Villalibre era la soluci¨®n
El delantero centro rojiblanco destroza al Betis sin marcar ning¨²n gol, pero tras completar una magn¨ªfica actuaci¨®n
El Athletic destroz¨® en San Mam¨¦s este lunes al Betis, lo hizo pedazos, y en esa minuciosa disecci¨®n del equipo sevillano, contribuy¨® de forma may¨²scula Asier Villalibre, el ¨²nico delantero centro de la plantilla, que acab¨® el partido sin marcar, pero dejando su huella en tres de los cuatro tantos con los que su equipo sali¨® de la mediocridad frente a un rival pobre, sin argumentos.
Garitano y Pellegrini no son, en apariencia, unos revolucionarios. No parecen partidarios de liarse la manta a la cabeza y cambiarlo todo de golpe, pero a veces es necesario, porque el mismo equipo al que dirigen lo demanda. Por razones f¨ªsicas, por imponderables del f¨²tbol o por los resultados, que empujan al cambio.
Pellegrini decidi¨® hacer una peque?a revoluci¨®n en su equipo, y estren¨® una pareja nueva de centrales: Sidnei y V¨ªctor Ruiz, con Rodri, la joya de la cantera b¨¦tica, en remplazo del irremplazable Canales, ca¨ªdo en la bacanal de la Roja contra Alemania. Debutaba el chaval en una plaza de consideraci¨®n, frente a un Athletic que tambi¨¦n remodel¨® su alineaci¨®n, porque la f¨®rmula anterior parec¨ªa agotada.
Garitano, acosado por las cr¨ªticas, le dio por fin una oportunidad de salida a Asier Villalibre, su ¨²nico delantero centro espec¨ªfico, pero adem¨¢s modific¨® el medio campo con Vencedor y Vesga. Para los esquemas habituales del t¨¦cnico, un vuelco completo. Y result¨® que los planes b¨¦ticos quedaron desactivados desde el comienzo por el impulso que experiment¨® el Athletic con los suyos. Salieron los rojiblancos convencidos de que aquello pod¨ªa funcionar. El equipo fue vertical desde el pitido inicial. Berenguer disfrutaba por una banda y Williams por la contraria, pero el m¨¢s beneficiado era Villalibre, activo y participativo, el mejor con diferencia.
Hace un a?o, las ma?anas de partido en los que habitualmente no iba convocado, Villalibre paseaba mustio por Berango, el pueblo cercano a Bilbao en el que vive, posiblemente maldiciendo su fortuna. La eterna promesa de Lezama no parec¨ªa arrancar, ni contaba en los planes de Garitano, pero algo deb¨ªa de tener cuando Aduriz, tras su retirada, le pidi¨® a su compa?ero que heredara su dorsal, el m¨ªtico 20 que tantos goles festej¨®.
Esta temporada, en los ratos de los que disfrut¨®, ped¨ªa a gritos una oportunidad. La disfrut¨® frente al Betis, y fue una titularidad sobresaliente. Se convirti¨® en una pesadilla para los centrales sevillanos, por arriba y por abajo. Particip¨® en todas las acciones de ataque de su equipo. Convirti¨® a Bravo en el mejor del Betis. El primer gol rojiblanco lleg¨® en un centro suyo que desvi¨® hacia su porter¨ªa V¨ªctor Ruiz; el segundo, despu¨¦s de un exquisito centro de Williams, que remat¨® duro de cabeza. Sac¨® Bravo, que ya no pudo con el segundo remate de Capa. El tercero, ya en la segunda parte, lo consigui¨® Muniain, tambi¨¦n en su segundo remate tras un parad¨®n de Bravo, y lleg¨® de un centro desde la izquierda, espectacular, del imprescindible Villalibre, que, y eso es noticia, no particip¨® en el cuarto, conseguido por Berenguer, despu¨¦s de rematar cruzado un centroi raso de Yuri.
Al Betis no le sali¨® nada de lo poco que intent¨®. Su susto m¨¢s grande lleg¨® en un gol anulado por fuera de juego, tras un saque de falta de Joaqu¨ªn. Poco m¨¢s dur¨® la revoluci¨®n de Pellegrini, cosumida por la que ide¨® Garitano, que con Villalibre y once m¨¢s, sum¨® tres puntos en su mejor partido de la temporada.
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