Jacques, escapado con Pintens, conquist¨® el liderato

Ayer se confirm¨® que la Vuelta 76 es un tanto extra?a. En efecto, tras la tempestad del d¨ªa anterior entre Cartagena y Murcia, los cinco puertos de l¨¢ octava etapa no movieron lo m¨¢s m¨ªnimo las posiciones de los grandes. La escapada sorpyesa de Jacques y Pintens dio el liderato al primero, al llegar los os, nada menos, que con nueve minutos y doce segundos de ventaja a Almansa. El equipo de San Emeterio, que no logr¨® meter a Esparza entre los escapados, quiz¨¢ fue el gran perjudicado de la etapa.En realidad, la octava etapa de la Vuelta, una de las m¨¢s largas, con sus 219 kil¨®metros, no dec¨ªa en teor¨ªa lo que pod¨ªa dar de s¨ª. Aunque resultaba complejo su trazado, con los cinco puertos de monta?a, la verdad era que los porcentajes de las rampas no eran como para romper la carr¨¦ra. Efectivamente, salvo un breve intento d¨¦ Gandarias entre las dos metas volantes y otro de Oliva con Lazcano en la subida de la Sierra de Maigni¨®, la etapa se decidir¨ªa en la bajada de la Carrasqueta, el ¨²nico de primera categona. Atac¨® Jacques y r¨¢pidamente le sigui¨® Pintens. Fue exactamente en-el kil¨®metro 125. Nadie se ocup¨® de ellos, y nos referimos, naturalmente, al equipo del l¨ªder, Agostinho. En principio era el in-. dicado para contraatacar, pero Julio San Emeterio, !u director, nos confes¨® en la sala de Prensa que no ten¨ªa porqu¨¦. Los Raleigh, dijo, los Super Ser o los Kas, que mandan por equipos, pod¨ªan haber tirado y' no lo hicieron. No le preocupa en absoluto haber perdido el maillot amarillo.

De cualquier forma, esto yaJo decimos nosotros, al director del Teka le hubiera venido bien meter alguno de sus hombres. con la pa,reja belga, diga lo que diga. A estas horas ser¨ªa l¨ªder por. equipos tendr¨ªa un hombre entre los primeros de la 1 general. De haber sido Esparza,ipor ejemplo, en estos mmentos ser¨ªa segundo tras Jacques, a menos de un minuto. Pero, ¨¦l corredor catal¨¢n, que salt¨® al comienzo del ¨²ltimo puerto el de Albaida, de tercera categor¨ªa, naveg¨® m¨¢s de 60 kil¨®metros entre los escapados del pelot¨®n para acabar siendo cazado a 10 kil¨®metros de la meta.

Pedro Torres nos coment¨® al llegar a Almansa que para qu¨¦ iban a tirar ellos si all¨ª estaban Agostinho y su equipo. Mart¨ªnez Heredia, por su parte, que volvi¨®,a pinchar cuando Perurena, muy activo ayer, estaba dispuesto a atacar, nos dijo: ?No s¨¦. All¨ª no tiraba nadie?. Fue sintom¨¢tico, pues. Ninguno de los grandes, tir¨® nada y con ello no es extra?o que Pintens y Jacques se presentaran en la meta con nueve minutos y doce segundos de margen sobre el pelot¨®n. El primero, que no relev¨® a su compa?ero en los ¨²ltimos 15 kil¨®metros, gan¨® el sprint. En resumidas cuentas era lo l¨®gico por una doble raz¨®n: la primera, porque era el m¨¢s r¨¢pido de los idos y la segunda porque as¨ª se repart¨ªan equitativamente las ganancias.

Naturalmente, el que Jacques sea l¨ªder no significa absolutamente nada de cara, al futuro. Es otro l¨ªder provisional. Lo que significa, desde luego, es que los.belgas siguen llev¨¢ndose todos los triunfos. Ayer Elorriaga venci¨® en el sprint del pelot¨®n, y como De Cauwer s¨®lo hizo octavo, logr¨® de esta forma el corredor de $aura el maillot verde. Muy merecido, sin duda, porque se ha distinguido sin suerte en todas las,llegadal, , pesar de tener inflamada la rodilla derecha. Pero el panorama, de cualquier manera, es hasta ahora desalentador. Triunfos 'extranjeros en todas las etap¨¢.s,'aunque Agostinho est¨¦ encuadrado en un equipo espa?ol. En a?os anteriores, al menos, alg¨²n espa?ol ganaba en estas primeras, etapas y eso que hab¨ªa verdaderos sprinters.