La c¨¢tedra de don Luciano de la Calzada
En ese diario de su direcci¨®n, correspondiente al d¨ªa, 21 de agosto ¨²ltimo, se publica una entrevista con el se?or L¨®pez Aranguren, al que se atribuyen (p¨¢gina 15, tercera columna), las siguientes palabras:?El instructor del expediente, el profesor De la Calzada, mal llamado profesor, que nunca debi¨® serlo, ya que su acceso a la c¨¢tedra fue una conquista m¨¢s bien b¨¦lica...?
Como estas palabras suponen una grave ofensa al la memoria de mi esposo, hoy fallecido (circunstancia que no ignora el se?or L¨®pez Aranguren), en mi propio nombre y en el de mi hija Mar¨ªa Rita de la Calzada Navarro, debo significarle que don Luciano de la Calzada obtuvo su c¨¢tedra tras unas re?idas oposiciones que, convocadas en el a?o 1941, se celebraron entre los meses de enero a mayo, ambos,inclusive, de 1942, ante un tribunal presidido por don Antonio de la Torre y del Cerro, catedr¨¢tico de Historia Media de Espa?a, de la Facultad de Filosof¨ªa y Letras de la Universidad Central, actuando como vocales los catedr¨¢ticos don Cayetano Alc¨¢zar, don Ciriaco P¨¦rez Bustamante, ambos asimismo de la Universidad Central, y el se?or Valls Taberner, este ¨²ltimo de la Universidad de Barcelona.
Las oposiciones se convocaron para cubrir dos c¨¢tedras vacantes y a ellas concurrieron, aparte de don Luciano de la Calzada, don Antonio Rumeu de Armas (queurribi¨¦n obtuvo plaza), do?a Angeles Maci¨¢ de Ros, don.Alfredo S¨¢nchez Bella, don Alfonso Gamir Sandoval y don Pablo Alvarez Rubiano. Los nombramientos de los se?ores De la Calzada y Rumeu de Armas se efectu¨® por O.,M. de 28 de mayo de 1942. (Bolet¨ªn Oficial del Estado de 12 de julio).
No hubo, pues, tal ?conquista b¨¦lica?, sino una limpia y re?ida oposici¨®n en la que, por supuesto, don Luciano de la Calzada no tuvo que falsificar certificado alguno para poder tomar parte en las mismas.
viuda de la Calzada
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