El H¨¦rcules, en l¨ªnea austera, ha disminuido el presupuesto
El H¨¦rcules es, de toda la Primera Divisi¨®n, el equipo que m¨¢s ha seguido las consignas de austeridad que continuamente se nos sugieren. En una pretemporada que ha batido r¨¦cords de fichajes espectaculares, ha preferido vender antes que comprar, y reduce este a?o su presupuesto con respecto al de la temporada ¨²ltima.El f¨²tbol espa?ol no se ha mostrado muy inclinado a seguir las consignas de austeridad dictadas por el Gobierno. M¨¢s bien ha preferido arrojarse a unos dispendios superiores a los de otras temporadas y han incorporado en esta pretemporada otra larga lista de jugadores de m¨¢xima categor¨ªa y de elevados precios: Jensen, Kempes, Brindisi, Scotta... El H¨¦rcules, sin embargo, ha preferido seguir las normas y se ha constituido en todo un ejemplo. Ha preferido vender mejor que comprar. De su plantilla han salido Juan Carlos, Juanito y Omar Rey, y eso le ha reportado una buena cantidad de millones. S¨®lo la cuarta parte de esa cantidad se ha empleado en nuevos fichajes. Lo que decimos: todo un ejemplo. As¨ª, el H¨¦rcules ha conseguido confeccionar un presupuesto de 97 millones, menor que el de la temporada anterior.
Al frente del equipo sigue Arsenio, que comienza su cuarta temporada. Con Arsenio el H¨¦rcules consigui¨® el ascenso hace tres temporadas, y con ¨¦l se ha mantenido con mucho decoro las dos ¨²ltimas. Arsenio trabaja bien y en Alicante no quieren que se vaya. De su mano el H¨¦rcules se ha convertido en un equipo con una curiosa facultad: punt¨²a mucho fuera y se deja muchos de esos puntos en su casa. La desproporci¨®n en este sentido ha sido muy notable en las dos ¨²ltimas campa?as ligueras, en las que el nivel de positivos conquistados por el H¨¦rcules era el de un equipo de los de la parte alta de la tabla, en tanto que ced¨ªa en casa puntos como el colista. Arsenio es un hombre que domina el arte del contragolpe, p ero nunca consigui¨® que su equipo jugara con fluidez en el Rico P¨¦rez.
Fichajes poco conocidos
Pese a la austera pol¨ªtica del H¨¦rcules en cuanto a inversi¨®n en fichajes, no cabe afirmar taxativamente que su plantilla se haya debilitado. El H¨¦rcules ha hecho unos cuantos fichajes de gente poco conocida pero cuya val¨ªa no se puede desestimar. Es gente que, cuando menos, merece un margen de confianza. Los fichajes son el delantero alem¨¢n Lubecke que procede del Bayern 05 (ojo: no confundir con el Bayern de Munich); el tambi¨¦n delantero Charles, un espa?ol criado en Montpellier, ciudad en cuyo equipo jugaba; y los valencianistas Ferrer D¨ªaz y Sancayetano, que formaron parte de la operaci¨®n del traspaso de Juan Carlos. La plantilla que tiene a su disposici¨®n Arsenio es ¨¦sta:
Porteros: Deusto, Humberto (paraguayo) y Santoro (argentino)
Defensas: Jos¨¦ Antonio, Comisso (paraguayo), Glullano (argentino), Rivera, Quiquey Ernesto.
Centrocampistas: Saccardi (argentino), Baena, Betz¨²en, Lasanta (uruguayo), Cobos, Serrano y Santi.
Delanteros: Charles, Pep¨ªn, Barrios, Carcel¨¦n, Lubecket (alem¨¢n), Sancayetano, Teo y Aguilar.
Son extranjeros Lubeeke, Saccardi y Santoro, si,bien ¨¦ste espera obtener la nacionalizaci¨®n de inmediato.
Aparte de la consecuci¨®n de la permanencia, el club alicantino tiene en proyecto dos cuestiones: la ampliaci¨®n del Rico P¨¦rez en 10.000 localidades m¨¢s y la construcci¨®n de una ciudad deportiva. Se buscan estos d¨ªas cr¨¦ditos y, naturalmente, se ha solicitado un pr¨¦stamo de la DND, y el deseo es comenzar las obras el pr¨®ximo verano. Por lo dem¨¢s, todo es tranquilidad en el H¨¦rcules, que ha aumentado muy levemente las cuotas de sus socios- El equipo alicantino inicia ahora su d¨¦cima temporada en Primera Divisi¨®n, y tercera consecutiva. Es evidente que no est¨¢ llamado a moverse por la zona alta, y cabe la posibilidad de que pase apuros. Las esperanzas de permanencia se basan en la fortaleza de la parte de atr¨¢s y en, el buen acoplamiento general del equipo, que mantiene muchos de los titulares del a?o pasado. En cualquier caso, est¨¢ claro que su plantilla no es muy larga en calidad.
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