estar en los Juegos no es por acumular n¨²meros sino porque tengo muy claro que son una experiencia vital ¨²nica, equiparable a dar una vuelta al mundo. Es algo muy especial, le doy mucho valor y si estoy bien no me lo quiero perder¡±, desarrolla Palau.
Reflexiones de la deportista que compaginan con las de la persona. ¡°La vida nos ha dado un aviso tremendo de la fragilidad de este mundo. A ver si aprendemos algo y ajustamos la escala de valores¡±, cuenta relativizando su profesi¨®n. ¡°Mi trabajo ha desaparecido del todo y no tiene mayor repercusi¨®n. El ego ha dejado de existir. El mensaje es que no mandamos nosotros manda un virus. Yo soy solo una ciudadana privilegiada. Hay gente que se est¨¢ jugando la vida ah¨ª fuera cada d¨ªa. Ellos nos sostienen. Sin los sanitarios, los miembros de la seguridad, los panaderos¡ ?sin los payeses no podemos sobrevivir! Ahora que gran parte de la sociedad est¨¢ abocada a la improductividad se ver¨¢ lo importante que es que haya un agricultor cultivando lechugas. Ahora se ve que la m¨²sica, la educaci¨®n f¨ªsica, las artes pl¨¢sticas¡ que son las asignaturas mar¨ªas o menores en las escuelas, son las que est¨¢n permitiendo a la gente mantener un cierto equilibrio. Cuando te despojan de todo te das cuenta de qu¨¦ es lo b¨¢sico¡±.
Pensamientos recluidos en un confinamiento en el que, sin embargo, Laia se ha desatado f¨ªsicamente. ¡°Hago clases online con una profesora de Girona y es una locura. Grito en casa. Estoy reventada de agujetas. Hoy he hecho kick boxing con unos briks de leche que pensaba que iban a explotar. Estoy haciendo m¨¢s ejercicio f¨ªsico que nunca, porque lo que hacemos normalmente est¨¢ muy enfocado al baloncesto y ahora hago cosas muy diferentes. Voy a salir como una bestia de esto. Correr no s¨¦, pero aguantar¡ todo lo que me echen¡±, completa. ¡°Lo vivido ya ha sido maravilloso. Estoy muy tranquila. Pero quiero seguir jugando y llegar a Tokio 2021. Ojal¨¢ lo consiga¡±.
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