Zidane: ¡°Me voy del Real Madrid porque no siento la confianza del club¡±

Y Zinedine Zidane cogi¨® su fusil. Cinco d¨ªas despu¨¦s de anunciarse su salida del banquillo del Real Madrid cuando a¨²n le quedaba un a?o de contrato, el franc¨¦s se lanz¨® a hablar y apunt¨® al club y, por extensi¨®n a su presidente, Florentino P¨¦rez, como la raz¨®n de no continuar en Valdebebas. En una carta abierta publicada por el diario As, fueron mucho...

Y Zinedine Zidane cogi¨® su fusil. Cinco d¨ªas despu¨¦s de anunciarse su salida del banquillo del Real Madrid cuando a¨²n le quedaba un a?o de contrato, el franc¨¦s se lanz¨® a hablar y apunt¨® al club y, por extensi¨®n a su presidente, Florentino P¨¦rez, como la raz¨®n de no continuar en Valdebebas. En una carta abierta publicada por el diario As, fueron muchos y muy duros los argumentos que desarroll¨® el entrenador franc¨¦s para explicar su adi¨®s. Un cabezazo en toda regla a la direcci¨®n blanca.

Paso por paso, el t¨¦cnico acus¨® a la c¨²pula de falta de ¡°memoria, confianza y apoyo para construir algo a medio y largo plazo¡±; de ¡°filtraciones¡± interesadas a la prensa de que lo iban a echar si no ganaba el siguiente partido, de las que solo se salvaba con ¡°grandiosas victorias¡± de ¡°los chicos maravillosos¡± que estaban ¡°a muerte¡± con ¨¦l, en referencia a la plantilla; y de que le llegaran a reprochar, a su juicio, la red de relaciones humanas que teji¨® en el vestuario. Pocos se libraron de los ataques de Zizou, tampoco la prensa, a la que acus¨® de buscar la pol¨¦mica en lugar de hablar de f¨²tbol.

A diferencia de sus otras dos despedidas, como jugador en 2006 y entrenador en 2018, esta vez el t¨¦cnico no compareci¨® ante la prensa ni en ninguna plataforma oficial del club para explicar su marcha. En esta ocasi¨®n lo ha hecho a su manera: se conoci¨® su partida cuando ¨¦l quiso al comunic¨¢rselo a la plantilla, y ha expuesto sus razones cu¨¢ndo y d¨®nde ha deseado. Seguramente porque le hubiera resultado imposible desgranar este pliego de acusaciones en una comparecencia conjunta con el presidente u otro miembro de la instituci¨®n. Una muestra m¨¢s de que en 2021 la separaci¨®n result¨® m¨¢s agria y abre m¨¢s brechas.

¡°Me dol¨ªa cuando le¨ªa despu¨¦s de una derrota que me iban a echar si no ganaba el siguiente. Estas filtraciones creaban interferencias con la plantilla¡±

El escrito arranc¨® con un agradecimiento a los aficionados y a Florentino P¨¦rez, ¡°al presi¡±, cuando apost¨® por ¨¦l en 2001 para traerlo al Real Madrid ¡°cuando hab¨ªa cierta gente en contra¡±, asegura. Pero superado este pre¨¢mbulo, la carta arremeti¨® con dureza contra la actuaci¨®n reciente de la entidad. ¡°Me hubiera gustado que en los ¨²ltimos meses mi relaci¨®n con el club y con el presidente hubiera sido un poquito diferente a la de otros entrenadores. No ped¨ªa privilegios, sino un poco m¨¢s de memoria. Hoy la vida de un t¨¦cnico en el banquillo de un gran club es de dos temporadas, no mucho m¨¢s. Para que dure m¨¢s las relaciones humanas son esenciales, m¨¢s importantes que el dinero, que la fama y que todo. Por eso me dol¨ªa much¨ªsimo cuando le¨ªa en la prensa, despu¨¦s de una derrota, que me iban a echar si no ganaba el siguiente partido. Me dol¨ªa a m¨ª y a todo el equipo porque estos mensajes filtrados intencionalmente a los medios creaban interferencias con la plantilla, creaban dudas y malentendidos. Menos mal que ten¨ªa a unos chicos maravillosos que estaban a muerte conmigo. Cuando la cosa se pon¨ªa fea me salvaban con grandiosas victorias. Porque cre¨ªan en m¨ª y sab¨ªan que cre¨ªa en ellos. S¨¦ perfectamente lo que necesita un equipo¡±, advirti¨® en su carta abierta en As.

