Marc Cucurella: ¡°Cuando presionas arriba te entran m¨¢s ganas de correr¡±

?ngel Torres, presidente del Getafe, le llama ¡°el pelos¡±. Con menos condescendencia que reverencia, porque Marc Cucurella Saseta (Alella, Barcelona, 1998), fino como un maratoniano y coronado por una portentosa melena ensortijada, se ha convertido en uno de los motores del equipo m¨¢s machac¨®n de LaLiga. Cedido por el Bar?a hasta el verano, este lateral reconvertido a extremo rastrilla el campo como dental de arado. Ma?ana en el Alfonso P¨¦rez (16.00 horas, Movistar) pondr¨¢ a prueba la resistencia del Madrid.

Pregunta. Hace poco m¨¢s de un a?o usted se present¨® en Primera Divisi¨®n con un 3-0 al Madrid en Ipurua. ?C¨®mo recuerda aquel partido?

Respuesta. Con un enorme cari?o porque el verano que fuimos al Eibar fue duro tanto para m¨ª como para mi familia. Y ese partido fue un alivio. No me lo esperaba. Hac¨ªa poco que hab¨ªa llegado y ten¨ªa pocos minutos. Jugamos un partido de Copa del Rey un mi¨¦rcoles, hice un mal despeje y nos marcaron un gol. Era uno de los primeros partidos que hac¨ªa de titular y me fui rayado a casa. Ese fin de semana jugamos contra el Alav¨¦s y expulsaron a nuestro extremo. Yo estaba en el banquillo y el m¨ªster quit¨® a Cote, me dej¨® todo el carril y ganamos 2-1. Siempre estar¨¦ agradecido a Mendilibar porque lo m¨¢s f¨¢cil con un joven habr¨ªa sido descartarlo. ?l hizo al rev¨¦s. Diez d¨ªas despu¨¦s recibimos al Madrid. Hicimos un partidazo. No solo yo. Estuvimos todos de diez. Ganarle al Madrid 3-0 no pasa todos los d¨ªas. Para m¨ª fue la confirmaci¨®n de que yendo al Eibar eleg¨ª la mejor opci¨®n para mi carrera.

P. ?Le ilusiona especialmente enfrentar al Madrid?

R. El d¨ªa del 3-0 s¨ª porque yo ven¨ªa de la cantera del Bar?a, y hab¨ªa cultivado una rivalidad en los mini cl¨¢sicos. Fue un sue?o. A los jugadores del Bar?a ya los hab¨ªa tenido en el vestuario. En cambio los del Madrid ven¨ªan de ganar tres Champions seguidas, yo jugaba mi primera temporada en Primera, y pas¨¦ de verlos en la tele a tenerlos al lado en el t¨²nel. Los miraba y me parec¨ªan m¨¢s grandes de lo que cre¨ªa. Fue inolvidable. Sali¨® todo perfecto porque hicimos tres goles en los que puede participar, y adem¨¢s a ellos les anularon un gol cuando ¨ªbamos 0-0 y Cote salv¨® un gol en la l¨ªnea. Metimos el 3-0 en el minuto 65 y recuerdo que estuve media hora corriendo sin apenas tocar la pelota. Cuando acab¨¦ el partido no era consciente de lo que hab¨ªa pasado. Hasta que llegu¨¦ al vestuario y llam¨¦ a mi mujer por tel¨¦fono no me di cuenta de la repercusi¨®n que tuvo el 3-0.

P. ?C¨®mo acaba los partidos despu¨¦s de 90 minutos con el nivel de agresividad mental que imprime este Getafe de Bordal¨¢s?

Todos los equipos protegen el centro. Nosotros estamos haciendo da?o por fuera

R. Es lo que nos pide el m¨ªster. Que estemos vivos, intensos. ?l siempre nos recalca una frase en el descanso: ¡°Quedan 47 minutos¡±. No cuenta 45. Cuenta el a?adido. Nos hace estar enchufados de principio a fin porque en cualquier momento puede pasar de todo. Si estamos m¨¢s ¨¢giles y despiertos que el rival en cada instante, las circunstancias se vuelven a nuestro favor.

P. ?Qu¨¦ lo hace sentir mejor futbolista? ?Una acci¨®n con la pelota o una acci¨®n sin la pelota?

R. Los movimientos en los partidos no se piensan. Te salen solos. A veces porque los has trabajado durante la semana. Yo es verdad que me siento m¨¢s c¨®modo en esas transiciones, en esos ataques r¨¢pidos. Me gusta moverme. Me gusta correr. Sin darme cuenta he aparecido en el lado derecho y Jaime [Mata] me ha gritado: ¡°?Pero ad¨®nde vas!¡±. Aqu¨ª los 14 que entran cada partido lo sienten de la misma manera.

P. Se ofrece constantemente a su portero, David Soria, para iniciar las jugadas. Pero ¨¦l casi siempre lo ignora y saca en largo a Molina. ?Ese desmarque hacia atr¨¢s est¨¢ pensado para enga?ar a los rivales o de verdad lo hace para que le den la pelota a usted?

