¡°?Yo ten¨ªa al pr¨ªncipe en el banquillo!¡±
Entrenadores espa?oles que dirigen en Arabia Saud¨ª cuentan la particular manera en que se vive el f¨²tbol en el pa¨ªs
Cuando le dijeron d¨®nde ten¨ªa que ir a ver jugar a esos ni?os que tan bien se desenvolv¨ªan con el bal¨®n, Juan Ram¨®n L¨®pez Caro, entrenador que pas¨® por el Madrid, el Levante y el Celta, entre otros, se frot¨® los ojos de incredulidad. ¡°?En el desierto?¡±, pregunt¨® varias veces. Pero la respuesta no vari¨® porque en 2012, cuando accedi¨® al cargo de director deportivo de la selecci¨®n de Arabia Saud¨ª, no hab¨ªa competiciones nacionales en categor¨ªas inferiores, sino que se quedaban en provinciales. ¡°Normalmente, nos avisaban de que hab¨ªa un chico muy bueno a trav¨¦s de alg¨²n contacto de la federaci¨®n,...
Cuando le dijeron d¨®nde ten¨ªa que ir a ver jugar a esos ni?os que tan bien se desenvolv¨ªan con el bal¨®n, Juan Ram¨®n L¨®pez Caro, entrenador que pas¨® por el Madrid, el Levante y el Celta, entre otros, se frot¨® los ojos de incredulidad. ¡°?En el desierto?¡±, pregunt¨® varias veces. Pero la respuesta no vari¨® porque en 2012, cuando accedi¨® al cargo de director deportivo de la selecci¨®n de Arabia Saud¨ª, no hab¨ªa competiciones nacionales en categor¨ªas inferiores, sino que se quedaban en provinciales. ¡°Normalmente, nos avisaban de que hab¨ªa un chico muy bueno a trav¨¦s de alg¨²n contacto de la federaci¨®n, de alg¨²n aficionado o amigo¡ Entonces, los tra¨ªamos a nuestras instalaciones para verlos y muchos te sorprend¨ªan¡±, reconoce ahora L¨®pez Caro; ¡°funcionaba porque cuando dirig¨ª la selecci¨®n un a?o m¨¢s tarde (relevo de Frank Rijkaard), ten¨ªa a cinco jugadores sub-21 que hab¨ªa sacado del desierto¡±. Se esmer¨® en cambiar el modelo y logr¨® que la federaci¨®n creara las ligas nacionales e impusiera a los clubes la creaci¨®n de equipos desde los 13 hasta los 19 a?os, al punto de que ahora un infantil hace los mismos vuelos que un profesional. Un paso de gigante para la cantera del pa¨ªs que, sin embargo, siempre est¨¢ a la vanguardia del f¨²tbol en el Golfo porque le sobra pasi¨®n y dinero.
Es rara la ocasi¨®n en la que un equipo de Arabia Saud¨ª no alcanza las semifinales de la Champions de Asia, torneo que ha ganado el Al Hilal dos veces en las tres ¨²ltimas ediciones, equipo puntero junto con el Al Ittihad, Al Nassr y Al Shabab. ¡°Son los grandes olvidados del f¨²tbol mundial. Los mejores equipos del pa¨ªs no desentonar¨ªan en la Liga porque el salario medio es de 1,2 millones netos y hay alg¨²n extranjero que cobra entre seis y siete millones de euros¡±, expone Ra¨²l Caneda, exayudante de Lillo en la Real y Almer¨ªa, tambi¨¦n t¨¦cnico de dos equipos saud¨ªes en tres ¨¦pocas distintas. ¡°Es un nivel de Primera. M¨¢s que nada porque la normativa permite tener a siete extranjeros por equipo y la mayor¨ªa tienen mucho nivel. Yo tuve a Banega, N¡¯Diaye, al portero de T¨²nez (Ben Mustapha)¡¡±, se suma Luis Garc¨ªa Plaza, ahora entrenador del Mallorca y en 2019 del Al Shabab. Tambi¨¦n destacan futbolistas como El Ahmadi, Ighalo, Funes Mori, Vincent Aboubakar o Romarinho, entre otros.
¡°No van a traer a Messi o Cristiano Ronaldo, pero invierten en buenos fichajes y miran mucho el curr¨ªculo, que hayan jugado en grandes clubes de Europa¡±, cuenta Pablo Mach¨ªn, que dirigi¨® al Girona, Sevilla y Alav¨¦s antes de llegar a Arabia Saud¨ª, primero fue entrenador del Al Ain y ahora del Al Raed. ¡°Un nivel top. Junto con la liga china y la japonesa, son las mejores del continente. Algo normal porque tienen mucho dinero y los jugadores encima no pagan impuestos al ser un para¨ªso fiscal¡±, resuelve Carlos Inarejos, que ahora est¨¢ en el Karpaty Halych, de Ucrania, pero antes pas¨® por el Al Hilal y Al Shabab.
