El Congreso falangista acab¨® en altercado
Unas tres mil personas asistieron al mitin de clausura celebrado ayer en el palacio de Cristal de la Casa de Campo, por el I Congreso Nacionalsindicalista de Falange Espa?ola de las JONS. Adem¨¢s de insistir en sus denuncias contra el Movimiento y en las reivindicaciones falangistas que contin¨²an pendientes, los hombres de camisa azul hicieron frecuentes invocaciones a la unidad.
El acto de la Casa de Campo se inici¨® con unas palabras de Ricardo de Zulueta, secretario general del Congreso, y posteriormente se produjo la intervenci¨®n de cuatro oradores. Entre ellos, Diego M¨¢rquez Horrillo, presidente de los C¨ªrculos Jos¨¦ Antonio, se refiri¨® a los esfuerzos hechos para reorganizar la Falange, y previ¨® un camino dif¨ªcil para los falangistas a partir de ahora.Esta previsi¨®n se basa -seg¨²n las palabras del se?or M¨¢rquez Horrillo -en que ?tenemos que aclarar lo que ha pasado en Espa?a durante estos cuarenta a?os. Falange Espa?ola no ha sido nunca el Movimiento Nacional, y no ha detentado, en ning¨²n momento, el poder; porque si as¨ª hubiera sido, Espa?a no tendr¨ªa hoy un sistema capitalista, ni una forma de Gobierno mon¨¢rquica?. Tambi¨¦n enumer¨® las reivindicaciones que ahora, ?m¨¢s que nunca?, plantea la Falange, entre las que figuran la na cional¨ªzaci¨®n de la Banca, la revoluci¨®n agraria, el capital en manos del trabajo, etc¨¦tera.
David Jato -presidente del Congreso-, tras afirmar que "hoy iniciamos la segunda andadura de la falange", pas¨® revista a una serie de temas, como la presencia norteamericana en Espa?a, que critic¨® duramente; la enemistad entre Falange y una parte de la Iglesia:-?tal vez ha llegado hasta los obispos la infiltraci¨®n marxista en la Iglesia?, aventur¨®; cr¨ªticas al se?or Areilza, uno de los cantores del nacional sindicalismo?, y a la familia Garrigues, ?que ha colaborado en la compra de Espa?a por parte de los Estados Unidos?, seg¨²n el orador, etc¨¦tera, Tambi¨¦n atac¨® a parte de la prensa, y termin¨® pidiendo la unidad falangista.
Con anterioridad, Luis Angel Peradejordi hab¨ªa repartido cr¨ªticas al liberalismo trasnochado y a materialismo marxista; y Manuel Ramos G¨®mez asegur¨®, por si parte, que la Organizaci¨®n Sindica no ten¨ªa nada de nacionalsindicalista, al propio tiempo que atac¨® a la deslumbrantemente juvenil de Gil Robles? y a los dem¨®cratas de futuro, muchos de los cuales ?han ocupado decenas de cargos, todos a dedo?.
Concentraci¨®n e incidentes
El mitin finaliz¨® con el canto del Cara al Sol, y seguidamente los asistentes se trasladaron a la casa natal de Jos¨¦ Antonio Primo de Rivera, en la calle de G¨¦nova. La polic¨ªa cort¨® el tr¨¢fico, y los falangistas desplegaron ante la fachada -situada enfrente del futuro edificio de la Jefatura del Movimiento- sus banderas y pancartas, al propio tiempo que gritaban Falange s¨ª; Movimiento no; Patria, justicia, revoluci¨®n; Abajo el capital, Estado sindical.Hubo unas palabras de Manuel Mart¨ªnez Sospedra, y posteriormente se rez¨® el Padrenuestro y se cant¨® el Cara al Sol, brazo en alto. Finalizado este himno y los gritos de ritual, los organizadores de la concentraci¨®n indicaron, mediante meg¨¢fonos, que el acto hab¨ªa finalizado.
En este momento, un grupo personas, que no vest¨ªan la camisa azul -partidarios de la l¨ªnea hedillista-, invitaron a los dem¨¢s a manifestarse, al grito de Falange est¨¢ en la calle. Una parte de los falangistas sigui¨® a los anteriores, mientras otros intentaban disuadirles de su intento. Se organiz¨® un altercado, en el que hubo vivas discusiones y un peque?o intercambio de golpes, r¨¢pidamente sofocados por personas que se interpusieron.
Despu¨¦s de media hora de incidentes, los falangistas fueron abandonando el lugar de la concentraci¨®n, de modo pac¨ªfico, y se reanud¨® el tr¨¢fico por la calle de G¨¦nova. Un hijo de Manuel Hedilla -el que fue segundo jefe nacional de Falange Espa?ola- figuraba entre el grupo de personas que hab¨ªan intervenido en el altercado, acusando de ingenuos a los partidarios de la l¨ªnea del Congreso, y advirti¨¦ndoles que corr¨ªan peligro de ?caer en la derecha?.
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