Raphinha decide un partido a su medida
A los azulgrana les bast¨® con un gol del brasile?o para derrotar en un partido sin tensi¨®n competitiva al Las Palmas, disminuido por la temprana expulsi¨®n de su portero ?lvaro Valles
El esforzado Raphinha no par¨® de correr hasta que alcanz¨® el gol que desequilibraba un partido a su medida, dise?ado para que exhibiera su desmarque, favorecido por el f¨²tbol atrevido del Las Palmas. El gol del brasile?o fue suficiente para un equipo en racha ¡ªnueve partidos sin perder¡ª y que suma cinco partidos con su porter¨ªa a cero, registros que le permiten sostener que todav¨ªa aspira a disputar la Liga al Madrid. Los azulgrana se abandonaron despu¨¦s del 1-0 contra un adversario que jug¨® con diez desde el minuto 24 por la expulsi¨®n de su portero ?lvaro Valles. No tienen suerte los canarios, que encadenaron su sexto partido sin ganar en LaLiga.
Ambos equipos comparten el mismo gusto por la cantera, por el pase como hilo del juego y por la posesi¨®n de la pelota, superior en los dos al 60%. A pesar de que el tiempo era muy desagradable por el viento y la lluvia, el partido ten¨ªa buena pinta m¨¢s que inter¨¦s, una sensaci¨®n reforzada por la alineaci¨®n dispuesta por Xavi. El t¨¦cnico mantuvo a Lamine Yamal, aline¨® a dos centrales con una muy buena salida de bal¨®n como I?igo Mart¨ªnez y Cubars¨ª, y form¨® con sus volantes m¨¢s creativos ante la lesi¨®n de Christensen. El mediocentro de contenci¨®n ha dejado de ser imprescindible de la misma manera que Jo?o F¨¦lix ya sabe que es suplente en un momento en que las rotaciones son controladas porque el pr¨®ximo partido no se jugar¨¢ hasta el 10 de abril en Par¨ªs.
Los azulgrana han recuperado la alegr¨ªa y tambi¨¦n la presi¨®n, que no siempre es sincronizada, circunstancia que a veces provoca la p¨¦rdida del bal¨®n y propicia las transiciones de equipos con buen toque como es Las Palmas. Los canarios no se dejaron intimidar por el acoso del Bar?a, que acamp¨® en campo contrario nada m¨¢s saltar al c¨¦sped de Montju?c. El encuentro era r¨¢pido, abierto y divertido porque las llegadas y los remates a la porter¨ªa de Valles se suced¨ªan y no faltaban tampoco las respuestas del equipo canario camino del ¨¢rea de Ter Stegen. A campo abierto, se acab¨® por imponer la verticalidad del Bar?a. El escenario propici¨® los desmarques de Raphinha, punzante al espacio, poderoso e indetectable para la defensa adelantada rival.
Al brasile?o se le anul¨® un gol en una jugada discutida y acto seguido provoc¨® la expulsi¨®n de ?lvaro Valles. El portero se cruz¨® a destiempo, lleg¨® tarde al cuero y atropell¨® a Raphinha. El ¨¢rbitro mostr¨® la tarjeta roja al guardameta y Garc¨ªa Pimienta opt¨® por quitar a Munir mientras montaba una zaga con cinco jugadores sin renunciar a tirar la l¨ªnea defensiva lejos del ¨¢rea del suplente Aar¨®n. El plan funcionaba por la poca punter¨ªa del Bar?a. No aparec¨ªa Lamine Yamal, ni atinaba Lewandowski y tampoco encontraba la porter¨ªa Raphinha, fall¨®n en el chut despu¨¦s de un pase interior de G¨¹ndogan, el jugador m¨¢s regular del Bar?a. Al equipo de Xavi le faltaba concentraci¨®n y tensi¨®n competitiva para sancionar el arriesgado plan de Garc¨ªa Pimienta.
El partido demandaba m¨¢s poder ofensivo por parte azulgrana ante un Las Palmas disminuido y, sin embargo, siempre reconocible ante la impaciencia de la hinchada congregada en Montju?c. Los azulgrana necesitaban ser m¨¢s profundos, tener a jugadores desequilibrantes y ?scar Hern¨¢ndez ¡ªXavi est¨¢ sancionado¡ª recurri¨® a Jo?o F¨¦lix. Y el portugu¨¦s, delicado en sus conducciones. fue decisivo para que marcara por fin Raphinha despu¨¦s de una acci¨®n de izquierda hacia dentro que acab¨® con un largo pase picado a la cabeza del brasile?o, escurridizo a espalda del central Mika M¨¢rmol.
Jo?o F¨¦lix estuvo l¨²cido como asistente y torpe como rematador cuando dispuso de una clara ocasi¨®n para poner el 2-0. Los barcelonistas se dejaron ir con el gol de Raphinha y se entregaron a un final de partido muy pesaroso, m¨¢s pendientes de los cambios y de las tarjetas que del f¨²tbol, un escenario poco atractivo para la agradecida afici¨®n de Montju?c. La inferioridad num¨¦rica no rebaj¨® la actitud de un atrevido Las Palmas ante el desinter¨¦s del Barcelona. Ni siquiera la presencia de Moleiro pareci¨® inquietar al equipo de Xavi, demasiado expuesto y conformista, entregado a Ter Stegen. El portero se arranc¨® con un grito cuando el cuero pas¨® muy cerca de su porter¨ªa en un disparo franco de Moleiro.
No hubo m¨¢s oportunidades y el partido se acab¨® con el murmullo de cada jornada sobre la continuidad de Xavi. El vicepresidente Yuste afirm¨® que intentar¨¢ mediar para que el entrenador cambie su decisi¨®n de abandonar el club el 30 de junio como asegur¨® despu¨¦s de perder con el Villarreal. El Bar?a se mantiene invicto desde entonces, capaz de resolver partidos dif¨ªciles ¡ªel del Metropolitano¡ª y tambi¨¦n f¨¢ciles o de entreguerras como el del Las Palmas. Aunque no se renuncia a la Liga, el desaf¨ªo es la eliminatoria contra el PSG.
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