Los futbolistas locales, en cualquier caso, no desentonan. ¡°Son bastante buenos, tienen predilecci¨®n por el f¨²tbol de toque y siempre quieren ser lo que llaman playmaker, un 8 o un 10¡å, cuenta Luis Garc¨ªa. ¡°Pero son conformistas y no quieren ir a Europa porque si est¨¢n fuera, como me ocurri¨® a m¨ª con la pretemporada que hice en Espa?a, me dec¨ªan que echaban de menos el desierto¡±, agrega Mach¨ªn. ¡°Tambi¨¦n porque ganan mucho dinero y son realmente ¨ªdolos para una sociedad en la que tampoco hay tantos divertimentos. Su pasi¨®n es similar a la de Turqu¨ªa y en la final de Copa, por ejemplo, los aficionados entran cinco horas antes al estadio y el partido lo siguen 25 millones de espectadores¡±, apostilla Caneda. ¡°Y si solo te fijas en la hinchada de los estadios, no se sabe qui¨¦n gana porque desde el principio al final no paran de cantar¡±, expone Mach¨ªn.
Aunque en ¨¦poca de covid no hay tantos aficionados en los campos, sino que se encuentran varios amigos en casas de verano o de fin de semana para ver los encuentros y, sobre todo, expresarse en las redes sociales. ¡°Es una locura c¨®mo viven colgados a estas aplicaciones¡±, constata Mach¨ªn. ¡°El mundo Twitter es un hervidero¡±, apunta Luis Garc¨ªa. ¡°Es su v¨¢lvula de escape y cualquier presidente tiene dos millones de seguidores en sus redes¡±, resalta Caneda. ¡°Esa ambici¨®n que no muestran los futbolistas s¨ª la tiene la afici¨®n, que quiere ganar y jugar mejor que el rival. Y eso, en ocasiones, afecta a las decisiones que se toman en los clubes¡±, recoge el testigo Mach¨ªn. Por eso, en 15 jornadas de la Liga se han dado 15 cambios de entrenador y alg¨²n equipo ya lleva tres t¨¦cnicos en este curso.
¡°Viven con la teor¨ªa de ¡®lo quiero y lo quiero ya¡¯ porque quiz¨¢ ese es el poder que da el dinero¡±, argumenta Mach¨ªn. ¡°Es terrible, es el lugar del mundo con m¨¢s volatilidad. Yo, por ejemplo, fui destituido del Al Nassr cuando iba l¨ªder. Habr¨ªa que preguntarle al pr¨ªncipe por qu¨¦ tom¨® esa decisi¨®n¡ Aunque luego me fich¨® un par de a?os m¨¢s tarde¡±, lamenta Caneda. ¡°Es la presi¨®n de los due?os o los pr¨ªncipes que est¨¢n detr¨¢s de los equipos porque hacen muchas inversiones y quieren resultados. Yo ten¨ªa un jeque que me llamaba a las once de la noche y me dec¨ªa que fuera a su casa para que le explicara lo que hac¨ªa, qu¨¦ fichajes quer¨ªa¡¡±, desvela Luis Garc¨ªa. ¡°?Pues yo ten¨ªa al mismo pr¨ªncipe en el banquillo! Aunque nunca me dijo nada sobre alineaciones¡±, revela Caneda. Algo que no es tan extra?o porque aunque el Estado otorga el mismo montante a cada equipo, luego cada uno puede a?adir los millones que quiera con patrocinios, dinero de los pr¨ªncipes o incluso incorporaciones de jugadores que compra un jeque y cede al equipo.
Las particularidades de los dirigentes tambi¨¦n se extienden al c¨¦sped. ¡°Viven mucho de noche y se levantan muy tarde, por lo que ponerles un entrenamiento por la ma?ana es una faena para ellos. Si el partido es las tres de la tarde, en ocasiones tienes que ir a levantarlos a las habitaciones para la charla¡±, desliza Mach¨ªn; ¡°adem¨¢s, es un pa¨ªs condicionado por la religi¨®n. Recuerdo que al principio paraban en los entrenamientos para rezar, as¨ª que me tuve que adecuar a los horarios. Lo mismo pasa antes de jugar o de entrenar. Incluso los partidos se programan para que no coincidan con los rezos¡±. Eso mismo le sucedi¨® a Inarejos: ¡°Al final te adaptas. Yo decid¨ª, sobre todo en ¨¦poca de Ramad¨¢n, cuando no comen ni beben hasta que cae el sol, poner los entrenamientos a partir de las diez de la noche. Y entiendes que tambi¨¦n se concentran as¨ª, rezando a Al¨¢¡±. Otra peculiaridad en el futbolista local es que antepone la familia de forma notoria. ¡°Puede ser que un d¨ªa te digan que no vienen a entrenar porque alguien de su entorno est¨¢ con fiebre y quieren quedarse con ¨¦l. O porque tienen que llevarle al hospital porque el otro no conduce¡±, apostilla Mach¨ªn.