R. ?Yo quiero que me la d¨¦! ?Alg¨²n d¨ªa me la pasar¨¢!

P. El Getafe es un equipo de posesiones cortas. ?C¨®mo vive la actividad constante sin el bal¨®n?

Con Mendilibar aprend¨ª a jugar en zonas intermedias. Al apretar sales de tu zona y te quedas entre dos rivales; y al que le vaya el bal¨®n t¨² lo aprietas con ayuda de los de atr¨¢s. Entenderlo me ayud¨® a entender a Bordal¨¢s

R. Yo intento dar soluciones a mis compa?eros. Que vean que pueden contar conmigo, que siempre que tengan el bal¨®n yo les voy a ofrecer un pase, que intentar¨¦ ayudarles. Aqu¨ª, sobre todo, destacamos por salir r¨¢pido a la contra. Una de nuestras caracter¨ªsticas es apretar arriba donde intuyes que el rival puede cometer un fallo para poder sacar algo de provecho. Ha habido algunas jugadas, como la del gol al Alav¨¦s, que vinieron por un robo m¨ªo. Ese tipo de jugadas se me est¨¢n dando bien. Me estoy sintiendo a gusto con los t¨¦cnicos y los compa?eros. El buen rollo fuera del campo repercute dentro. Se ve que somos como una familia.

P. ?Esa agresividad en la transici¨®n, ese pensar mucho en atacar cuando defiende y en defender mientras ataca, se consigue con entrenamiento o est¨¢ en el temperamento del jugador?

R. Es innato. Pero tambi¨¦n se puede entrenar. En el Eibar con Mendilibar aprend¨ª a jugar con planteamientos muy arriesgados. Ten¨ªamos la defensa muy arriba y los ataques empezaban muy arriba tambi¨¦n. Mendilibar nos hac¨ªa estar en posiciones intermedias. Ves que a los jugadores que han llegado nuevos al Eibar este a?o les est¨¢ costando. Porque si no pillas bien la idea te ves un poco perdido. Entenderme tan bien con Mendilibar me ayud¨® mucho con Bordal¨¢s, porque nos pide algo parecido.

P. ?C¨®mo se presiona en posiciones intermedias?

R. Al apretar sales de tu zona y te quedas entre las zonas que ocupan dos jugadores rivales; y al que le vaya el bal¨®n t¨² lo aprietas con el acompa?amiento de los de atr¨¢s. Apretar se me da bien. Yo he sido siempre lateral y es algo que llevas dentro, pero cuando presionas m¨¢s arriba te entran m¨¢s ganas de correr porque sabes que si robas puedes crear una ocasi¨®n de peligro a favor.

P. ?El f¨²tbol sala le aport¨® alguna cosa en este sentido?

R. Mi padre me apunt¨® a f¨²tbol sala porque cre¨ªa que era muy peque?o para el f¨²tbol siete y se me quedaba muy grande el campo. Ah¨ª quiz¨¢s coges un poco m¨¢s de chispa o movilidad. Pero yo donde aprend¨ª a atacar de esta manera fue en la cantera del Bar?a. Porque all¨ª los dos laterales juegan pr¨¢cticamente como extremos, en equipos que tienen el bal¨®n todo el rato. Crecer como lateral en La Mas¨ªa me ha ayudado a poder entender el puesto de extremo tal y como lo desarrollo en el Getafe.

P. ?Los laterales son los jugadores que m¨¢s espacio y m¨¢s tiempo tienen, en este f¨²tbol de presi¨®n y contrapresi¨®n?

R. La Liga est¨¢ muy igualada por eso. Porque los equipos se plantan muy bien en el campo y es muy dif¨ªcil hacer ocasiones y que te las hagan. La porter¨ªa est¨¢ en el centro y todo el mundo protege m¨¢s la zona del centro y deja m¨¢s libres las bandas. Afuera siempre hay un d¨¦ficit porque al final alguno se queda descolgado. Creo que ah¨ª nosotros estamos haciendo da?o. Tenemos buenos delanteros que van bien el remate y nosotros intentemos sacarles el mayor provecho jugando por banda y poni¨¦ndoles centros y aprovechando esos pocos espacios que dejan los rivales para llegar al gol.

P. ?Los laterales son m¨¢s importantes que nunca en este f¨²tbol?

R. Yo en la banda no me aburro. Los entrenos est¨¢n bien porque es donde puedes mejorar. Pero lo que nos gusta a los jugadores es jugar los partidos porque es donde est¨¢n los puntos. Esos nervios y esa emoci¨®n no la encuentras en ninguna parte. Sentir que por una acci¨®n tuya, un esfuerzo m¨¢s, puedes salvar al equipo o puedes ayudar o marcar un gol es la motivaci¨®n y la esencia del f¨²tbol.