Los pol¨ªticos toman postura ante la Ley de Asociaci¨®n
NAZARIO AGUADOPartido del Trabajo de Espa?a
En nuestra opini¨®n, este Gobierno no ten¨ªa posibilidad ni voluntad de sacar una ley que legalizara todos los partidos pol¨ªticos sin discriminaci¨®n. La ley, tal como ha quedado, y a pesar de las modificaciones que han sido introducidas en el proyecto, sigue siendo totalmente antidemocr¨¢tica y su objetivo es tratar de dividir el campo de fuerzas de la oposici¨®n, objetivo que yo creo no va a conseguir de ninguna forma.
El compromiso de Coordinaci¨®n Democr¨¢tica no admitir¨ªa que sus miembros pudieran aceptar estas condiciones, y por tanto estamos convencidos de que este compromiso se va a respetar.
DIEZ-ALEGRIA Y FRAX
Partido Socialdem¨®crata
Una verdadera ley de asociaciones deber¨ªa reconocer la posibilidad de constituci¨®n y actuaci¨®n en la legalidad de todos los partidos pol¨ªticos. Ciertamente habr¨¢ grupos que se excluyan a s¨ª mismos del juego democr¨¢tico en funci¨®n de su actuaci¨®n p¨²blica concreta: ser¨¢ su decisi¨®n y su responsabilidad. Pero negar a priori, desde el poder, con clara arbitrariedad y practicando una verdadera discriminaci¨®n ideol¨®gica, la posibilidad de la legalidad a importantes sectores de la vida nacional, supone de alg¨²n modo partir el pa¨ªs en dos, arrinconando contra la pared a quien de este modo se niega la palabra.
Es absurdo pretender que no se haga pol¨ªtica en la calle, cuando a muchos, espa?oles se les niega otro lugar donde hacerla. Todo esto no es un juicio moral; es una cuesti¨®n de hecho que aflora todos los d¨ªas desde la realidad cotidiana, y en pol¨ªtica negar la realidad es peor que un crimen; es una torpeza.
Si se tiene en cuenta todo el paquete de la legislaci¨®n reformista, para un partido pol¨ªtico existente la aceptaci¨®n de una legalizaci¨®n al amparo de la nueva ley supondr¨ªa un intento de jugar a la democracia en un marco no democr¨¢tico, y estos intentos, hoy, est¨¢n abocados al fracaso.
F. ALVAREZ DE MIRANDA
Izquierda Democratica.
Promotor del Partido Popular.
La ley ser¨ªa plenamente v¨¢lida en un contexto que fuera inequ¨ªvocamente democr¨¢tico, habida cuenta de que los proyectos anunciados de reforma de las Leyes Fundamentales tienen algunos defectos esenciales. Pienso que, hoy por hoy, esa ley es un lujo, porque no van a servir para nada unos partidos que despu¨¦s no van a tener posibilidades de control del Poder Ejecutivo y que, en cuanto a las C¨¢maras, va a instaurar una democracia que no ser¨¢ plenamente representativa.
JOSEP ANDREU-ABELLO
Falta saber c¨®mo ser¨¢ la redacci¨®n definitiva de la ley, despu¨¦s de las enmiendas, pero coincido ya desde ahora con Jos¨¦ Mar¨ªa Gil-Robles, en el sentido de que no representa una soluci¨®n. El ¨²nico camino es un gobierno de concentraci¨®n nacional y unas Cortes
XAVIER ARZALLUZ
Partido Nacionalista Vasco
El derecho de asociaci¨®n y concretamente el de formaci¨®n de partidos pol¨ªticos es un derecho fundamental en el que puede caber una regulaci¨®n, pero sin que quede ning¨²n resquicio al arbitrio del poder, y, por supuesto, esa regulaci¨®n debe emanar de un orden constitucional establecido a partir de la voluntad popular y no de ninguna otra voluntad. Ahora mismo, lo que creo procedente no es legislar en este terreno, sino derogar todas aquellas leyes que impiden el libre juego de los partidos pol¨ªticos.
EMILIO ATARD
Alianza Popular Regional Valenciana
Aunque a cualquier hombre de derecho le repugna el procedimiento de alcanzar esta ordenaci¨®n legal por la v¨ªa de unas Cortes que no representan mas que a las personas que la componen, y sin la participaci¨®n de quienes aspiramos al ejercicio del derecho de formar partidos pol¨ªticos, personalmente entiendo que se debe agotar la v¨ªa legal, utilizando la posibilidad que se ofrece. En este sentido, me someter¨¦ al acuerdo que adopte mi partido en la asamblea del pr¨®ximo d¨ªa 14.