Ahora las mujeres ya conducen en el pa¨ªs, medida que instaur¨® en 2017 el rey Salm¨¢n bin Abdulaziz, pues en los ¨²ltimos a?os hace caso de los consejos aperturistas de su hijo el pr¨ªncipe Mohamed bin Salm¨¢n. ¡°Ha habidos cambios significativos como que ya no hay espacios reservados para hombres o mujeres en los restaurantes, sino que se mezclan¡±, expresa Inarejos. ¡°Una vez no me dejaron entrar en un comercio por llevar pantalones cortos, pero el pa¨ªs se est¨¢ abriendo al mundo. M¨¢s que europeizando, se est¨¢ americanizando. Hay muchas franquicias de comida r¨¢pida y, sobre todo de caf¨¦ y t¨¦ porque no se bebe alcohol¡±, apunta Mach¨ªn.
Otra medida que cambi¨® en 2018 fue la entrada de las mujeres a los estadios, aunque entonces no se mezclaban con los hombres en las gradas. Imperativo que oblig¨® a deshacer la Federaci¨®n Espa?ola para ver la Supercopa de hace dos a?os. En esta, tampoco quieren ver carteles de ¡°solo mujeres¡±.
?scar Vicente, el fisioterapeuta triatleta
?scar Vicente (O Rosal, Pontevedra; 32 a?os) celebr¨® el a?o pasado la Champions asi¨¢tica desde el banquillo, como fisioterapeuta del Al Hilal. Un triunfo que le supo a gloria y que dio, en parte, sentido a su viaje a Arabia Saud¨ª despu¨¦s de estar en M¨¦xico, Abu Dabi, Mallorca y hasta en el Legan¨¦s. ¡°Tambi¨¦n estuve Arabia Saud¨ª en 2016, en el Al Shabab, pero la experiencia no fue muy buena porque me aburr¨ªa, porque no conoc¨ªa a demasiada gente¡ Y decid¨ª volverme a Mallorca. Pero, cosas de la vida ¨Dacompa?¨® al t¨¦cnico Toni Amor¨D aqu¨ª estoy de nuevo, ya con mi novia. Estoy en el equipo m¨¢s grande que lucha por ganar la liga y la Champions. Tambi¨¦n iremos al Mundial de clubes, aunque sabemos que no tenemos muchas oportunidades ante el Chelsea¡¡±, cuenta desde Oriente Pr¨®ximo. Una carrera que durante un tiempo pudo compaginar con sus otras carreras, los triatlones al m¨¢ximo nivel porque se entrenaba y compet¨ªa con Javi G¨®mez Noya, gran amigo suyo. ¡°Hasta 2103, llegu¨¦ a correr Series Mundiales. Fui campe¨®n de Europa junior en Duatl¨®n (2008) y en una prueba del Mundial de 2013 me qued¨¦ en el puesto 16?, a tres de Noya¡±. Pero sufri¨® un atropello y se dedic¨® a trabajar.
A ?scar Vicente le sorprende c¨®mo est¨¢ evolucionando Arabia Saud¨ª, cada vez m¨¢s abierto aunque a¨²n hay muchas cosas y libertades (para las mujeres) a mejorar. ¡°Pero tal y como est¨¢ el pa¨ªs ahora, se puede vivir en un apartamento del centro de Riad y no en un compound¡±, cuenta. ?l, al contrario que los t¨¦cnicos, no teme tanto por su trabajo. Tambi¨¦n porque se ha hecho amigo del presidente, que no es otro que Fahad bin Nafil, uno de los propietarios de la lujosa cadena hotelera Four Seasons. ¡°Lo bueno es que aqu¨ª, si se necesita una m¨¢quina, la compran. O nos pagan los viajes que hagan falta para nuestra formaci¨®n. Si hay que cambiar hierba de campo se cambia¡ No escatiman recursos. Y nos tratan superbi¨¦n¡±, a?ade. Y entre horas, sale a correr o si hace demasiado calor se sube a la cinta. ¡°Lo hago por hobby¡±, constata.
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