Terremoto en el ciclismo mundial: Vingegaard, Evenepoel y Roglic, implicados en una grave caída en la Itzulia
El danés, último doble ganador del Tour, sufre la fractura de una clavícula y varias costillas tras una múltiple caída en la que también se ven implicados otros de los mejores ciclistas del pelotón
El ciclismo mundial sufrió un terremoto en la bajada del puerto de Olaeta, a 34 kilómetros de la llegada de la Itzulia en Legutio, muy cerca de la ermita de San Cristóbal, patrón de los conductores, pero que no protegió a los ciclistas. En una curva, tal vez no especialmente peligrosa por su trazado, pero sí porque los corredores bajaban a muchísima velocidad, la carrera quedó descabezada. Según los ciclistas que se entrenan habitualmente por esa zona, las raíces de ...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PA?S, puedes utilizarla para identificarte
El ciclismo mundial sufrió un terremoto en la bajada del puerto de Olaeta, a 34 kilómetros de la llegada de la Itzulia en Legutio, muy cerca de la ermita de San Cristóbal, patrón de los conductores, pero que no protegió a los ciclistas. En una curva, tal vez no especialmente peligrosa por su trazado, pero sí porque los corredores bajaban a muchísima velocidad, la carrera quedó descabezada. Según los ciclistas que se entrenan habitualmente por esa zona, las raíces de los árboles debajo del asfalto hacen que las bicicletas vayan dando botes y que sea muy fácil sufrir un accidente si los corredores no sujetan con fuerza el manillar. Lo corroboró a través de sus redes sociales el profesional del Euskaltel Mikel Bizkarra.
De golpe, los tres principales candidatos a la victoria final, y que forman parte también de ese grupo de elegidos que dominan el World Tour, se vieron involucrados en una catastrófica caída que eliminó de golpe a Jonas Vingegaard, Primoz Roglic y Remco Evenepoel. Los tres abandonaron con diversos grados de afectación. Y en el horizonte, el Tour.
Posiblemente Roglic, que también sufrió un accidente en la etapa anterior, fue quien mejor salió de la caída, porque después de permanecer sentado unos cuantos minutos, baldado por el golpazo, se puso en pie y no parecía tener fracturas de ningún tipo, aunque su estado le aconsejó abandonar. Se montó en el coche de su equipo, sonrió levemente a las cámaras y cedió el jersey amarillo al danés Mattias Skjelmose. El hasta entonces líder de la carrera viajaba varios metros por detrás de Vingegaard y parecía que podía salvar la caída, pero otro corredor le empujó a la misma acequia en la que cayó el doble ganador del Tour.
Las imágenes que ofrecía el helicóptero de la televisión resultaban preocupantes, con el danés Vingegaard, tumbado de costado junto a una acequia de cemento, con la parte trasera del maillot destrozada e inmóvil, aunque consciente. Después de ser atendido durante un buen rato, los sanitarios le colocaron un collarín cervical, le subieron a una camilla con una mascarilla de oxígeno, para evacuarlo al hospital de Txagorritxu en Vitoria, donde se confirmó que sufre la fractura de una clavícula y varias costillas. A unos metros, en la misma acequia de cemento de la que salió Roglic, permanecía tumbado Jay Vine, del UAE. Su director, Josean Fernández, Matxin, apuntaba que el corredor de su equipo presentaba una baja saturación de oxígeno antes de ser evacuado.
La caída de Remco Evenepoel también resultó escalofriante. Circulaba delante del corredor eritreo del Lidl Trek, Natnael Tesfazion, que en un principio parecía que fue quien provocó la caída, aunque las posteriores imágenes no lo dejan claro, porque el campeón belga fue el primero que se desvió de la ruta, se salió de la calzada y rodó entre rocas y árboles, esquivando los obstáculos, hasta frenar finalmente, seguido por un ciclista del UAE que permaneció sobre la bicicleta, circulando por los caminos de tierra que circundaban el terreno. Evenepoel se levantó con evidentes gestos de dolor en el hombro derecho: también sufre fractura de clavícula, además de escápula. “Podría haber sido aún peor con todas estas rocas y árboles”, se consolaba Patrick Lefevere, el patrón de su equipo, que vio las imágenes mientras asistía a una rueda de prensa de la París-Roubaix. Remco circulaba detrás de Mikel Landa, que giró sorprendido la cabeza al ver lo que sucedía a sus espaldas.
Fue una caída con varios epicentros, porque en las imágenes aéreas del incidente se aprecia que, unos metros por detrás de Evenepoel, también Jonas Vingegaard se salía de la calzada, casi en el mismo momento, pasaba sobre la acequia y quedaba inmóvil en el suelo. Posteriormente, un corredor del Education First, Sean Queen, que también abandonó, le pasaba por encima para caer después a la zanja de cemento. Su compa?ero de equipo Alexander Cepeda pudo reincorporarse a la carrera.
Los jueces neutralizaron la carrera, y tras varios minutos de incertidumbre, decidieron que solo los seis corredores que viajaban escapados en el momento del accidente se disputarían el triunfo de etapa aunque el tiempo sería el mismo para todo el pelotón. Entre ellos, el líder de la monta?a, Louis Mentjes, aprovechó el último repecho para dejar atrás a sus acompa?antes y llevarse una triste victoria de etapa que pone patas arriba el ciclismo.
Puedes seguir a EL PA?S Deportes en Facebook y X, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.