La tecnolog¨ªa conquista el atletismo de fondo en la pista de Valencia

Una zapatillas llamadas lib¨¦lula (dragonfly) de alta plataforma (25 mil¨ªmetros) que alargan la longitud de las piernas y de los pasos y espumas liger¨ªsimas sustentadas en placas de carbono sobre las que los atletas botan ligeros como el insecto y felices, o eso parece porque su rostro nunca transmite sensaci¨®n de sufrimiento, de control en todo caso; un estadio sin apenas p¨²blico, un n¨²mero infinito de liebres electr¨®nicas en forma de luces led de colores, media docena de liebres humanas¡­ Dos atletas africanos de carne y hueso con vida monacal y austera a sus espaldas, dedicados al entrenamiento, y dos r¨¦cords del mundo programados, y batidos, en el lapso de una hora.

Valencia. Estadio del Turia y su pista de tart¨¢n azul. Bienvenidos a la era tecnol¨®gica en la que ya se ha sumergido para siempre el atletismo de fondo en forma de atletas corriendo detr¨¢s de un rastro de luces azules que se escapan a la velocidad del r¨¦cord que cazan.

Se acabaron los tiempos que a?oran los viejos que prefieren la victoria a la marca, el olor de la tierra mojada de las antiguas pistas al olor a caucho de las actuales, y el olor a sudor de los rivales a la frialdad de unas bombillas.

A las nueve y media de una noche, h¨²meda y de suave temperatura, y de viento calmo, la et¨ªope Letesenbet Gidey, de 22 a?os, con un tiempo de 14m 6,65s, rebaj¨® 17 segundos su mejor marca en los 5.000m para batir por casi cinco segundos un r¨¦cord del mundo (14m 11,15s) que desde 2008, desde que lo estableci¨® su compatriota Tirunesh Dibaba, se consideraba un r¨¦cord de otro mundo.

Rozando las 10 de la noche, el ugand¨¦s Joshua Cheptegei, de 24 a?os reci¨¦n cumplidos, borraba el ¨²ltimo rastro del et¨ªope Kenenisa Bekele, quiz¨¢s el mejor fondista de la historia, de la lista de r¨¦cords mundiales al correr los 10.000m en 26m 11,02s, m¨¢s de seis segundos inferior a los 26m 17,53s que el et¨ªope fij¨® en 2005.

Ambos atletas, Gidey, cuyo pedigr¨ª no parec¨ªa suficiente para enfrentarse a la marca de Dibaba, siempre sospechosa por su relaci¨®n con el entrenador Jama Aden, detenido hace cuatro a?os en Sabadell e investigado por dopaje, y Cheptegei, el nuevo fen¨®meno del fondo desde que en 2019 ganara el Mundial de cross, dieron la impresi¨®n de poder haber ido m¨¢s r¨¢pido si lo hubieran deseado. La mayor¨ªa de los que hab¨ªan estudiado el intento apostaban por que Cheptegei, nacido en Kapchorwa, a 1.800 metros de altitud en el oriente ugand¨¦s, donde pas¨® el confinamiento entrenado por su t¨¦cnico holand¨¦s Addy Ruiter, lograr¨ªa bajar de los 26 minutos, lo que habr¨ªa supuesto 25 vueltas a una media de un minuto y dos segundos cada 400 metros, unos n¨²meros que dan v¨¦rtigo y dejan sin respiraci¨®n compar¨¢ndolos, por ejemplo, con el estupor con el que se recibi¨® en 1954 la haza?a de Roger Bannister, el primer hombre capaz de dar cuatro vueltas a la pista y un poquito m¨¢s (una milla) en menos de cuatro minutos. Cada una de las vueltas de Cheptegei, solo en la pista contra las luces a partir de los 5.000m dur¨®, aun as¨ª, unos espectaculares 1m 2,84s. Bajar de los 26m habr¨ªa sido tan espectacular como romper la barrera de las dos horas en marat¨®n. Y, subraya el t¨¦cnico franc¨¦s PJ Vazel en un tuit, los ¨²ltimos 1.000 metros de Cheptegei fueron especialmente lentos (2m 34,25s), m¨¢s lentos al menos que los marcados en sus r¨¦cords por Bekele, Gebrselassie, Tergat, Hissou, Sigei, y hasta por Lasse Viren, el finland¨¦s que corri¨® el ¨²ltimo kil¨®metro en 2m 29,2s en M¨²nich 1972, cuando dej¨® el r¨¦cord en 27m 38,4s despu¨¦s de tropezar, caerse y remontar.

La mejor marca en 5.000m de Gidey databa de 2018, pero en 2019 se proclam¨® subcampeona del mundo en los 10.000m de Doha tras la superestelar holandesa Sifan Hassan y, sobre todo, siempre la conexi¨®n holandesa, como el banco que patrocinio las tentativas junto a la Fundaci¨®n Trinidad Alfonso de Juan Roig, feliz en las gradas, en noviembre bati¨® en Nimega (Pa¨ªses Bajos) la mejor marca mundial de los 15 kil¨®metros en asfalto, bien que en un recorrido ligeramente cuesta abajo con 44m 20s, y haciendo los ¨²ltimos 10.000m en 29m 12s, cinco segundos inferior al r¨¦cord del mundo de la distancia.

Cuando en octubre pasado gan¨® el Mundial de los 10.000m en el aire acondicionado del estadio de Doha, Cheptegei ya dej¨® clara su ambici¨®n. ¡°Voy a dominar el fondo mundial en los pr¨®ximos cinco o seis a?os¡±, dijo, y con m¨¦todo, suficiencia y todo el apoyo tecnol¨®gico de Nike se puso en marcha. Menos de dos meses m¨¢s tarde, el 1 de diciembre pasado, bat¨ªa en Valencia la plusmarca mundial de los 10 kil¨®metros en asfalto (26m 28s); el 16 de febrero, en M¨®naco, bat¨ªa el r¨¦cord de los cinco kil¨®metros en asfalto (12m 51s) y el 14 de agosto regresaba al Principado, a la pista de tart¨¢n del Estadio Luis II, para batir por 2s el primero de los r¨¦cords de Bekele, el de los 5.000m (12m 35,36s).

Cuando se pregunta a los t¨¦cnicos qu¨¦ tiempos habr¨ªa conseguido Bekele calzando las lib¨¦lulas la respuesta es triste: ninguno bueno. ¡°Estas zapatillas no solo son buenas en competici¨®n, sino que ayudan a entrenar m¨¢s con menos lesiones musculares, pero no ayuda a todos por igual¡±, se?ala Juan Carlos Granado, responsable nacional de trail running. ¡°La forma de correr influye mucho y a Bekele le van fatal¡±. Como prueba de sus palabras, su renuncia al reciente marat¨®n de Londres, que pensaba correr con el anterior modelo de Nike, mucho menos beneficioso que el ¨²ltimo, el que us¨® Kipchoge en su espect¨¢culo de Viena de un marat¨®n en menos de dos horas.