Pablo Fornals noquea al Liverpool
El volante espa?ol desmantela al equipo de Klopp a base de pases, asistencias y goles, y eleva al West Ham al tercer puesto de la Premier, igualado a 23 puntos con el Manchester City, que es segundo
Alguien dijo que los buenos jugadores nunca se paran. Pablo Fornals represent¨® a los incansables, los que siempre se mueven porque siempre creen que pueden participar de alguna manera en cada uno de los acontecimientos de los partidos que juegan, por m¨¢s remotos que parezcan. As¨ª, fresco y activo, como si el tiempo corriera en su favor, lleg¨® Fornals al ¨²ltimo minuto del partido que al Liverpool se le hizo eterno este domingo. La victoria contra el Atl¨¦tico en Champions, el pasado mi¨¦rcoles, pas¨® factura en diferido sobre la expedici¨®n que viaj¨® a Londres a enfrentarse al West Ham, equipo en ascenso progresivo, revelaci¨®n de la Premier, tercer clasificado a costa del Liverpool bajo la direcci¨®n del futbolista de Castell¨®n, decisivo en los tres goles locales del 3-2 que reluci¨® en el marcador del London Stadium.
Pocos destinos se presentaban m¨¢s inh¨®spitos para Pablo Fornals cuando abandon¨® el Villarreal en el verano de 2019. Primero, porque Manuel Pellegrini lo releg¨® en favor de Lanzini, y el equipo casi baj¨® a Segunda. Luego, porque el hombre que lleg¨® para reemplazar a Pellegrini en el banquillo fue David Moyes, un entrenador chapado a la antigua. Tu¨¦tano del viejo f¨²tbol brit¨¢nico, insisti¨® en organizar el juego en virtud de principios primarios. Formaci¨®n de 4-4-2, aversi¨®n a la elaboraci¨®n, centro del campo vedado a los pases de riesgo, b¨²squeda persistente del nueve tanque y cultivo meticuloso del bal¨®n parado. Un verdadero desierto para Fornals, a quien Iniesta un d¨ªa se?al¨® como el arquetipo de los interiores ligeros que tanta gloria dieron al f¨²tbol espa?ol.
Dos a?os y una pandemia despu¨¦s, Fornals no solo sobrevive sino que lidera al West Ham. El zarpazo al Liverpool no es casualidad. Es la consecuencia de una progresi¨®n que ya elev¨® al equipo entre los cuatro primeros de la Premier durante varias jornadas de la temporada pasada. Este domingo no desaprovech¨® la ocasi¨®n. Cuando el equipo de Klopp afloj¨® la tensi¨®n de su presi¨®n tras p¨¦rdida, los contragolpes se sucedieron como martillazos. El primero, a los cuatro minutos, fue el anticipo de lo que suceder¨ªa en los siguientes 90. Robo en campo local, lanzamiento de Fornals al espacio que se abr¨ªa entre Alexander-Arnold y Matip, y carrera de Michail Antonio. La jugada acab¨® en c¨®rner. Del c¨®rner, lanzado por Fornals, deriv¨® el gol. M¨¢s que un centro, fue un tiro a puerta con efecto de par¨¢bola. Alisson se lo trag¨®. El ¨¢rbitro dictamin¨® que hab¨ªa sido gol en propia meta del portero.
La reacci¨®n del Liverpool fue inmediata, armoniosa, digna de un equipo grandioso que se rebela contra el resultado. Van Dikj, Fabinho, Man¨¦, Salah y Alexander-Arnold compusieron algunas de las mejores jugadas que han hecho esta temporada. Atacaron con continuidad y mucha clase. Salah provoc¨® una falta en la medialuna del ¨¢rea que Alexander-Arnold convirti¨® en el 1-1 con un tiro sublime. Pero poco m¨¢s pudo rascar el Liverpool tras una hora de incesante erosi¨®n. Traspasado ese tiempo, Henderson y sus compa?eros debieron descubrir que a costa de presi¨®n, desmarques y permutas, hab¨ªan desgastado menos a la doble l¨ªnea defensiva que se les interpon¨ªa ante la porter¨ªa de Fabianski que a sus propias piernas cansadas despu¨¦s de la semana de Champions.
Klopp gesticulaba en la banda intentando mantener el orden y elevar el esp¨ªritu de sus jugadores agotados cuando Fornals, que a cada instante se hac¨ªa m¨¢s presente, m¨¢s activo, m¨¢s l¨²cido, se ofreci¨® en el mediocampo para iniciar otro contragolpe. Man¨¦ no pudo proteger la pelota, Soucek se la rob¨® y Rice hizo lo que hac¨ªan casi todos sus compa?eros en caso de agitaci¨®n: d¨¢rsela al espa?ol. Cuando Fornals recibi¨® la pelota ya hab¨ªa concebido la jugada. Habilit¨® de primeras a Bowen a su derecha y lanz¨® el desmarque. Cuarenta metros de carrera mientras Bowen atra¨ªa a Van Dijk y a Matip, antes de devolverle el bal¨®n. Fornals defini¨® de zurda ante la salida de Alisson y lo celebr¨® haciendo la venia frente al fondo abarrotado.
Tres c¨®rnres, dos goles
La entrada de Thiago no hab¨ªa sacado al Liverpool de su estupor cuando Fornals escap¨® a la vigilancia de Henderson y Fabinho para recibir otro bal¨®n de Soucek y jugar de primeras para Antonio. Con la defensa del Liverpool deshecha, fue una heroicidad que Van Dijk evitara el mano a mano con el portero para despejar a c¨®rner. Fue el tercer c¨®rner del West Ham. El primero fue gol ol¨ªmpico, segundo fue un cabezazo de Zouma al travesa?o, y el ¨²ltimo fue otro cabezazo de Zouma. Solo de nuevo en el segundo palo, el central que vino del Chelsea transform¨® el 3-1.
El Liverpool ya no abandon¨® su estado de agon¨ªa. El gol de Origi apenas sirvi¨® de paliativo en el largo asedio que se prolong¨® hasta la conclusi¨®n de una velada inolvidable en los suburbios del este de Londres, cada vez m¨¢s entusiasmados con este West Ham de Pablo Fornals, que ya es tercer clasificado de la Premier con 23 puntos, los mismos que el Manchester City.
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