La gran apuesta del Castell¨®n
Bob Voulgaris, un millonario canadiense que hizo su fortuna con el juego y el p¨®ker, se hace con el control del club de Castalia justo el d¨ªa del centenario de la entidad
Lo improbable era que justo el d¨ªa que un club de f¨²tbol cumpl¨ªa 100 a?os pasase a manos de un millonario canadiense de origen griego que hizo su fortuna mediante apuestas de resultados de la NBA o como jugador de p¨®ker. Pero todo eso ocurri¨® este mi¨¦rcoles en Castell¨®n, donde ha desembarcado Haralabos Bob Voulgaris, el nuevo m¨¢ximo accionista del club tras una sorprendente operaci¨®n que abre las puertas del f¨²tbol espa?ol a uno de los mayores especialistas en los modelos estad¨ªsticos y predictivos en el entorno del deporte, una suerte de moneyball que adem¨¢s conf¨ªa la parcela deportiva del club a Dave Reddin, uno de los m¨¢s renombrados gur¨²s de rendimiento del deporte brit¨¢nico. Acostumbrado tantos a?os a la hiel, instalado durante siete campa?as de la d¨¦cada pasada en categor¨ªa auton¨®mica, el Castell¨®n juega ahora en el tercer escal¨®n del f¨²tbol espa?ol, en Primera RFEF, y se ilusiona con la escalada a Primera Divisi¨®n, donde no se le ve desde hace 32 a?os.
¡°Tendremos que trabajar much¨ªsimo e invertir mucho dinero para llegar a Primera, pero vamos a poner pasi¨®n. Tengo un mill¨®n de ideas y quiero ganarme la confianza de la gente con hechos¡±, explic¨® Voulgaris en su primera comparecencia. A pesar de los acuerdos de confidencialidad varias fuentes cifran en torno a los 2,5 millones de euros su inversi¨®n para hacerse con el control del club. ¡°Quiero usar tecnolog¨ªa estrat¨¦gica¡±, advirti¨®. Su pasado delata su minuciosidad. Con 20 a?os empez¨® a apostar y se especializ¨® en la NBA en la medida que la Liga empez¨® a ofrecer todo tipo de estad¨ªsticas. Les extrajo jugo. Dise?¨® patrones para predecir no solo resultados, sino derivas concretas tanto del juego o del comportamiento de los entrenadores que le permitieran apostar sobre seguro. Se percat¨® de la rentabilidad de poner el dinero a favor de que en las segundas partes de los partidos de baloncesto se anotaban m¨¢s puntos que en la primera, cuando suele haber menos tiros libres y ataques m¨¢s elaborados. Por incre¨ªble que parezca, hace veinte a?os las casas de apuestas consideraban que hab¨ªa las mismas probabilidades de anotar en ambas.
Ya puedes ver la rueda de prensa de Bob Voulgaris y Vicente Montesinos sobre la compra-venta del @cdcastellon
— CD Castell¨®n ? (@cdcastellon) July 20, 2022
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Voulgaris explot¨® el agujero con extrema audacia, redobl¨® apuestas y gan¨® un dineral. Todav¨ªa hoy es el apostador con m¨¢s ¨¦xito en la historia de la NBA. En realidad se hab¨ªa forjado en ese mundo. Su padre, un griego emigrado a Winnipeg le llev¨® de adolescente dos meses a Las Vegas, un viaje inici¨¢tico en el que entendi¨® que solo se podr¨ªa ganar manejando probabilidades, estad¨ªsticas y algoritmos. Se entreg¨® al dato.
Las casas de apuestas reaccionaron a su ¨¦xito y cuando empez¨® a perder m¨¢s que a ganar vir¨® hacia el p¨®ker, donde tambi¨¦n se convirti¨® en una celebridad. Pero por el camino conform¨® un equipo para generar un sistema inform¨¢tico que le sirviese para tomarse la revancha. ¡°Soy una persona muy paciente¡±, avis¨® en su estreno en Castell¨®n. Tard¨® m¨¢s de tres a?os en dise?arlo y las casas de apuestas otros tres en desactivar sus efectos. ¡°Todo ese proceso de estudiar el juego con el objetivo de vencer en las apuestas me dio a entender que podr¨ªa armar un equipo mejor que casi cualquier otro manager en la liga, sino todos¡±, explic¨® entonces.
