Benzema y Vinicius, todo sigue igual
Los mejores de la pasada Champions vuelven a conectar para que el franc¨¦s levante su primer trofeo como capit¨¢n y se coloque como segundo m¨¢ximo goleador de la historia del Madrid
El Real Madrid sigui¨® la historia donde la hab¨ªa dejado en Par¨ªs, con una copa. Karim Benzema y Vinicius continuaron levantando lo que hab¨ªan estado construyendo hasta el pasado mayo, y el franc¨¦s sigue ahora desde su nueva condici¨®n de primer capit¨¢n. Con otra noche profesoral, y su primer trofeo al aire.
En el Ol¨ªmpico de Helsinki todo ten¨ªa aroma de tributo, de colecci¨®n de grandes ¨¦xitos. Desde que el Madrid gan¨® la decimocuarta Copa de Europa en Par¨ªs y el Eintracht conoci¨® su rival por la Supercopa, resucit¨®, como suced¨ªa cada Navidad en la BBC, la final de Glasgow de 1960, el 7-3 con cuatro de Puskas y tres de Di St¨¦fano. Y una hora antes del partido, volvieron a encontrarse sobre la hierba, 62 a?os despu¨¦s, tres supervivientes de aquel desmelene: Jos¨¦ Santamar¨ªa, Erwin Stein y Dieter Stinka, que cumpl¨ªa 85 a?os.
Hasta la alineaci¨®n del Madrid ven¨ªa de otra noche con Orejona, la del 28 de mayo contra el Liverpool. Los mismos, para un partido que Ancelotti ya ve¨ªa como continuaci¨®n de aquella felicidad. Tanto, que la primera gran oportunidad de su equipo pareci¨® el gol del Stade de France. Valverde aceler¨® supers¨®nico por la banda derecha y envi¨® la pelota al ¨¢rea. En Par¨ªs, eso termin¨® en la carrera de Vinicius, que llegaba de chocarle la mano a Klopp en el otro costado. En Helsinki, hubo paradas intermedias. Carvajal salt¨® sobre el pase y se lo dej¨® a Benzema, a la altura del punto de penalti. Pero eso tampoco era Par¨ªs, y se la dio a Vinicius, que llegaba por donde hab¨ªa aparecido en Saint Denis. El portero, Kevin Trapp, se venci¨® adonde recordaba que hab¨ªa chutado entonces, pero el brasile?o la empuj¨® al otro palo. La alcanz¨® Tuta desliz¨¢ndose sobre el c¨¦sped, y ese homenaje qued¨® a medias.
Lo que menos se pareci¨® a Par¨ªs fue la organizaci¨®n. Con el eco de los estruendosos fiascos de dos de las ¨²ltimas grandes finales de la UEFA (la Eurocopa en Wembley en 2021, y la ¨²ltima de la Champions), cinco horas antes de la de la Supercopa, su presidente, Aleksander Ceferin, se sentaba ante un caf¨¦ y un vaso de agua en la terraza del hotel K?mp. El lugar, de aire franc¨¦s, con las sillas mirando a la calle en lugar de a los acompa?antes, salv¨® de la ruina uno de los hoteles m¨¢s singulares de Helsinki a finales del siglo XIX. Cuando el negocio naufragaba, abrieron un restaurante y el establecimiento remont¨®. Despu¨¦s de su caf¨¦ al sol, Ceferin contempl¨® c¨®mo su prestigio de organizador de finales no acumulaba un nuevo sonrojo.
Pero en la noche de los revivals, a¨²n deb¨ªa comparecer el jefe del escuadr¨®n de Ancelotti. Pasada media hora, enlaz¨® una combinaci¨®n con Vinicius que destilaba el aroma de la pared con la que abrieron el marcador en la ida de los cuartos de la Champions contra el Chelsea, en Stamford Bridge. El franc¨¦s lanz¨® al brasile?o a correr, pero en esta ocasi¨®n en lugar de alcanzar la l¨ªnea de fondo y pon¨¦rsela atr¨¢s a la cabeza como entonces, cruz¨® hacia la porter¨ªa, tir¨® al palo m¨¢s alejado, y Trapp alcanz¨® a desviarla a c¨®rner con las yemas del guante izquierdo.
No termin¨® en gol como en Londres, pero s¨ª encendi¨® la mecha del cambio como aquel d¨ªa. En el saque de esquina, el capit¨¢n consigui¨® cabecear el lanzamiento de Kroos con algo de ayuda de un defensa y alcanzar a Casemiro en la l¨ªnea de fondo. Acudieron tantos a taparlo, que cuando el brasile?o la dej¨® atr¨¢s de cabeza, Alaba se encontr¨® solo para empujarla.
Aparece Benzema y se ilumina el Madrid. Y si lo hace con Vinicius, el destello deslumbra. El mejor jugador y el mejor joven de la ¨²ltima Champions, que algo m¨¢s tarde culminaron el autohomenaje con una asistencia del brasile?o al centro del ¨¢rea al franc¨¦s. En una noche repleta de evocaciones, el nuevo capit¨¢n levant¨® su primer trofeo y super¨® a Ra¨²l en la tabla de m¨¢ximos goleadores hist¨®ricos del club. Lleva 324, y solo le queda por delante Cristiano Ronaldo (451), el futbolista al que aup¨® y cuya marcha a Tur¨ªn le empuj¨® a cambiar su juego y su ambici¨®n, como hab¨ªa contado la tarde antes.
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