ENRIQUE BARON
Federaci¨®n de Partidos Socialistas
Nosotros desear¨ªamos que la postura frente a la ley sea una decisi¨®n unitaria de la oposici¨®n expresada en sus instancias unitarias. Naturalmente, estamos considerando la situaci¨®n, pero no se puede hacer una valoraci¨®n aislada sin tener en cuenta que no se ha cumplido ninguna de las condiciones planteadas por la oposici¨®n -amnist¨ªa, libre retorno exiliados, pleno reconocimiento de los derechos ciudadanos-. No se puede aceptar la arbitrariedad ni la discrecionalidad.
MANUEL BROSETA
Dem¨®crata-independiente, miembro de la Taula
Me parece insuficiente la ley aprobada. Ello, no obstante, es un s¨ªntoma muy importante, pues demuestra, desde dentro del R¨¦gimen, la absoluta necesidad de cambio de un sistema pol¨ªtico que ha sido opresor durante cuarenta a?os. Por otro lado, constituye una autoconfesi¨®n del fracaso de todo un sistema pol¨ªtico y el certificado de defunci¨®n de los restos totalitarios de la sCortes. La ley aprobada es el resultado de la fuerza reivindicativa del pueblo espa?ol y la oposici¨®n democr¨¢tica. Sin ellas, el R¨¦gimen jam¨¢s hubiera propuesto esta reforma.
EJECUTIVA
del Partido Socialista. Obrero Espa?ol
La nueva ley de asociaciones pol¨ªticas o partidos pol¨ªticos est¨¢ mediatizada por la ausencia de una legitimidad democr¨¢tica del proyecto reformista.
A la vista de la situaci¨®n que crea la nueva ley, el PSOE manifiesta: 1.? su voluntad de continuar luchando por la ruptura democr¨¢tica, es decir, por la conquista de las libertades democr¨¢ticas sin restricciones y por la devoluci¨®n de la soberan¨ªa al pueblo; 2.?, reafirma la necesidad de que las fuerzas democr¨¢ticas mantengan sus compromisos pol¨ªticos con los objetivos citados; 3.?, las decisiones pol¨ªticas correspondientes emanar¨¢n de los acuerdos del Comit¨¦ Nacional, m¨¢ximo ¨®rgano de direcci¨®n del Partido.,
F. FERNANDEZ ORDO?EZ
Socialdem¨®crata independiente
Se trata de una reforma producida unilateralmente, pero que podr¨ªa suponer una base m¨ªnima de participaci¨®n. Su aceptaci¨®n por la oposici¨®n depender¨¢ tanto del acuerdo de las fuerzas pol¨ªticas como de la existencia real de un contexto democr¨¢tico.
El derecho de asociaci¨®n pol¨ªtica s¨®lo tiene sentido en funci¨®n del reconocimiento efectivo, el respeto y la garant¨ªa de todas las libertades p¨²blicas.
ANTONIO GARCIA LOPEZ
Partido Social Dem¨®crata Espa?ol
La Comisi¨®n nacional de nuestro partido ha subrayado las deficiencias de la presente ley cuando era todav¨ªa proyecto. Pero considerando la anormalidad y dificultades de la transici¨®n, estimamos que la ley puede significar un adelanto y, continuando la l¨ªnea del PSDE de utilizar todas las oportunidades que ampl¨ªen el campo de las libertades ciudadanas, vamos a utilizarlo.
No aceptamos la reforma del franquismo. Queremos la reforma de la Constituci¨®n y el cambio del Estado. Las Leyes Fundamentales -la Constituci¨®n actual- sirvieron al franquismo; por ello no pueden servir a la nueva Monarqu¨ªa. Queremos un refer¨¦ndum separado donde se apruebe la ley de Sucesi¨®n y donde se plebiscite la fe democr¨¢tica del Rey. Es decir, que el refer¨¦ndum sea un aut¨¦ntico pacto entre el pueblo y el Rey, y que empiece una nueva legalidad y en ese per¨ªodo constituyente sea el Rey quien tome la iniciativa en el desmontaje de las leyes de la dictadura, que permitan que las consultas electorales sean aut¨¦nticamente democr¨¢ticas.
GARRIGUES WALKER
Partido Dem¨®crata
No se puede enjuiciar s¨®lo esta ley, sino el contexto de la reforma, en que la ley de asociaci¨®n es una m¨¢s de las que debaten las Cortes del 18 de Julio.