A esa altura, en 2010, empez¨® a colaborar con Mark Cuban, el heterodoxo propietario de Dallas Mavericks. ¡°Tiene un don para entender la inteligencia artificial y la forma de generar ventajas gracias a ella¡±, apuntaba Cuban. En septiembre de 2016 le integr¨® en la estructura del equipo y en 2018 lo promocion¨® al consejo directivo como responsable de desarrollo e investigaci¨®n cuantitativa, un pomposo cargo que en realidad deriv¨® en que se convirti¨® en el n¨²mero dos de la franquicia. Su influencia lleg¨® a apuntar que interfer¨ªa en las decisiones t¨¦cnicas de los entrenadores a trav¨¦s de la fuerza del dato y la num¨¦rica, que incluso defin¨ªa alineaciones y rotaciones. Hasta que hace un a?o todo se quebr¨®. Dentro de la franquicia creci¨® una corriente que se?al¨® a Voulgaris como un vendehumos de mal car¨¢cter. Y una serie de desencuentros con Luka Doncic acabaron de laminarle.
A partir de entonces empez¨® a explorar las opciones de conformar un proyecto deportivo propio. La NBA es demasiado cara, pero hay alternativas y en Espa?a ya son varios los inversores extranjeros que est¨¢n alerta, varios de ellos pasaron por Castell¨®n. ¡°El f¨²tbol siempre me interes¨®¡±, explic¨® Voulgaris en su puesta de largo en Castalia, en la que pronunci¨® varias veces la palabra ¡°dinero¡±. El Castell¨®n mantiene una fiel parroquia de m¨¢s de 13.000 abonados y ha esquivado varias veces el fantasma de la desaparici¨®n por m¨¢s que en los ¨²ltimos meses tuviera problemas para estar al d¨ªa en los pagos con sus jugadores. A d¨ªa de hoy tiene 14 en plantilla y un entrenador reci¨¦n fichado, Rub¨¦n Torrecilla.
La nueva propiedad apunta que ¡°por el momento¡± trabajar¨¢n con Fernando G¨®mez Colomer, el m¨ªtico exjugador del Valencia, que acab¨® su carrera de corto en Castell¨®n y ahora ejerce como director deportivo. Pero esa parcela queda ahora bajo el dictado de Dave Reddin, que no es un cualquiera. Mano derecha de Clive Woodward en la selecci¨®n inglesa de rugby campeona del mundo en 2003, se convirti¨® despu¨¦s en jefe de rendimiento en el Comit¨¦ Ol¨ªmpico Brit¨¢nico para enfocar los Juegos de Londres. En 2014 acept¨® una oferta de la FA, la federaci¨®n inglesa de f¨²tbol, para ejercer esa misma labor y poner el foco en el Mundial de Rusia.
Reddin, una celebridad en las Islas, estaba tambi¨¦n en Castell¨®n. Con ¨¦l y con Voulgaris, llegan Richard Bentley, otro ingl¨¦s que trabaja como director de inversiones en un banco suizo, y Robin Taylor, un responsable de m¨¢rketing que ser¨¢ el ¨²nico que se afinque en la ciudad.
Al menos en este envite, Voulgaris maneja una referencia. La de un amigo, Tony Bloom, un sosias brit¨¢nico que tambi¨¦n frecuent¨® las mesas de p¨®ker y las casas de apuestas, que en 2009 compr¨® la mayor¨ªa accionarial del Brighton, en 2017 lo llev¨® a la Premier y en la temporada reci¨¦n finalizada lo llev¨® al noveno puesto, su tope hist¨®rico. En Castell¨®n, justo el d¨ªa en que brindaron por el pasado construido por glorias como Planelles, Racic, Babiloni, Ibeas o Pedro Alca?iz y en el que incluso dej¨® huella en dos campa?as como cedido, Vicente del Bosque, empiezan a construir un futuro, que es m¨¢s que nunca una apuesta.
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