El estir¨®n de Take Kubo en Mallorca
El japon¨¦s del Madrid, que regres¨® a la isla tras dos pr¨¦stamos fallidos y un papel brillante en los Juegos, se muestra m¨¢s certero en la ¨²ltima decisi¨®n, bromea con los veteranos y ya conduce su coche
Cuando Take Kubo (Kawasaki, Jap¨®n; 20 a?os) se baj¨® del coche en la ciudad deportiva del Mallorca para empezar su segunda ¨¦poca en el club, lo hizo del asiento del conductor. El autom¨®vil era el mismo de su primera etapa, un SUV Audi negro, pero ahora iba ¨¦l al volante en lugar de su madre, que es quien le llevaba y tra¨ªa en la temporada 2019-20. El curso siguiente, que Kubo vivi¨® lejos de la isla, el japon¨¦s pas¨® por dos cesiones decepcionantes (Vil...
Cuando Take Kubo (Kawasaki, Jap¨®n; 20 a?os) se baj¨® del coche en la ciudad deportiva del Mallorca para empezar su segunda ¨¦poca en el club, lo hizo del asiento del conductor. El autom¨®vil era el mismo de su primera etapa, un SUV Audi negro, pero ahora iba ¨¦l al volante en lugar de su madre, que es quien le llevaba y tra¨ªa en la temporada 2019-20. El curso siguiente, que Kubo vivi¨® lejos de la isla, el japon¨¦s pas¨® por dos cesiones decepcionantes (Villarreal y Getafe), perdi¨® contra M¨¦xico el partido por el bronce en los Juegos Ol¨ªmpicos de Tokio y se sac¨® el carn¨¦ de conducir.
Despu¨¦s lleg¨® el momento de escoger d¨®nde continuar su proceso de maduraci¨®n bajo vigilancia del Real Madrid, que le contrat¨® en el verano de 2019, cuando cumpli¨® 18 a?os, y se dieron cuenta de que el Barcelona, pese a haberle tenido cuatro a?os en La Masia, no hab¨ªa movido ficha. Take contempl¨® entonces ofertas de clubes con aspiraciones m¨¢s altas, como la Real Sociedad, clasificada para la Europa League. Pero ¨¦l quer¨ªa regresar a un lugar que consideraba su casa. ¡°Aqu¨ª me s¨¦ las calles, me s¨¦ todo¡±, dijo a los empleados del club al volver. Intent¨® incluso mudarse a la misma vivienda que hab¨ªa ocupado con su madre la primera ¨¦poca, en Son Rapinya, cerca del estadio. Pero no estaba libre. Entonces decidi¨® alejarse un poco e instalarse en Puerto Portals, donde Florentino P¨¦rez sol¨ªa amarrar su barco. Tambi¨¦n donde un d¨ªa de 2006 Marco Asensio conoci¨® al presidente del Real Madrid y oy¨® a su padre decirle que un d¨ªa jugar¨ªa para ¨¦l.
Take no pudo volver a su vieja casa, pero s¨ª regresar en su viejo coche a algo parecido a un hogar. Lo detect¨® enseguida el entrenador, Luis Garc¨ªa Plaza, que no estaba all¨ª en la primera ¨¦poca: ¡°El primer d¨ªa le vi sonre¨ªr. Empez¨® a saludar, a chocar manos. Eso le da mucho a un chaval joven porque sabe que le quieren. Hablo de club, afici¨®n, entrenador y el mismo vestuario¡±, cont¨® hace unos d¨ªas en una entrevista en Diario de Mallorca.
El japon¨¦s se encontraba en su salsa y, seg¨²n una fuente del Mallorca, un poco m¨¢s: ¡°Manolo Reina [el portero, de 36 a?os] siempre ha sido el que m¨¢s encima ha estado de ¨¦l, el m¨¢s bromista. En la primera ¨¦poca, Take estaba un poco cortado, pero ahora le devuelve las bromas a Reina desde el principio¡±.
Despu¨¦s de la experiencia fallida en el Villarreal (299 minutos en 13 partidos de Liga) y en el Getafe (805 en 18), decidi¨® repetir donde se hab¨ªa sentido importante. En la temporada 2019-20 acumul¨® con el Mallorca 2.312 minutos en 35 partidos ligueros: marc¨® cuatro goles y dio cuatro asistencias. ¡°Quiere jugar, y sab¨ªa que aqu¨ª, trabajando, iba a ser un jugador importante¡±, dicen en el Mallorca.
Desde Jap¨®n, donde Take ya es una figura con una relevancia enorme, contemplan el proceso con inter¨¦s. Ricardo Rodr¨ªguez, entrenador espa?ol de los Urawa Red Diamonds, sexto en la Liga, cree que en este punto resulta muy importante ¡°el contexto del equipo al que vaya, que sea un equipo con un estilo de juego en el que encaje¡±, dice. ¡°No va a ser como en la selecci¨®n ol¨ªmpica japonesa, donde el equipo jugaba para ¨¦l. Eso va a ser m¨¢s dif¨ªcil all¨ª, pero s¨ª que el contexto le ayude a seguir madurando. En Jap¨®n va a ser referente para muchos a?os, pero en Europa est¨¢ por ver¡±.
En el Mallorca, donde el vestuario lo reconoci¨® al volver como uno de los suyos, ya han detectado evoluci¨®n. Ven un futbolista mucho m¨¢s seguro de s¨ª mismo, m¨¢s hecho f¨ªsicamente, m¨¢s comprometido en defensa, y que ha diluido bastante las dudas que le acechaban en el instante de la ¨²ltima decisi¨®n. En esas zonas calientes cercanas al gol, escoge mejor, se ofrece m¨¢s y es la referencia que m¨¢s buscan sus compa?eros en ataque, cuando ronda la mediapunta o cuando parte desde la banda derecha.
Para eso regres¨® a su isla, al calor de un club que lo cobija de los medios, por su mezcla de timidez y temor a dejar escapar una inconveniencia. Pero, sobre todo, a un equipo donde conf¨ªan en la creatividad de su f¨²tbol, y a unas carreteras que conoce y por las que ya maneja ¨¦l mismo su autom¨®vil de la otra vez.
Puedes seguir a EL PA?S DEPORTES en Facebook y Twitter, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.