Los Reyes, en Washington

A las 2,30 de la madrugada (hora principal) -siete y media de la tarde, hora local-, llegaron a la base a¨¦rea de Andrews, en el estado de Maryland, los Reyes de Espa?a en su primer viaje oficial a los estados Unidos. Los Monarcas se trasladaron posteriormente a su residencia oficial en Washington, Blair House, que se encuentra frente a la Casa Blanca. En esta primera visita de un soberano espa?ol a los Estados Unidos, el Rey Juan Carlos intervendr¨¢ ante la Asamblea Bicameral del Congreso USA y ser¨¢ recibido por el Dresidente Ford.

La presenc¨ªa del Monarca espa?ol en el Congreso -honor concedido ¨²nicamente a los m¨¢s relevantes jefes de Estado extranjeros- tiene adem¨¢s la importancia simb¨®lica de sellar con su presencia los lazos de amistad entre los dos pa¨ªses en el momento en que el Senado norteamericano se prepara para ratificar el nuevo Tratado de Amistad y Cooperaci¨®n hispano-norteamericano, que tendr¨¢ una vigencia de cinco a?os.El Rey, poco antes de salir de Santo Domingo hacia Estados Unidos; dirigi¨® un mensaje a la Conferencia de las Naciones Unidas sobre los asentamientos humanos, en el que hizo un ofrecimiento de cooperaci¨®n espa?ola a los trabajos y esfuerzos de dicha conferencia.

?Las experiencias que van a intercambiar entre s¨ª las distintas delegaciones -manifest¨® don Juan Carlos- y su trabajo en com¨²n, deben beneficiar a cada uno de los ciento cincuenta pa¨ªses participantes, pero muy especialmente a las naciones menos favorecidas o menos desarrolladas. De esta forma se ayudar¨¢ a realizar la justicia distributiva a nivel internacional que es la base m¨¢s s¨®lida para la paz.?

La visita de los Reyes a Santo Domingo, de treinta horas escasas, finaliz¨® en el aeropuerto de la ciudad antillana entre los v¨ªtores y aplausos y el cari?o popular que ha acompa?ado a los Monarcas espa?oles desde su llegada el pasado lunes. El presidente Balaguer despidi¨® a Sus Majestades al pie del avi¨®n, al tiempo que se disparaban veintiuna salvas en su honor.

La jornada de ayer de don Juan Carlos y do?a Sof¨ªa estuvo presidida por el contacto directo con los espa?oles residentes en Santo Domingo (y en otros pa¨ªses hispanoamericanos cercanos que se desplazaron a la isla para esta ocasi¨®n), con los que los Reyes se encontraron en la Casa de Espa?a. El Rey dijo a los espa?oles que deb¨ªan concentrar sus energ¨ªas ?en la b¨²squeda de f¨®rmulas de colaboraci¨®n con nuestros hermanos de Am¨¦rica?.

La ¨²ltima jornada de los Reyes, en Santo Domingo se complet¨® con una visita al monumento dedicado a los h¨¦roes de la Rep¨²blica y otra al convento de los dominicos. En contra de lo previsto en el programa oficial, los Monarcas rompieron todo protocolo al expresar su deseo de visitar otras zonas de la capital.

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