Valverde y Pogacar, como padre e hijo en el Tour

No exagera tanto quien afirma que Alejandro Valverde podr¨ªa ser el padre de Tadej Pogacar, y los dos est¨¢n corriendo el mismo Tour, y no solo por edad (cuando naci¨® el esloveno, en septiembre de 1998, el murciano ya ten¨ªa 18 a?os), sino tambi¨¦n por la amplitud de la brecha cicl¨ªstica que los separa, y que Valverde ve m¨¢s amplia que nunca. Ve al esloveno en el Peyresourde, ve c¨®mo arranca y lo que hace, y es como si viera lo imposible hacerse realidad delante de sus ojos, y habla como los padres a los que les asusta la velocidad a la que van los hijos. Y as¨ª le ve¨ªan a ¨¦l, como el terror del pelot¨®n, hace nada.

El Tour de 2020, en el que forma parte del segundo pelot¨®n cuando la carrera se endurece, le hace sentirse, confiesa, m¨¢s viejo, y ya habla hasta de cierta decadencia, y, ¨¦l, la pasi¨®n ciclista inagotable hecha ser humano, habla sin dolor de la posibilidad de jubilarse. ¡°Mentalmente estoy tranquilo. Si me tengo que retirar, me retirar¨¦ sin ning¨²n problema, no estoy preocupado por eso¡±, dice el corredor del Movistar, que hace dos a?os, a los 38, alcanz¨® la cumbre con el Mundial de Innsbruck. ¡°Espero estar bien, por ejemplo, para los Juegos de Tokio en el 21, pero si no estoy bien ser¨¦ el primero en decirlo. No le voy a quitar la plaza a otro corredor¡±.

Mientras en el Tour, se concentra en ¡°dejarse la piel¡± por su l¨ªder, Enric Mas, y la carga emocional que les une es tan tremenda como el abrazo de supervivientes que se dieron al terminar la etapa del domingo, en la que Mas tem¨ªa no llegar a la meta despu¨¦s de bajar el Marie-Blanque, tan exhausto estaba. ¡°Y llegu¨¦ gracias a Alejandro¡±, admite el balear.

¡°?Que tengo 40 a?os!¡±, dice Valverde, ¡°que no soy ning¨²n cr¨ªo y antes o despu¨¦s tiene que llegar el momento de no estar al 100%. Y viene gente joven y se va muy r¨¢pido. El domingo, de hecho, fuimos toda la etapa a una media de 5,2 vatios por kilo, cuando antiguamente se sub¨ªan los puertos a 5 vatios/kilo y solo en la parte final es cuando realmente se apretaba. Y ahora se aprieta todo el d¨ªa, y muchas veces ni se comprende por qu¨¦ se va tan sumamente r¨¢pido sin necesidad. Pero, bueno, es lo que hay¡±. Y es tal el cambio, casi revoluci¨®n, que hasta Alaphilippe, hasta hace nada un s¨ªmbolo del ciclismo de los j¨®venes, parece de los viejos.

Es el Tour del Jumbo y de Pogacar, un ciclista que ha coincidido con una espectacular camada de ciclistas nacidos entre 1995 y 2000 que est¨¢n dando la vuelta a todas las teor¨ªas conocidas, difuminando las barreras entre contrarrelojistas, sprinters y escaladores, porque ellos lo son todo. Son Remco, Van der Poel, Van Aert¡­ Es Pogacar. ¡°Y hay varias razones por las que se ha producido esta generaci¨®n. Una puede ser sociol¨®gica. Son chavales que llegan al ciclismo no buscando una forma de ganarse la vida, sino siguiendo una pasi¨®n y una locura competitiva, una necesidad de ser los mejores, y mentalmente est¨¢n a otro nivel¡±, explica I?igo San Mill¨¢n, un entrenador un espa?ol que trabaja en la Universidad de Colorado, y lleva desde Estados Unidos la preparaci¨®n del joven esloveno desde finales de 2018.

¡°Y, en mi modesta opini¨®n, se entrenan mucho mejor, mucho m¨¢s cient¨ªficamente. En cuanto Tadej entra en su casa y tiene wifi ya me env¨ªa a trav¨¦s de nuestra plataforma de Training Peaks todos los datos o de su entrenamiento o de la etapa, sus vatios, sus kil¨®metros, su frecuencia card¨ªaca, su velocidad, y como dice el consultor empresarial Peter Drucker, ¡®todo lo que se puede medir se puede manejar¡¯. Y tambi¨¦n se controla mucho mejor la nutrici¨®n y todo lo que pueda afectar al rendimiento. Trabajamos mucho en la zona 2 de resistencia, donde se aumenta la capacidad mitocondrial, donde se quema grasa y se lava el lactato¡±.

De Pogacar, de sus n¨²meros que a Valverde maravillan, y no solo los de sus vatios, sino los de sus ataques ¡ª¡±no s¨¦ si hay otro como ¨¦l que pueda hacer eso¡±, dice Valverde, ¡°los rivales del Tour seguro que no¡±¡ª, habla tambi¨¦n maravillado San Mill¨¢n. ¡°Sus par¨¢metros son espectaculares. Subi¨® el Peyresourde [en un tiempo r¨¦cord de 24m 35s] con una media de 6,48 vatios/kilo durante 25 minutos. Nunca hab¨ªa visto a alguien as¨ª. Son los mejores 20 minutos de toda su vida, con 65 kilos, uno menos que el a?o pasado, y 15 vatios totales m¨¢s¡±, dice San Mill¨¢n, con largos a?os de experiencia en equipos del WorldTour. ¡°Y esos mismos n¨²meros los daba ya en mayo en los entrenamientos. Y le tuvimos que parar porque si no iba a llegar pasado al Tour. Dej¨® una semana la bici y se fue de camping a las monta?as con su novia¡±. Y por si lo que ocurri¨® en la Vuelta del a?o pasado, la victoria de Pogacar en la pen¨²ltima etapa, no fuera suficiente San Mill¨¢n a?ade: ¡°Hemos visto con nueva tecnolog¨ªa de biomarcadores de fatiga que su capacidad de recuperaci¨®n es espectacular. Lo nunca visto¡±.