El Celta somete al Villarreal, que firma tablas
Grato empate en un partido de alternativas que se abri¨® a partir de las maniobras del t¨¦cnico Carvalhal tras un gran inicio del cuadro de Seti¨¦n
Grato empate entre Celta y Villarreal en un partido de vaivenes y con excelentes futbolistas que se sald¨® con unas tablas que dejan buen sabor de boca, al Villarreal porque suma cuatro jornadas sin perder y se apresta a ver el resto de la jornada desde un puesto de Liga de Campeones que no hace tanto parec¨ªa lejano, al Celta porque mostr¨® que puede competir con un rival de talla europea y, sobre todo, que dispone de herramientas para voltear partidos que se le complican.
La impaciencia es enemiga del ¨¦xito y en Villarreal hay un entrenador que est¨¢ intentando construir algo y que adem¨¢s tiene la fortuna de recuperar a un arquitecto que se ha pasado bastante tiempo de baja. Enumerar todo lo que le da Gerard Moreno al equipo ser¨ªa prolijo, pero se resume en un concepto: claridad. Y gol, obviamente. En Bala¨ªdos le puso la firma al que adelant¨® a su equipo.
El Villarreal sali¨® al campo con la convicci¨®n propia de los grandes equipos y acab¨® achatado ante el torrente de su rival. Manej¨® la pelota de inicio, se la quit¨® al Celta y gobern¨® el partido por fuera con Chukwueze y Morales y por dentro a trav¨¦s de la partitura de Parejo. Presion¨® y gener¨® desde la codicia. Un gol de Pau Torres se fue al limbo por un fuera de juego previo de Mandi. Los centrales arriba y un aviso para el Celta, que no se dio por enterado: un deficiente env¨ªo de Marchesin encontr¨® al equipo en pleno despliegue y sin recursos para evitar la respuesta r¨¢pida del Villarreal. Gerard tom¨® la pelota y, como apuntar¨ªan los cl¨¢sicos, la coloc¨® en el hierro, lejos de la estirada del meta argentino.
La reacci¨®n del Celta tuvo grandeza en la medida que tambi¨¦n era magn¨ªfico el despliegue de su rival. Subi¨® l¨ªneas el equipo celeste, se ajust¨® en la presi¨®n y encontr¨® la sociedad conformada entre Iago Aspas y Gabri Veiga, que se estrenaba con un merecido dorsal del primer equipo. El plan del t¨¦cnico Carlos Carvalhal era m¨¢s s¨®lido sin bal¨®n que con ¨¦l, o al menos de inicio hizo m¨¢s da?o en la presi¨®n que en la proposici¨®n. El Celta pudo empatar en varias salidas dudosas de bal¨®n en las que el cuadro amarillo se hizo un nudo.
Carvalhal debi¨® de apreciar bien pronto opciones de mejora. Mediada la primera parte ya hab¨ªa desperezado a su banquillo, en el descanso le dio cancha a De la Torre por Cervi y a los ocho minutos de la reanudaci¨®n cambi¨® el dibujo inicial de tres centrales al llamar a Carles P¨¦rez, un extremo, en sustituci¨®n del zaguero Mingueza.
Pero entre tantas variantes el Celta perdi¨® el hilo. El Villarreal se aplic¨® de nuevo para que se jugase lejos de su porter¨ªa. Un intento de Morales lami¨® el larguero y dispar¨® las alarmas en Bala¨ªdos. All¨ª estaba Carvalhal, que no dej¨® de maniobrar: retir¨® del campo a ?scar Rodr¨ªguez para darle una nueva oportunidad a Larsen, el gigante noruego que lo hace todo bien menos el trabajo que se le supone a un delantero, el del gol. En 805 minutos de 12 partidos de Liga no hab¨ªa marcado. Ante el Villarreal lo hizo nada m¨¢s salir, al filo del fuera de juego enca?on¨® a Reina tras un pase del inevitable Veiga, fin¨ªsimo.
El partido hab¨ªa vuelto a virar. El Villarreal volvi¨® a sufrir. Gerard ya hac¨ªa tiempo que no ten¨ªa dictado. La pelota no pasaba por Parejo y si lo hac¨ªa le rodeaba una telara?a celeste. Reina vio pasar, sin opci¨®n siquiera de estirarse, un remate de De la Torre que buscaba la escuadra. Larsen no dej¨® de amenazar en boca de gol, ahora que lo hab¨ªa catado al fin. Unai N¨²?ez y Renato Tapia pudieron marcar en sendos testarazos. Hasta Hugo Mallo busc¨® el triunfo por arriba. Oposit¨® a los tres puntos el Celta y los mereci¨®, pero deber¨¢ de seguir mirando hacia abajo. ¡°Hemos ganado un punto. Hay que darlo por bueno¡±, resumi¨® Gerard Moreno.
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