Un d¨ªa con los inspectores del c¨¦sped
Desde el departamento de calidad de los terrenos de juego de LaLiga impulsan una serie de auditor¨ªas de riego para que los clubes puedan ser m¨¢s eficientes a la hora de regar el c¨¦sped y reducir el tiempo de riego en los descansos a tres minutos
El ingeniero agr¨®nomo Javier Guti¨¦rrez entra en El Toral¨ªn, el estadio de la SD Ponferradina, cargado con un pesado ba¨²l met¨¢lico que deposita aliviado junto a la hierba. Abre la tapa y de all¨ª comienza a sacar una decena de aparatos, cada uno m¨¢s ins¨®lito que el otro, cuya utilidad resulta a primera vista incierta. Comienza una jornada m¨¢s para unos de los responsables de auditar los terrenos de juego de los equipos de LaLiga Santander y de LaLiga SmartBank para que est¨¦n a la altura del espect¨¢culo. En este caso, Guti¨¦rrez analizar¨¢ si el c¨¦sped recibe el aporte de calidad y cantidad de agua requerido. Y eso no se hace a simple vista.
Pedro Fern¨¢ndez-Bola?os, responsable de la calidad de los terrenos de juego de LaLiga, est¨¢ tambi¨¦n en El Toral¨ªn. ¡°Somos conscientes de que el estado del c¨¦sped cuando el ¨¢rbitro pita el inicio de cada encuentro no es una casualidad y es el resultado de mucho esfuerzo y conocimientos puestos al servicio de ese momento¡±, sostiene. Su misi¨®n es que en los 842 partidos que se disputan cada temporada nadie tenga que preocuparse por la superficie que pisan los jugadores. La auditor¨ªa de riego es uno de los ¨²ltimos pasos que inventaron para garantizar el objetivo.
Guti¨¦rrez elige uno de extremos del campo opuestos a los banquillos para empezar. Con un instrumento que tiene pinchos en un lado y manijas con una pantalla digital del otro, va registrando la humedad de la tierra. Lo har¨¢ no menos de 500 veces mientras se desplaza por todo el campo para saber si la humedad es uniforme y con ellos descifrar d¨®nde regar m¨¢s o menos.
Luego le toca el turno al sacamuestras, una cu?a con la que extraer¨¢ peque?as muestras estratigr¨¢ficas del suelo para ver al detalle hasta qu¨¦ capa penetra el agua. Tambi¨¦n le interesa saber cu¨¢nto tiempo tarda el terreno en absorber el agua. Para ello se sirve de un recipiente con una boya sobre el que vierte agua para ver en cu¨¢nto desaparece. Usa algo muy parecido a un fondendoscopio, que lo ayuda a conocer la presi¨®n de cada uno de los 35 aspersores del campo. Y con una suerte de term¨®metros digitales comprueba el PH y la conductividad del agua para descartar cualquier posible transmisi¨®n de hongos u otras enfermedades a las plantas.
Con todas las pruebas, que se puede seguir en el video que abre esta informaci¨®n, Guti¨¦rrez elabora una auditor¨ªa minuciosa, que forma parte del plan de LaLiga para seguir elevando la calidad de los terrenos de juego, una labor que viene perfeccionando en el ¨²ltimo lustro, respetando tres premisas inalterables: favorecer el juego, evitar lesiones de los jugadores y cuidar la calidad del producto televisivo.
¡°Al final he conseguido que nuestra labor sea muy respetada en los clubes. Nos esperan con los brazos abiertos y siempre dispuestos a mejorar¡±, cuenta Fern¨¢ndez-Bola?os
¡°Los objetivos ahora son ser m¨¢s sostenibles, para ello debemos ser capaces de regar un campo de f¨²tbol en solo tres minutos¡±. Para ello, Fern¨¢ndez-Bola?os contact¨® con Acttua, la empresa de Guti¨¦rrez, que, entre otras cosas, tambi¨¦n dise?a grandes campos de golf. ¡°La mayor¨ªa de los sistemas de riego funcionan bien para el d¨ªa a d¨ªa, para cubrir las necesidades del campo. Nuestro ideal es poder mejorar el trabajo en los momentos punta, los d¨ªas de partido¡±, a?ade Guti¨¦rrez.
El Toral¨ªn tiene 21 a?os y desde entonces no ha modificado su sistema de riego, con el que ha logrado consolidarse en LaLiga SmartBank, con las exigencias del cuidado del c¨¦sped que ello conlleva. Siete de las ¨²ltimas diez temporadas han contado con el equipo de El Bierzo en la categor¨ªa de plata.
La inspecci¨®n del agua incluye tambi¨¦n lo que no se ve. Y en El Toral¨ªn lo que no se ve est¨¢ en el subsuelo: un aljibe que almacena el agua, y que sirve de precauci¨®n por si hubiera cortes en la red de suministro. En un peque?o s¨®tano se ubican la bomba que nutre de agua al sistema de aspersores, 35 puntos escondidos por el campo cada aproximadamente diecisiete metros.
¡°Durante la auditor¨ªa revisamos todo el ciclo de riego del agua. Su dep¨®sito, su caudal, su presi¨®n y luego todo lo que ocurre en el c¨¦sped: el funcionamiento de los aspersores, la humedad del terreno, la capacidad de infiltraci¨®n¡¡±, explica Guti¨¦rrez. Ahora le toca desplegar una treintena de cucuruchos de pl¨¢stico, ¡°pluvi¨®metros¡±, precisa, por todo el campo. Pondr¨¢ en marcha luego el riego y ver¨¢ si todos reciben el mismo aporte.
Una tercera persona observa sin perder detalle. Es Roberto Cordero, responsable del terreno de juego del club desde que hace cinco a?os el presidente, Jos¨¦ Fern¨¢ndez Nieto, le propuso dejar los jardines de las urbanizaciones para cuidar el de El Toral¨ªn. Cordero agradece las visitas de los ingenieros porque de ellas puede seguir aprendiendo. Cree que el control que impone LaLiga es tambi¨¦n una forma de que los clubes se preocupen a¨²n m¨¢s por su parcela y tomen conciencia de las posibles mejoras que pueden hacerse. Fern¨¢ndez-Bola?os asiente: ¡°Muchos equipos comienzan a llamarnos para ver cu¨¢ndo iremos a visitarlos¡±.
Guti¨¦rrez comienza a recoger. Le lleva unos buenos minutos hacerlo. Necesita dos viajes para ir al coche a dejar todos sus aparatos. Al d¨ªa siguiente tiene que estar en el estadio Anxo Carro, del CD Lugo, para repetir la jornada.