Adolece esta ley de todas las virtudes que se presuponen en un proceso constituyente como el que tenemos que vivir -y en cierta medida estamos viviendo-estamos en esa v¨ªa reformista de la ?democracia otorgada?, es decir, las leyes se aprueban sin consultar con los pol¨ªticos y las organizaciones sindicales marginadas de las instituciones del Estado espa?ol.
Desde un punto de vista m¨¢s espec¨ªfico, la ley parece un avance respecto a lo que ya exist¨ªa. No tengo criterio, en este momento, sobre la forma de proceder en el futuro, tanto por parte de nuestra organizaci¨®n como de las otras fuerzas pol¨ªticas a¨²n ilegales.
J. M. GIL-ROBLES Y QUI?ONES
Federaci¨®n Popular Democr¨¢tica
La ley de Asociaci¨®n Pol¨ªtica es un texto que se necesita estudiar con cuidado, y mientras no tenga formado un juicio preciso es mejor no decir nada m¨¢s. Por otra parte, ¨¦sta es una cuesti¨®n en que los criterios personales deben ceder ante los que pueda adoptar el grupo. Siento no poder decir m¨¢s por el momento.
JOSE ANTONIO GIRON
Yo he votado no a esta ley, como ustedes saben. ?Por qu¨¦? Pues porque no me gusta. Comparto al cien por cien las razones expuestas en la C¨¢mara por Fern¨¢ndez- Cuesta.
ERNEST-LLUCH
Partit Socialista del Pa¨ªs Valenci¨¢
La aprobaci¨®n de la ley supone el final del franquismo, pero no supone a¨²n la alternativa democr¨¢tica. Nuestra voluntad es la reflejada unitariamente en la Taula del Pa¨ªs Valenciano y en la Federaci¨®n de Partidos Socialistas (FPS), es decir, el reconocimiento de todos los partidos pol¨ªticos, sin excepci¨®n alguna.
GREGORIO LOPEZ BRAVO
Les ruego me disculpen por no responder a su encuesta, pero prefiero no hacerlo en este caso por mi calidad de presidente de la Comisi¨®n de Leyes Fundamentales y Presidencia del Gobierno.
ARMANDO LOPEZ SALINAS
Partido Comunista de Espa?a
La ley de asociaci¨®n pol¨ªtica se trata de una especie de ?carta otorgada? que no viene a resolver los problemas, dado que seg¨²n la ley, existen discriminaciones en la misma. Es de esperar que las fuerzas pol¨ªticas se lo piensen dos veces antes de pasar por la ventanilla. Lo que se pretende es un contrato de adhesi¨®n hacia unas formas no democr¨¢ticas de las libertades pol¨ªticas. Yo creo que, en principio, las fuerzas pol¨ªticas har¨¢n honor a los compromisos contra¨ªdos.
DIEGO MARQUEZ
C¨ªrculos Jos¨¦ Antonio.
Promotor de FE de las JONS
En l¨ªneas generales, me parece bien la ley de asociaci¨®n. Sin embargo, creo que se ha tenido excesivo temor a utilizar la palabra ?partido?, cosa que no entiendo, porque si el reconocimiento de los partidos pol¨ªticos es la condici¨®n que nos pone la Europa liberal para entrar en su juego y la aspiraci¨®n m¨¢xima de nuestros pol¨ªticos, sean del R¨¦gimen anterior o de este, es precisamente la incorporaci¨®n a Europa, no s¨¦ a qu¨¦ vienen esos miedos a llamar a las cosas por su nombre.
RAUL MORODO
Partido Socialista Popular
La ley es positiva con respecto a los proyectos anteriores, aunque insuficiente. Ha sido interesante tambi¨¦n la votaci¨®n. Es claro que el b¨²nker ha quedado en minor¨ªa y que se evidencia un deslizamiento hacia el reformismo moderado.
Sin embargo, la realidad actual espa?ola y la organizaci¨®n pac¨ªfica del futuro pol¨ªtico exige un planteamiento de no discriminaci¨®n.
El PSP, en cuanto partido democr¨¢tico de los trabajadores, luchar¨¢ por la libertad e igualdad de acci¨®n de todos los partidos que est¨¢n hoy pn la clandestinidad o semiclandestinidad, y desea ayudar as¨ª a que entre todos se establezca un sistema democr¨¢tico pluralista.
El PSP estudiar¨¢ a fondo esta ley y har¨¢ las consultas pertinentes al organismo unitario de la oposici¨®n, es decir, a Coordinaci¨®n Democr¨¢tica.
