El triunfo del Inter de Mil¨¢n ante el Barcelona congela la llegada de Tuchel al equipo italiano
La victoria ante el equipo espa?ol coge por sorpresa al club lombardo, que contact¨® al t¨¦cnico alem¨¢n ante la previsible destituci¨®n de Inzaghi tras un mes de malos resultados y revuelta en el vestuario
El paso del Barcelona por San Siro tuvo un efecto tan bals¨¢mico como desconcertante en el Inter de Mil¨¢n. En la directiva del club italiano nadie daba una lira por el triunfo, seg¨²n cuentan fuentes pr¨®ximas a sus mandatarios. Pero el tiro de Hakan Chalhanoglu desde fuera del ¨¢rea, un zurriagazo m¨¢s o menos accidental que desemboc¨® en el ¨²nico gol en la victoria por 1-0 este martes, ante el equipo de Xavi, apag¨® el incendio que se hab¨ªa declarado y congel¨® las negociaciones emprendidas para contratar a un t¨¦cnico que permitiera despedir a Simone Inzaghi.
Steven Zhang, el presidente, y Giuseppe Marotta, el director deportivo, hab¨ªan enviado emisarios a proponerle un contrato a Thomas Tuchel, la semana pasada. La operaci¨®n para fichar al entrenador que gan¨® la Champions con el Chelsea en 2021 solo pend¨ªa de una respuesta afirmativa. Tuchel dudaba porque, seg¨²n intermediarios que trabajan para la Juventus, espera que tambi¨¦n quede vacante el banquillo del club de Tur¨ªn. Preguntado al respecto por este peri¨®dico, el representante del t¨¦cnico alem¨¢n prefiri¨® postergar la contestaci¨®n. El 1-0 paraliz¨® las tratativas en un contexto de creciente complejidad.
El Inter, que hasta que perdi¨® el derbi de Mil¨¢n en la primavera pasada fue un decidido aspirante al t¨ªtulo de liga, se desinfl¨® tras el esfuerzo. El pasado verano la plantilla experiment¨® la depresi¨®n que suele suceder a las empresas frustradas cuando consumen toda la energ¨ªa ps¨ªquica de los futbolistas. El sentimiento de ciclo acabado se profundiz¨® en el mercado. Porque resulta que el pretendido gran refuerzo, la repesca de Romelu Lukaku, vendido al Chelsea en 2021 y recuperado por la v¨ªa de la cesi¨®n a cambio de medio salario, se convirti¨® en un chasco inmediato. ¡°Lukaku lleva una semana aqu¨ª y ya no lo quieren ni ver¡±, advirti¨® un agente que particip¨® en la operaci¨®n, a principios de agosto.
El delantero belga de 95 kilos de peso y 29 a?os de edad dio una impresi¨®n tan superada, ociosa y diletante, que Inzaghi advirti¨® a la directiva que le sobraba. As¨ª comenz¨® a romperse el idilio entre el entrenador y el propietario, el chino Zhang, que cort¨® el grifo de las adquisiciones al tiempo que dejaba marchar a Perisic, el jugador m¨¢s desequilibrante de la temporada pasada. Desde entonces, el Inter disput¨® ocho partidos de Serie A y perdi¨® cuatro. Ahora es noveno en la clasificaci¨®n a ocho puntos del l¨ªder, el N¨¢poles, y a cinco puntos de posiciones de Champions, para alarma del propietario, que considera la disputa de la m¨¢xima competici¨®n continental como una prioridad financiera.
La derrota ante al Roma el s¨¢bado pasado (1-2) en San Siro, profundiz¨® en una crisis que, seg¨²n los testigos, termin¨® por contaminar la relaci¨®n de Inzaghi con su plantilla. Este lunes, la v¨ªspera del paso del Barcelona por Mil¨¢n, en el centro de Appiano Gentile cund¨ªa la clase de indolencia que preside a los grupos de futbolistas cuando resuelven desvincularse emocionalmente de todo aquello que les pide el entrenador, con la esperanza de que un cambio les pueda devolver el ox¨ªgeno que sienten que pierden.
Preguntado por la situaci¨®n de Lukaku, al parecer lesionado, este lunes Inzaghi respondi¨® con su habitual semblante conciliador en la conferencia de prensa previa al partido: ¡°En este club vamos todos en la misma direcci¨®n, directiva y cuerpo t¨¦cnico. La cesi¨®n de Lukaku ha sido una elecci¨®n hecha entre todos¡±.
S¨ªmbolo de una cadena de desencuentros, Lukaku es el elefante que todos fingen ignorar en la cacharrer¨ªa del Inter, aunque cada decisi¨®n gira en torno a su presencia. Tambi¨¦n el pretendido fichaje de Tuchel, al que, seg¨²n fuentes pr¨®ximas a la directiva le han ofrecido 12 millones de euros netos de salario por temporada, entre otras cosas, para que haga en Mil¨¢n lo que hizo en Londres: forzar a Lukaku a abandonar el club cuanto antes, a ser posible en el pr¨®ximo mercado de Navidades.
La paradoja de Lukaku
Tambi¨¦n en esto la posici¨®n de Tuchel resulta parad¨®jica. El t¨¦cnico alem¨¢n dilapid¨® el prestigio que obtuvo ganando la Champions cuando insisti¨® en fichar a Lukaku por m¨¢s 110 millones de euros, contra el deseo de Roman Abramovich, el malogrado propietario del Chelsea, que le insist¨ªa en adquirir a Haaland por la mitad de precio. Igual que Inzaghi, a Tuchel el entusiasmo por el gigante belga le dur¨® menos de un mes. Los conflictos entre ambos se desataron sin freno hasta que este verano Lukaku fue devuelto al Inter y Tuchel fue despedido tras un mal arranque en la Premier.
El c¨ªrculo estaba a punto de cerrarse cuando el Bar?a de Lewandowski se present¨® providencial. Ahora, el ominoso reencuentro de Tuchel y Lukaku deber¨¢ esperar, en el mejor de los casos. Como public¨® Zhang en Instagram en la madrugada del mi¨¦rcoles: ¡°Esta es una de las millones de razones por las cuales te amamos, Inter. ?A continuar as¨ª!¡±.
Tuchel, mientras todo contin¨²e as¨ª, esperar¨¢. Al Inter, o a la Juventus, que tambi¨¦n le ha contactado por persona interpuesta. Porque Massimiliano Allegri est¨¢ en el alambre, otro entrenador puesto a cargo de un proyecto que conduc¨ªa a ganar la Serie A y que, hoy por hoy, sufre por acabar cuarto.
¡°Este puede ser el comienzo de algo nuevo¡±, dijo Inzaghi, superviviente en su cargo, en plena fiesta en San Siro, a la espera del partido de vuelta en el Camp Nou, el mi¨¦rcoles de la semana que viene, en un viaje que probablemente ni siquiera ¨¦l esperaba poder realizar.
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