Rumbo a la historia, la imperial Muguruza

Imponente, jer¨¢rquica, imperial. E hist¨®rica. Garbi?e Muguruza roz¨® la perfecci¨®n en direcci¨®n a su primera final de la Copa de Maestras, devorando un duelo que tuvo en la mano de cabo a rabo con una propuesta gran¨ªtica que marchit¨® a Paula Badosa (doble 6-3, en 1h 26m) y la convirti¨® en la segunda finalista espa?ola en la Copa de Maestras, despu¨¦s de que Arantxa S¨¢nchez Vicario alcanzase la de 1993. De menos a m¨¢s en el torneo de Guadalajara, la caraque?a acab¨® imponiendo galones y experiencia, y tien...

Imponente, jer¨¢rquica, imperial. E hist¨®rica. Garbi?e Muguruza roz¨® la perfecci¨®n en direcci¨®n a su primera final de la Copa de Maestras, devorando un duelo que tuvo en la mano de cabo a rabo con una propuesta gran¨ªtica que marchit¨® a Paula Badosa (doble 6-3, en 1h 26m) y la convirti¨® en la segunda finalista espa?ola en la Copa de Maestras, despu¨¦s de que Arantxa S¨¢nchez Vicario alcanzase la de 1993. De menos a m¨¢s en el torneo de Guadalajara, la caraque?a acab¨® imponiendo galones y experiencia, y tiene a tiro un laurel de lujo.

La ex n¨²mero uno, que cerrar¨¢ la temporada en la tercera posici¨®n de la clasificaci¨®n con su ascenso desde el quinto puesto, derrot¨® a la catalana en un pulso de un solo sentido y se medir¨¢ este jueves (2.30 en La1/DAZN) con la estonia Anett Kontaveit (6-1, 3-6 y 6-3 a la griega Maria Sakkari). La espa?ola, ganadora de dos grandes (Roland Garros 2016 y Wimbledon 2017) y que alcanz¨® la cima del circuito en septiembre de 2017, brilla en tierras mexicanas como hac¨ªa tiempo que no lograba. Hay conexi¨®n: ¡°Aqu¨ª me siento en casa¡±.

Montada sobre la bola durante todo el primer parcial, Muguruza acorral¨® a Badosa y firm¨® una manga impecable, incisiva en cada pelota y con el cuchillo entre los dientes en cada resto. Dominadora, la cinco del mundo quiso dejar claro desde el principio que quien mandaba era ella, y la ofensiva se tradujo en un martirio para la catalana, exigida todo el rato, ahogada, presionada en cada punto y adherida a una mala sensaci¨®n que se le peg¨® como un chicle en la zapatilla. Lo intent¨®, guerre¨® y se resisti¨®, pero abri¨® demasiado la puerta.

Lo pas¨® mal y se torci¨® pronto Badosa, alica¨ªda y nerviosa, tardana en la carrera y mal en los apoyos; sucia la ejecuci¨®n, demasiada pelota corta y demasiada al pasillo. Perdi¨® finura y en un santiam¨¦n se encontr¨® en un callej¨®n sin salida, en una desagradable situaci¨®n para una tenista que desborda al ataque y juega a disgusto en la fase defensiva. No acostumbra a ir a remolque, sino a gobernar, y esta vez hizo la goma. Se desinfl¨®. Y se apropi¨® del tim¨®n Muguruza, que no lo solt¨® un solo segundo, agresiva e intimidatoria. Garbi?e en su mejor expresi¨®n.

Rompi¨® la caraque?a en el cuarto juego y esprint¨® sin mirar hacia atr¨¢s, a todo gas y sin despiste alguno. En modo m¨¢quina. Dos indicadores: serrucho con los dientes y contoneo el¨¦ctrico al resto. De zarpazo en zarpazo. Una jugadora en ¨®rbita. Buscaba aire Badosa, pero a cada avance a?ad¨ªa luego un retroceso, agobiada y peloteando siempre en desventaja, a raya todo el rato. Garbi?e golpe¨® otra vez para cerrar el parcial y en la continuaci¨®n mantuvo la misma l¨ªnea, ni un paso atr¨¢s, sino otro hacia adelante, break para 2-0 y despu¨¦s serenidad. Sencillamente, lo bord¨®.

Siete d¨ªas de menos a m¨¢s

Al nivel de sus mejores d¨ªas, esos que la condujeron hacia la cima e invitaban a pensar en una era con ella al frente, Muguruza domin¨® de inicio a fin, garrotazo va y garrotazo viene, soberbia tambi¨¦n en el repliegue cuando proced¨ªa.

Badosa lim¨® y propuso un arre¨®n, pero se dio de bruces con la respuesta autoritaria de la caraque?a, firme para anular tres opciones de rotura en el tercer juego ¡ªlas tres ¨²nicas que dispuso la 10 del mundo¡ª y contundente a la hora de rematar la faena. Sin cavilar, con el turbo y un fabuloso porcentaje con los primeros servicios (81%), puso el lazo al duelo a lo grande.

Presente en las ediciones 2015, 2016 y 2017, su tope hab¨ªan sido las semifinales de hace seis a?os y ahora est¨¢ a un solo paso del trofeo. Reluce Muguruza despu¨¦s de haber estado contra las cuerdas, ya que arranc¨® en falso, con una derrota contra Karolina Pliskova en el primer compromiso de la fase de grupos y remont¨® en el segundo a otra checa, Barbora Krejcikova; despu¨¦s, obligada a ganar, bati¨® a Kontaveit, que enlazaba 12 triunfos consecutivos y aterriz¨® en tierras mexicanas tras haber conquistado dos torneos seguidos (Mosc¨² y Transilvania).

Unirse a Orantes y Corretja

Finalista el curso pasado en el Open de Australia, este a?o la espa?ola no ha podido brillar en los grandes ¡ªno ha franqueado la barrera de los octavos en ninguno¡ª, pero su rendimiento en el primer trimestre, la regularidad tras el verano y los premios obtenidos en Dub¨¢i y Chicago le concedieron un billete para el Masters, y le han devuelto a la zona m¨¢s alta del listado mundial. De hecho, solo Ashleigh Barty y Sabalenka figurar¨¢n por delante de ella a partir del pr¨®ximo lunes.

Ahora, el gran reto que tiene por delante es conseguir el primer cetro maestro femenino. Arantxa no pudo lograrlo hace 28 a?os, cuando cedi¨® contra la alemana Steffi Graf en el Madison Square Garden por 6-1, 6-4, 3-6 y 6-1. En la modalidad individual, solo Manolo Orantes (1976) y Alex Corretja (1998) lograron triunfar en el torneo de los mejores del a?o, tras vencer al polaco Wojtek Fibak en Houston y a Carlos Moy¨¢ en Hannover, respectivamente. Hoy por hoy, por derecho propio y subida en la ola mexicana, el turno es para ella.

Puedes seguir a EL PA?S DEPORTES en Facebook y Twitter, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.