CARLOS OLLERO
Catedr¨¢tico de Teor¨ªa del Estado
En un plano te¨®rico y jur¨ªdico formal, esta ley parece ser menos limitativa que las anteriores sobre el mismo tema. En el plano real y pol¨ªtico, un definitivo juicio sobre la ley l¨ªa de depender de la forma en que se interprete y aplique. Si va a servir para encuadrar el efectivo pluralismo pol¨ªtico espa?ol y facilitar una aut¨¦ntica canalizaci¨®n de la voluntad nacional para el verdadero ejercicio de una democracia pol¨ªtica y social, mos que lo permitir¨ªan, pero tambi¨¦n mos que lo permitir¨ªa, pero tambi¨¦n condicionamientos y mecanismos que pueden obstaculizarlos. De serle franco, mucho me temo que esta ley en el contexto de la anunciada ?operaci¨®n? de reforma constitucional y refer¨¦ndum y como pieza de la misma, pueda constituir, en definitiva, una peligrosa desviaci¨®n paralizadora del profundo, proceso democratizador que Espa?a necesita.
NICOLAS REDONDO
Uni¨®n General Trabajadores
La nueva ley de asociaciones, ni por su contenido ni por su origen, puede dar satisfacci¨®n a las aspiraciones democr¨¢ticas de los pueblos del Estado espa?ol. Es un falso remedo de las leyes existentes en los pa¨ªses democr¨¢ticos, y mi impresi¨®n es que con ella se pretende aplazar una vez m¨¢s la devoluci¨®n al pueblo d¨¦ la soberan¨ªa.
RODRIGUEZ DE VALCARCEL
Yo me he abstenido en la votaci¨®n por una raz¨®n de procedimiento. Es una ley muy importante y deb¨ªa haber pasado por la Comisi¨®n correspondiente de las Cortes; su propia trascendencia exig¨ªa un estudio r¨¢pido y urgente, pero meditado.
?Mi opini¨®n sobre la ley? Bueno, ya est¨¢ aprobada y hay que esperar que entre en juego para comprobar su bondad. Yo desear¨ªa que fuera un elemento de convivencia y no de desuni¨®n.
JORDI SOLE-TURA
Partit Socialista Unificat de Catalunya
Para m¨ª la votaci¨®n de las Cortes demuestra lo que ya sab¨ªamos: primero, que el b¨²nker no tiene ninguna fuerza real y, segundo, que estas Cortes no son representativas. Por consiguiente, la alternativa real no es b¨²nker o reformismo, sino pseudodemocracia otorgada -y por tanto limitada- o democracia sin discriminaciones.
RAMON TAMAMES
Coordinaci¨®n Democr¨¢tica
Esta ley es una pieza m¨¢s de la democracia ordenancista de los ingenieros sociales que pretenden construir un modelo pol¨ªtico sobre la base de un pa¨ªs que pretenden modelar ellos mismos. Pero el pa¨ªs tiene su din¨¢mica propia, y los partidos pol¨ªticos seguir¨¢n viviendo y desarroll¨¢ndose al margen del ordenancismo oficial.
Con la reforma del C¨®digo Penal hubiera bastado.
RAMON TRIAS-FARGAS
Esquerra Democr¨¢tica de Catalunya
No puedo expresar mi opini¨®n al respecto porque, en el seno del Consell de Forces Pol¨ªtiques de Catalunya, los once partidos que lo integramos tomamos el acuerdo de elaborar un comunicado conjunto sobre este tema. Ser¨¢ hecho p¨²blico ma?ana, viernes.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Enrique Bar¨®n Crespo
- Declaraciones prensa
- Nicol¨¢s Redondo
- Gregorio L¨®pez Bravo
- Jos¨¦ Antonio Garc¨ªa L¨®pez
- Carlos Ollero
- Alejandro Rodr¨ªguez de Valc¨¢rcel
- Cortes Constituyentes
- Jordi Sol¨¦ Tura
- Jos¨¦ Mar¨ªa Gil-Robles y Qui?ones
- Jos¨¦ Antonio Gir¨®n de Velasco
- Ernest Lluch
- Joaqu¨ªn Garrigues Walker
- Ram¨®n Tr¨ªas Fargas
- Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez
- Manuel Broseta Pont
- Pol¨ªtica nacional
- Josep Andreu Abell¨®
- Raul Morodo
- Nazario Aguado
- Ram¨®n Tamames
- Comisi¨®n Ejecutiva Federal
- Xabier Arzalluz
- Fernando ?lvarez de Miranda
- Ejecutivas partidos