Luis Enrique, sobre Ramos: ¡°Si hay cuatro penaltis, los hubiera tirado ¨¦l¡±
El seleccionador defiende al central, que err¨® dos penas m¨¢ximas tras 25 sin fallo. ¡åHemos sido mejores", dice sobre el juego
Despu¨¦s de 25 penaltis seguidos sin fallo, Sergio Ramos err¨® dos en una de esas noches traicioneras en las que el f¨²tbol parece aliarse con el destino. Para una selecci¨®n sin gol, el colof¨®n a esa coletilla fue no marcar ni con dos penaltis a favor. Convertido en un especialista, Ramos se top¨® por dos veces con Sommer. ¡°Ser¨ªa muy injusto si ahora criticamos a Sergio Ramos. Si hubiera habido tres o cuatro los habr¨ªa tirado ¨¦l. Hay una lista de lanzadores. Ramos es el primero y habr¨ªa tirado todos los que hubiera habido en el partido. Llevaba 25 seguidos y no le vamos a criticar ahora, solo faltaba¡±, defendi¨® Luis Enrique. Ramos es el defensa con m¨¢s goles (23) en partidos de selecci¨®n. Desde la Euro 2016, no hab¨ªa marrado un lanzamiento desde los 11 metros con Espa?a. Con el Madrid fue el 9 de mayo de 2018, ante el Sevilla (3-2). Es la primera vez en la centenaria historia de la Roja que un jugador falla dos penas en un mismo duelo.
La secuencia del primer penalti parec¨ªa que iba a agrandar el aura de trascendencia que acompa?a a Ramos en los ¨²ltimos tiempos. En la jugada anterior a provocar la pena m¨¢xima con su cabezazo cazado en un saque de esquina, hab¨ªa sacado bajo la l¨ªnea un remate de Seferovic porque Unai Sim¨®n se trag¨® un despeje en la frontal del ¨¢rea. En menos de un minuto, Ramos estaba ante una doble heroicidad. Hab¨ªa evitado el 2-0 y ten¨ªa en sus botas el empate a uno. Sommer, con un vuelo raso, despej¨® su remate ajustado. Veinte minutos despu¨¦s, tras ser derribado Morata, volvi¨® a colocar el bal¨®n en el punto de penalti y a fallar. ¡°El f¨²tbol es as¨ª. Es un deporte maravilloso, pero muchas veces no hace justicia. Hemos sido mejores. Me ha gustado el equipo desde el principio. Buscamos presionar y dominar al rival en todo el campo. Lo estamos respetando. Hoy no es justo el resultado, porque s¨®lo hemos empatado en el gol. En todo lo dem¨¢s hemos sido mejores. Yo con este equipo voy al fin del mundo¡±, dijo el t¨¦cnico asturiano sobre el partido.
Unai y los pies
¡°Hemos fallado dos penaltis, que no es muy normal. A Sergio [Ramos] le he visto bien en el vestuario, estaba tranquilo¡±, dijo Sergi Roberto. El protagonismo en las porter¨ªas, que parec¨ªa destinado a Unai Sim¨®n por su segunda titularidad consecutiva, fue para Sommer. ¡°Repito el mismo discurso: tengo tres grandes porteros y con los hechos lo estoy demostrando¡±, explic¨® el seleccionador sobre la titularidad de Sim¨®n.
Este nuevo f¨²tbol que ha tomado como una de sus se?as de identidad la presi¨®n alta ha deparado que la salida del bal¨®n haya convertido el juego desde atr¨¢s en un territorio para el laboratorio de los entrenadores, en el que los porteros son un jugador de campo m¨¢s. Pero no solo para tocar.
Su figura es utilizada tambi¨¦n para provocar al rival a que vaya a la presi¨®n, que deber¨¢ ser superada con el posicionamiento ensayado para recibir el bal¨®n de los centrales y los centrocampistas. El lunes, dos d¨ªas antes del partido con Holanda, Luis Enrique trabaj¨® especialmente con Unai Sim¨®n, al que iba a conceder la titularidad.
De Gea no tuvo conocimiento de su suplencia hasta que el t¨¦cnico cant¨® la alienaci¨®n. La sorpresa invadi¨® al que hasta ahora Luis Enrique hab¨ªa se?alado como su primer portero. El partido ante Alemania determinar¨¢ si esa condici¨®n ha cambiado. Unai Sim¨®n pudo comprobar desde el primer bal¨®n que recibi¨® que los delanteros suizos no picaban y no iban a encimarle. Permanec¨ªan en la frontal del ¨¢rea. S¨ª pic¨® Espa?a en la jugada del 1-0. Lo advirti¨® Luis Enrique. ¡°?Cuidado!¡±, grit¨® antes de que Ramos saltara a campo contrario para tratar de robar la pelota a Embolo. Este sali¨® ganador del giro, tir¨® una pared y se lanz¨® a correr por la banda derecha. Su centro lo mand¨® a la escuadra Freuler. Nada pudo hacer Unai Sim¨®n. La noche era de Sommer, como bien supo Ramos.
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