La bandera del Pa¨ªs Vasco

La ?Ikurri?a?, como tantos otros s¨ªmbolos, ha desbordado los prop¨®sitos de sus creadores y para muchos vascos vizca¨ªnos, y no vizca¨ªnos, ha pasado a representar a su tierra y a su pueblo. Lejos de los confines de Vizcaya, en territorio franc¨¦s, prolifera libre y pac¨ªficamente... Tambi¨¦n prolifera en Guip¨²zcoa. Alava y Navarra, y por supuesto, en Vizcaya, si bien, por desgracia, no tan libre ni tan pac¨ªficamente. En todo caso no debe olvidarse que, curiosamente, la propia bandera espa?ola lleva tan s¨®lo los colores de las barras de Catalu?a y no los de otras regiones. No nos extra?e, pues, que la lkurri?a lleve ¨²nicamente los colores del escudo de Vizcaya.Preocupa a algunos el hecho de que la lkurri?a haya sido s¨ªmbolo de un partido pol¨ªtico, sin quiz¨¢ recordar que otro tanto ocurre con la bandera falangista, que desde hace cuarenta a?os ondea en lugares p¨²blicos con rango preferente, en todo el territorio del Estado.

La reconciliaci¨®n no se har¨¢ en los t¨¦rminos de los vencedores de la guerra civil, sin concesi¨®n alguna. La amnist¨ªa es buena prueba de ello.

No es necesario proclamar a la lkurri?a s¨ªmbolo del pueblo vasco, para permitir su utilizaci¨®n por quienes as¨ª la entienden. Tampoco es preciso nacionalizar los medios de producci¨®n para autorizar las banderas rojas, o los pu?os en alto.

Nuestra solicitud inicial estaba firmada por 40 democristianos, entonces clandestinos, ninguno de los cuales pertenece a partidos separatistas. Sus cinco primeros firmantes son vascos adscritos a un partido -la Democracia Cristiana Vasca-, que expresa e inequ¨ªvocamente reconoce al Estado espa?ol como veh¨ªculo para la incorporaci¨®n de nuestro pueblo a una Europa unida y sin fronteras.

Secretario general de la Democracia Cristiana Vasca.