El camino hacia la unidad, largo y dif¨ªcil
La jornada hist¨®rica de la oposici¨®n democr¨¢tica ha dado unos resultados cuyo alcance es dif¨ªcil de medir, por el momento. La heterogeneidad de las representaciones asistentes y de sus propuestas convert¨ªa en dif¨ªcil el logro de un acuerdo concreto y espectacular. Ello se ha reflejado a lo largo de toda la reuni¨®n y lo ¨²nico que ha quedado perfectamente claro es el deseo general de llegar a la unidad. Conciliar este esp¨ªritu con propuestas como la autonom¨ªa de Ibiza o la necesidad de gobiernos provisionales para cada nacionalidad, adem¨¢s del Gobierno provisional a nivel de todo el Estado, hace dif¨ªcil lograr un acuerdo brillante y efectivo, cuando otros est¨¢n interesados, casi exclusivamente, en la negociaci¨®n a establecer con el Gobierno.Antes de comenzar la sesi¨®n, Joaqu¨ªn Ruiz-Gim¨¦nez dijo a los periodistas que ?el hecho de reunirnos ya es positivo?, subrayando la necesidad de la unidad y la evidencia de que ?no se podr¨¢ decir nunca que la oposici¨®n no hizo un enorme esfuerzo para lograr el cambio pac¨ªfico?. Mientras tanto, Enrique M¨²gica (PSOE) dec¨ªa que ?nosotros no hablamos de Gobierno provisional, sino de un Gobierno de amplio consenso democr¨¢tico?; y la misma idea era reafirmada, en otro lugar de la sala, por Sim¨®n S¨¢nchez Montero (PCE), quien adem¨¢s insist¨ªa en que ?nuestro deseo es negociar con una sola voz?.
Despu¨¦s de la reuni¨®n, las caras no revelaban especial satisfacci¨®n, ni tampoco -en general- decepci¨®n. Varios de los asistentes hablaron de ?reuni¨®n hist¨®rica?, pero no tanto por sus resultados como por el hecho de que hayan podido sentarse juntos tan heterog¨¦neas representaciones y lograr un acuerdo m¨ªnimo com¨²n, pero sin abordar mayores profundizaciones. El problema m¨¢s serio, seg¨²n nuestras noticias, surgi¨® cuando la Taula valenciana intent¨® poner sobre la mesa el problema de la forma de Estado y de Gobierno. Al final, se lleg¨® al acuerdo de no tocarlo.
Cabe informar tambi¨¦n que en la reuni¨®n participaron, como invitados, representantes de la Federaci¨®n de Partidos Socialistas (FPS), Federaci¨®n Popular Democr¨¢tica (FPD), Partido Comunista Obrero Espa?ol (PCOE) y Alianza Republicana. Aunque no ten¨ªan voz ni voto, algunas delegaciones propusieron que se les permitiera hablar, a lo que renunciaron ?en beneficio de la unidad?.
A nivel de resonancia p¨²blica, la reuni¨®n de ayer obtuvo una atenci¨®n informativa verdaderamente excepcional. No se recuerda en Madrid otra concentraci¨®n mayor de periodistas desde la muerte de Franco. Decepcion¨®, por cierto, el hecho de que al final no hubiera rueda de prensa, limit¨¢ndose la informaci¨®n global a la lectura de un comunicado.
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