Cierra el Peque?o Teatro
Sin ayuda oficial y ahogado por los impuestos
El pasado d¨ªa 8 de julio, a las nueve de la ma?ana, funcionarios del Juzgado n¨²mero 22 de Madrid procedieron al cierre y desalojo del Peque?o Teatro, de la calle Magallanes, 1. Cerraban as¨ª casi cinco a?os de trabajo investigador, en un local dedicado al teatro independiente. Y toda una larga cadena de dificultades y problemas entre el grupo que lo regentaba, el TEI, y su p¨²blico y la misma persistencia de su labor.El Peque?o Teatro fue alquilado por el TEI hace cerca de cinco a?os, en un intento de crear un centro de actividades teatrales y culturales independientes. Por un lado, su propio trabajo como grupo, ese laboratorio de investigaci¨®n esc¨¦nica e interpretativa, con especial atenci¨®n al trabajo de los actores, y contando con maestros como William Layton, formador de actores en la l¨ªnea de Stanislawski, y Arnold Taraborelli, igualmente especializado en ese m¨¦todo teatral que es la interpretaci¨®n org¨¢nica. Por otro lado, el peque?o local era plataforma de presentaci¨®n de los montajes del propio TEI y de numerosos grupos invitados. Y as¨ª se pudieron ver, de la mano del TEI, obras de Durrematt, Brecht, Tennesse Williams, Harold Pinter, Camus, Pablo Poblaci¨®n, etc. No hemos podido ver aqu¨ª C¨¢ndido, ese ¨²ltimo montaje del Teatro Experimental Independiente que se estrena en un local de revista y que ir¨¢ a la Bienal de Venecia.
Vinieron, invitados, un buen n¨²mero de grupos independientes, espa?oles y experimentales europeos. El Roy Hart Theatre, con su teatro de voz y cuerpo, fue de lo m¨¢s espectacular. Y pasaron La Cuadra, T¨¢bano, Esperpento, Mediod¨ªa, Bonino... y un largo etc¨¦tera.
Hay que decir, que, adem¨¢s, en el Peque?o Teatro se hac¨ªan otras actividades, no propiamente teatrales y s¨ª plenamente culturales: conferencias, exposiciones de pintura, recitales musicales, presentaci¨®n de libros, etc. Y que siempre, en una doble selecci¨®n: ideol¨®gicamente progresivos, dem¨®cratas, con ideas socialistas, en un amplio espectro. Y art¨ªsticamente, buscando la calidad art¨ªstica, la novedad, la aportaci¨®n experimental.
El local se ha cerrado por dificultades econ¨®micas, despu¨¦s de una larga pelea por la supervivencia. Aproximadamente en marzo, la prensa madrile?a recog¨ªa el SOS tan dram¨¢tico como, al parecer infructuoso del grupo, que llamaba la atenci¨®n sobre su extra?a situaci¨®n.
De una parte, ninguna ayuda oficial y, en cambio, un r¨¦gimen de impuestos de cabaret, acentuado por la misma Sociedad de Autores que se llevaba, seg¨²n datos publicados por el TEI entonces, entre dos y tres mil pesetas diarias de derechos de autor. M¨¢s el impuesto de menores, un 7 por 100 del taquillaje.
Si a esto a?adimos que, de acuerdo con las reivindicaciones de los actores y su lucha contra la doble sesi¨®n, ¨²nicamente se hac¨ªa una funci¨®n diaria, y que en ese intento de acercamiento a un p¨²blico amplio -aunque parad¨®jicamente, era minoritario- los precios se manten¨ªan bastante bajos, el negocio resultaba ruinoso.
Durante todo este tiempo el TEI ped¨ªa, para resolver su problema, que el Peque?o Teatro se librara de impuestos y fuera considerado como centro de inter¨¦s cultural, al nivel de, por ejemplo, los cines de Arte y Ensayo; que la censura tuviera con ellos alg¨²n tipo de consideraci¨®n y que alg¨²n organismo oficial les diera ayuda econ¨®mica. El proceso termin¨® como ya sabemos.
Manifiesto TEI a la opini¨®n p¨²blica
As¨ª que, ante el cierre, el TEI ha lanzado el ¨²ltimo comunicado p¨²blico desde el Peque?o Teatro. All¨ª expresan que ?este cierre se une y vuelve a poner de manifiesto la situaci¨®n insostenible de tantos trabajadores de la cultura, la incomprensi¨®n, el desamparo e incluso el desprecio y la ineficacia con que los organismos de la Administraci¨®n controlan la acci¨®n de la cultura? y denuncia ?el cerco econ¨®mico a que este: local ha estado sometido?. Por todo ello, reclaman y exigen ?una administraci¨®n pol¨ªtica teatral democr¨¢ticamente elegida por los miembros de nuestra profesi¨®n, la libre utilizaci¨®n de todo tipo de local p¨²blico para el hecho teatral, y de los medios de comunicaci¨®n p¨²blica, la abolici¨®n de la censura en todas sus formas de expresi¨®n, y sobre todo la consideraci¨®n por parte del Gobierno de que el, teatro es un servicio p¨²blico para nuestro pa¨ªs?. ?Todo esto -dicen- llevar¨ªa consigo la inmediata ruptura de la legalizaci¨®n actual, que s¨®lo beneficia a un n¨²mero determinado y m¨ªnimo de empresarios teatrales, en su mayor¨ªa propietarios o arrendatarios de los locales legalizados del pa¨ªs.?
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