El postmao¨ªsmo, ahora

Desde abril del a?o pasado, en que falleci¨® Tong Piwu, hasta la fecha de ayer, la Rep¨²blica Popular China ha perdido a cuatro de sus h¨¦roes legendarios: Chu En-lai, Chu The y Mao Tse-tung.De todas estas desapariciones, fue la de Chu la de mayor envergadura pol¨ªtica en China, descontando, por supuesto, las alteraciones que pueden emanar de la desaparici¨®n f¨ªsica del primer l¨ªder de la China contempor¨¢nea.

Las querellas contenidas, por el saber hacer de Chu, en el seno del partido estallaron d¨ªas despu¨¦s de la muerte del primer ministro, cuando el Comit¨¦ Central se escindi¨® en dos posturas de cara al relevo y personalidad del hombre que deb¨ªa conducir la naci¨®n a falta de la eminencia gris.

Mao no hab¨ªa querido arriesgarse a nombrar un delfin al comprobar con el asunto Lin-Piao que dos l¨ªderes son demasiado para un pueblo, incluso si ese pueblo son m¨¢s de 800 millones de personas.

La crisis pol¨ªtica china que desemboc¨®, en una primera etapa, en la destituci¨®n de Ten Hsiao-ping de sus cargos pol¨ªticos, introdujo en abril pasado nuevos elementos. que han contribuido, por una parte, a mantener la situaci¨®n de bloqueo, y, por otra, a una especie de guerra sorda entre las tendencias dispares dentro del Politbur¨® y el Comit¨¦ Central del PCC, que han cogido en medio a la postura centrista del primer ministro Hua Kuo-feng, que en las ¨²ltimas semanas apareci¨® m¨¢s consolidado y firme que nunca.

En plena campa?a contra el viento derechista, despu¨¦s de la ca¨ªda en desgracia deTeng, Kou-feng aparec¨ªa como una medida transistoria en la jefatura del Gobierno, dependiente de una lucha que no ha finalizado todav¨ªa.

Sin embargo, su entrada como primer vicepresidente del PCC y su ratificaci¨®n como primer ministro oblig¨® a un replanteamiento pol¨ªtico . Se supo que Hua-Kuo-feng ten¨ªa 11 miembros incondicionales en el, Politbur¨®, compuesto por 22, mientras el resto eran independientes, cuatro izquierdistas y dos moderados, afines a la l¨ªnea program¨¢tica de Teng Hsiao-ping.

Los izquierdistas, que hab¨ªanlanzado una dura campa?a para eliminar a Teng Hsiao-ping, no parecieron conformes con la soluci¨®n del problema en la persona de Hua Kuo-feng. ?De qu¨¦ forma si no podr¨ªan interpretarse los conti nuos ataques a Chang Pin-hua, ¨ªntimo de Kou-feng y ayudante del primer ministro en la direcci¨®n de Hunan. Adem¨¢s, otros ¨ªntimos colaboradores del jefe del Gobierno chino han sido criticados por v¨ªa mural.

Posibles perspectivas

Antes de la ca¨ªda de Teng hubo indicios de que los izquierdistas ten¨ªan la pretensi¨®n de colocar definitivamente a Wan Hong-wen a la cabeza del parti do y, a ser posible, a Chang Chun-chiao como jefe de Gobierno (ambos, hombres de la Revoluci¨®n Cultural).

Pero yadesde la firme instalaci¨®n de Hua Kuo-feng en el partido y el Gobierno se vio. que el nuevo primer ministro no parec¨ªa estar dispuesto a llevar un mero papel de ¨¢rbitro en las disputas pol¨ªticas entre las alas izquierdistas y moderadas, sino que era capaz de emprender su propia pol¨ªtica con el apoyo del Politbur¨®, para lo cual anul¨® en cierta manera al hasta ahora prepotente comit¨¦ permanente del Bur¨® Pol¨ªtico, que tras la muerte de Mao tiene s¨®lo tres hombres: Wan Hong-wen, Chan Chun-chiao y Li Ten-shen. Cuando a mediados de junio se anunci¨® que Mao no recibir¨ªa m¨¢s visitar por decisi¨®n del Politbur¨®, el diario h¨²ngaro Magyrorszag afirm¨® rotundamente que ?Mao hab¨ªa sido depurado?. En realidad, la lucha ya estaba por encima del gravemente enfermo presidente del PCC y se libraba en el seno del Politbur¨®, donde los amigos de Kou-feng llevaban las de ganar.

De cara al posmao¨ªsmo, que ya es un hecho, es muy posible que se guarden las apariencias de colegialidad con Hua Kuo-feng a cargo del Gobierno y Wan Hong-wen como representante supremo del partido; sin embargo, en los momentos actuales, el primer ministo figura como el primer personaje del pa¨ªs, es decir, en el Ejecutivo y en el partido, y el que puede ser su lema, ?La revoluci¨®n a trav¨¦s de la producci¨®n?, ya ha sido acu?ado por la siempre combativa prensa oficial en manos izquierdistas.

De todas formas, los giros en la direcci¨®n pol¨ªtica china se ver¨¢n en la reducci¨®n y asunci¨®n de funciones de los m¨¢s destacados miembros del partido, ahora controlado por Hua Kuo-feng, y con una lucha interna sin resolver .