Ferrari abandera el ¡®low cost¡¯

Es curioso que sea Ferrari, uno de los s¨ªmbolos m¨¢s representativos del lujo y la ostentaci¨®n, quien abandere el recorte que se har¨¢ visible en todo el espectro vinculado al Mundial de F¨®rmula 1. El anuncio el pasado jueves del fichaje de Carlos Sainz por la estructura de Maranello a partir de 2021 representa de forma inmejorable esa transici¨®n que se avecina. Con la sustituci¨®n de Kimi Raikkonen en 2019 y de Sebastian Vettel en 2020 por Charles Leclerc y Sainz, respectivamente, la Scuderia se ahorrar¨¢ alrededor de 40 millones de euros ¨²nicamente en la partida correspondiente al sueldo de su pareja de pilotos.

Despu¨¦s de vivir una d¨¦cada a rebufo de Red Bull y Mercedes, que se han repartido los diez ¨²ltimos t¨ªtulos, esta es la primera vez en mucho tiempo que Ferrari se adelanta a los acontecimientos, al cambio de paradigma que pondr¨¢ patas arriba una disciplina instalada en una burbuja de ostentaci¨®n que en muchos casos ha superado lo estrafalario. Ser¨¢ interesante ver c¨®mo reaccionan las otras grandes compa?¨ªas cuando se sienten a negociar la renovaci¨®n de sus corredores. El acuerdo de Lewis Hamilton con Mercedes expira el pr¨®ximo 31 de diciembre, y se hace dif¨ªcil imaginar que el constructor de la estrella pueda justificar en el marco econ¨®mico que se avecina los 33 millones de euros que le ingresa anualmente al actual campe¨®n.

Con su paso de Renault a McLaren en 2021, Daniel Ricciardo tambi¨¦n ver¨¢ considerablemente reducido su salario actual, de 15 millones de euros. Los departamentos financieros de las escuder¨ªas hacen lo posible por reducir costes en previsi¨®n a la ¨¦poca de vacas flacas que se aproxima.

Han pasado dos meses desde la vergonzosa suspensi¨®n del Gran Premio de Australia, la prueba que deb¨ªa abrir la temporada m¨¢s larga de la historia, tras el positivo por la covid-19 que McLaren detect¨® en uno de los miembros de su equipo desplazado a Melbourne. Liberty Media, el promotor, insiste en dar por descontado que la actividad arrancar¨¢ a principios de julio, pero las restricciones de movimiento todav¨ªa existentes obligan a ponerlo en cuarentena. Por cada evento que deb¨ªa haber comenzado y no lo ha hecho ¡ªhasta el momento son los seis primeros¡ª las cuentas bancarias de todos los implicados en el Gran Circo sufren un golpe brutal, del que probablemente alg¨²n equipo no se recuperar¨¢. A¨²n retumba la premonitoria frase que Hamilton solt¨® aquel jueves en el circuito de Albert Park: ¡°El dinero es el rey¡±.

Las v¨ªas que irrigan dinero al campeonato son b¨¢sicamente tres: la explotaci¨®n de los derechos de televisi¨®n e imagen, los c¨¢nones que pagan los circuitos para albergar cada carrera, y otros tinglados derivados de ellas, como por ejemplo el paddock club. Sin grandes premios, ninguno de esos canales bombea y el sistema entra en crisis. Seg¨²n datos propios de Liberty Media, los ingresos correspondientes al primer trimestre del a?o han ca¨ªdo un 84%, al pasar de los 228 millones de euros recaudados en 2019 a los 36 millones. La mayor¨ªa de estructuras han aplicado Expedientes de Regulaci¨®n Temporal de Empleo (ERTE) y lo mismo ha hecho el propio promotor automovil¨ªstico. Con la intenci¨®n de mantener a flote el negocio antes del posible colapso, el accionista mayoritario de la F¨®rmula 1 opt¨® por mover activos entre varias de sus filiales que le sirvieron para ganar liquidez por valor de casi 1.400 millones de euros, un capital que se destinar¨¢ a tapar los agujeros que provoquen m¨¢s v¨¦rtigo. ¡°Queremos asegurarnos de que los equipos sean solventes en 2020, 2021 y m¨¢s all¨¢¡±, declar¨® Greg Maffei, consejero delegado de Liberty, para explicar los pagos por adelantado a los m¨¢s vulnerables de la parrilla.

El escenario postpandemia es muy incierto, y todav¨ªa m¨¢s si atendemos al hecho de que el Pacto de la Concordia, el marco que establece el reparto de beneficios entre los participantes, vence este a?o. Lo que ocurre es que esta especie de carta magna no es independiente de los otros acuerdos que deben revisarse, especialmente del reglamento t¨¦cnico. En su af¨¢n por equilibrar las fuerzas y aumentar la incertidumbre de una competici¨®n demasiado previsible, el departamento t¨¦cnico de Liberty, con Ross Brawn al mando, dise?¨® un plan revolucionario que deb¨ªa implantarse el curso que viene. Con los nuevos monoplazas se espera que la igualdad en pista sea mucho mayor que en los ¨²ltimos tiempos, en los que siempre ha habido un claro dominador.

El tijeretazo

Sin embargo, la inesperada irrupci¨®n del coronavirus ha pospuesto su aplicaci¨®n hasta 2022, aunque algunas de las medidas de contenci¨®n se introducir¨¢n ya en 2021. La m¨¢s llamativa es la que ata?e al l¨ªmite presupuestario, que a falta de aprobaci¨®n se fijar¨¢ en 135 millones de euros, dejando al margen algunas remesas. Quedan fuera de ese techo el sueldo de los pilotos y de los tres empleados mejor pagados de cada escuder¨ªa, los bonus por los objetivos cumplidos o el dinero destinado a comprar las unidades de potencia, entre otros. La idea es que esa cantidad todav¨ªa se vaya revisando a la baja hasta dejarla en menos de 125 millones en 2023. Para algunos jefes de equipo, como por ejemplo Zak Brown (McLaren), esa rebaja es insuficiente a menos que est¨¦ por debajo de los 100 millones de euros: ¡°Es como si un boxeador de peso pesado peleara contra un peso medio¡±.

Para controlar que nadie se pase de la raya se ha creado un departamento espec¨ªfico que monitorizar¨¢ cada caso y lo validar¨¢. Las penalizaciones por incumplimiento ir¨¢n desde reprimendas y p¨¦rdida de puntos en los casos m¨¢s leves a la exclusi¨®n del campeonato en los m¨¢s flagrantes. Un aut¨¦ntico tijeretazo si tenemos en cuenta que el presupuesto anual de Ferrari y Mercedes, por nombrar los dos m¨¢s elevados, rondaba los 380 millones de euros.