Messi teme por su futuro en el Bar?a
Al capit¨¢n le preocupa no contar con un equipo competitivo el pr¨®ximo curso, mientras que su salario es muy dif¨ªcil de asumir por otro club
Nada distancia m¨¢s a Leo Messi que escuchar a Josep Maria Bartomeu decir que el capit¨¢n ¡°renovar¨¢ seguro¡± el contrato que expira en 2021. As¨ª que ahora mismo el 10 no est¨¢ c¨®modo desde que el pasado domingo el presidente anunciara en TV-3: ¡°No tengo ninguna duda sobre su continuidad porque su futuro est¨¢ aqu¨ª, futbol¨ªsticamente y despu¨¦s del f¨²tbol; es el mejor jugador de la historia y est¨¢ en plena forma¡±. Una declaraci¨®n que son¨® m¨¢s contundente que la referente al t¨¦cnico Quique Seti¨¦n, pese a que su acuerdo vence tambi¨¦n en 2021, cuando se acaba el mandato de Bartomeu. ¡°La intenci¨®n es cumplir los contratos¡±, afirm¨® el dirigente.
La clave del entuerto est¨¢ precisamente en el cruce de caminos: al presidente le interesa dejar el club despu¨¦s de la celebraci¨®n de las elecciones con la firma de la renovaci¨®n de Messi como legado y al jugador le preocupa, tanto o m¨¢s, el dise?o de la pr¨®xima temporada que acabar la actual, pendiente sobre todo del partido de vuelta de la Champions contra el N¨¢poles. El discurso institucional, asumido por las distintas familias barcelonistas, de que el club y el jugador se necesitan tanto que est¨¢n condenados a entenderse, ya no hace huella en el 10. El rosarino necesita argumentos para seguir despu¨¦s de perder la confianza en Bartomeu. Ya no se basta para ganar los partidos, sino que necesita ayuda. Y el Bar?a no da garant¨ªas a Messi.
A favor de la instituci¨®n juega que el futbolista y su familia est¨¢n muy asentados en Castelldefels y dif¨ªcilmente un club que no sea el Barcelona asumir¨¢ su ficha ¡ªsuperior a los 50 millones netos¡ª despu¨¦s de cumplir 33 a?os y en plena covid 19. El jugador, sin embargo, ha reiterado su disposici¨®n a rebajarse el sueldo en un momento de recesi¨®n econ¨®mica siempre que se le garantice que jugar¨¢ en un equipo competitivo que no necesariamente debe ser el Bar?a. Messi mand¨® parar las negociaciones para la renovaci¨®n del contrato, seg¨²n la Ser. ¡°El problema no es acabar este curso sino c¨®mo afrontar el pr¨®ximo; no se prev¨¦n grandes cambios en el club ni en el equipo¡±, sostienen desde la ciudad deportiva.
Aunque no le ser¨¢ f¨¢cil aguantar sin renovar hasta las elecciones, por la situaci¨®n de Messi preguntan varios clubes de Europa en el Camp Nou. El rosarino, decisivo en la consecuci¨®n de tres de las cuatro ligas ganadas desde la Champions de Berl¨ªn 2015 y protagonista en 10 de las 15 ¨²ltimas, no ha perdido gol y ha ganado juego, una mutaci¨®n que no parece suficiente para disputar ahora el t¨ªtulo al Madrid. No fue casual que en 2017 ya a?adiera una cl¨¢usula de escape en su contrato porque era consciente de la ca¨ªda del equipo y de la mala gesti¨®n de la junta de Bartomeu. El futbolista empez¨® a dudar porque el equipo se encog¨ªa pese a los grandes fichajes ¡ªlos ¨²ltimos han sido Griezmann y De Jong¡ª.
El contexto no favorece, en cualquier caso, las operaciones millonarias desde que la burbuja del f¨²tbol pinch¨® con la pandemia. Al argentino se le complican las opciones de dejar el Bar?a, el tercer club m¨¢s valioso (3.193 millones de euros), por detr¨¢s del Manchester United (3.343) y del Real Madrid (3.478), de acuerdo con la consultora KPMG. El Bar?a precisa del 10 para mantener el valor de su marca (se calcula una perdida de 100 millones si el rosarino deja el club) y las opciones del jugador han menguado despu¨¦s de acabar su flirteo con el City. Antes de que Tito Vilanova le convenciera de que se quedara en 2014, cuando parec¨ªa decidido a cambiar de aires, Messi estuvo a punto de fichar por el club de Guardiola.
A pesar de que ha sido habilitado por el TAS para competir en Europa, el City no parece que vaya a volver a por Messi. ¡°Quiero que Leo se quede en el Barcelona¡± ha dicho recientemente Guardiola. El Madrid hace tiempo que dej¨® de intentar seducir a la familia del jugador. El United no juega la Champions y el cach¨¦ de Chelsea, Arsenal y Tottenham no parecen alcanzar para tentar al rosarino. La Juve ya cuenta con CR y Dybala y Liverpool y Bayern M¨²nich apuestan por otro tipo de estrategia. Queda por ver qu¨¦ har¨¢ el PSG, pendiente, sobre todo, de Neymar y Mbapp¨¨. Hay pocas alternativas para Messi y Bartomeu sabe que lo ¨²nico que no le reprochar¨¢n es que renueve al capit¨¢n, que est¨¢ considerado como patrimonio azulgrana y, como tal, se exige a los directivos de la instituci¨®n que gestionen tambi¨¦n sus ¨²ltimos a?os en activo despu¨¦s de sostener al equipo y a club. La cuesti¨®n es definir el papel del 10 en el futuro en la l¨ªnea que ha hecho Argentina.
¡°No es solo una cuesti¨®n de dinero, sino de sentirse protagonista y mantener la ilusi¨®n y la ambici¨®n, cosa hoy dif¨ªcil de ver en el Bar?a a la espera de los comicios de 2021¡±, coinciden distintos sectores del club. Aunque el Bar?a tiene a la plantilla con la segunda media de edad m¨¢s joven de LaLiga (26,4) por detr¨¢s de la Real Sociedad (26,2), la columna vertebral del equipo ya pas¨® de los 30: Piqu¨¦ (33), Alba (31), Busquets (31), Su¨¢rez (33) y Messi (33). Entre los cinco, se llevan el 60% de la masa salarial (392 millones). El club necesita refrescar al grupo y Messi un proyecto que, si no es ganador, al menos, que lo motive para divertirse en el Camp Nou.
El 10 pas¨® de renunciar a liderar la renovaci¨®n de la Albiceleste
Messi anunci¨® que dejaba la selecci¨®n argentina despu¨¦s de perder la final de la Copa Am¨¦rica en 2016. La relaci¨®n del 10 con la Albiceleste ha sido muy irregular hasta que el equipo formado por Lionel Scaloni, Roberto Ayala, Walter Samuel y Pablo Aimar le convencieron con otro proyecto y un nuevo rol: ser el l¨ªder de una renovaci¨®n. El rosarino acept¨® encantado. Nunca se le vio tan cari?oso con sus compa?eros y reivindicativo ante la prensa como en la ¨²ltima Copa Am¨¦rica en Brasil ¡ªla Albiceleste cay¨® en un buen partido frente a Brasil en semifinales¡ª. A Messi, que siempre admiti¨® la posibilidad de que pueda acabar su carrera en Newell¡¯s, no le molest¨® perder protagonismo; y hoy, por otra parte, ya no se debate tanto sobre las aspiraciones del equipo ni se le compara siempre con Maradona. Messi parece vivir en paz con la Albiceleste.
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