La gesti¨®n del vestuario

Nada m¨¢s empezar la misiva, Zidane dej¨® claro que esta salida nada tiene que ver con la que protagoniz¨® en su primera etapa en el banquillo blanco a los pocos d¨ªas de ganar la tercera Champions seguida. ¡°No me tiro del barco y no estoy cansado de entrenar. En mayo del 2018 me fui porque despu¨¦s de dos a?os y medio con tantos trofeos sent¨ªa que el equipo necesitaba un nuevo discurso para mantenerse en lo m¨¢s alto. Hoy las cosas son diferentes¡±, matiz¨® el franc¨¦s. ¡°Me voy porque siento que el club ya no me da la confianza que necesito, no me ofrece el apoyo para construir algo a medio o largo plazo. Conozco el f¨²tbol y la exigencia de un club como el Madrid, s¨¦ que cuando no ganas te tienes que ir. Pero aqu¨ª se ha olvidado una cosa muy importante, se ha olvidado todo lo que he construido en el d¨ªa a d¨ªa, lo que he aportado en la relaci¨®n con los jugadores, con las 150 personas que trabajan con el equipo. Soy un ganador nato y estaba aqu¨ª para conquistar trofeos, pero m¨¢s all¨¢ de esto est¨¢n los seres humanos, las emociones, la vida, y tengo la sensaci¨®n de que estas cosas no han sido valoradas, de que no se ha entendido que as¨ª tambi¨¦n se mantiene la din¨¢mica de un gran club. Incluso, de cierta forma, se me ha reprochado¡±, a?adi¨® con crudeza.

¡°Se ha olvidado todo lo que he construido, lo que he aportado en la relaci¨®n con los jugadores. No se ha entendido que as¨ª tambi¨¦n se mantiene la din¨¢mica de un gran club. Incluso se me ha reprochado¡±

Esa forma de gestionar el vestuario, el aspecto que siempre se consider¨® su gran virtud para sacar el m¨¢ximo rendimiento a un grupo de grandes nombres complejo de manejar, se convirti¨® ahora, a su entender, en un punto negativo, en una de las razones por las que enfil¨® la puerta de salida cuando todav¨ªa le quedaba un a?o de contrato. Toda una paradoja.

Durante meses y de forma poco clara, Zidane fue mostrando las dudas respecto a su continuidad, que ni siquiera disminuyeron con la buena racha final del equipo. Los motivos, por todo lo que expuso de forma muy contundente en esta carta, no estaban en el vestuario, con el que lleg¨® hasta semifinales de la Champions y con opciones en la ¨²ltima jornada de revalidar el t¨ªtulo liguero pese al flojo inicio, sino m¨¢s arriba y en cuestiones siempre espinosas. Con algo tan sensible como las relaciones personales.

Pocos quedaron al margen de este desahogo final del franc¨¦s. Tampoco la prensa, que se llev¨® la ¨²ltima andanada. En los ¨²ltimos meses, cuando el runr¨²n sobre su futuro era creciente y ¨¦l mismo lo alimentaba con evasivas, a los periodistas les afe¨® en varias ocasiones desde la sala de prensa que no le preguntaran de f¨²tbol, aunque, cuando lo hac¨ªan, sus respuestas resultaban igual de vagas que sobre su continuidad. No obstante, en el remache de la carta insisti¨® en el reproche: ¡°Me hubiera gustado que las preguntas no fueran siempre dirigidas hacia la pol¨¦mica, que hubi¨¦ramos charlado m¨¢s a menudo de la pelota y ante todo de los jugadores¡±, zanj¨® Zidane en un escrito que se pareci¨® bastante a un portazo.

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