Contra una ley antifeminista y discriminatoria
Se habla mucho de democracia, de reforma. En esta Espa?a nuestra, se pretende ponerse al d¨ªa en estas cosas, hay un amplio sector su poblaci¨®n que exige una justicia que durante siglos le ha sido negada. La mujer se ha cansado de permanecer relegada a ese sagrado recinto del hogar, mientras los hombres hac¨ªan y deshac¨ªan la pol¨ªtica a su antojo y conveniencia, promulgando leyes en las que sus compa?eras sal¨ªan siempre perjudicadas. ?Con qu¨¦ derecho se puede juzgara a la mitad de la poblaci¨®n -espa?ola en este caso- de forma discriminada solamente en raz¨®n a su sexo?Estupor e indignaci¨®n suscita la sentencia solicitada para la esposa aragonesa acusada de adulterio por hacer un viaje a Canarias con otro que no era su marido. Habr¨ªa preguntarle a este marido si durante todo su matrimonio su conducta ha sido tan intachable como pretende exigirle a su esposa. Pero naturalmente, la ley es mucho m¨¢s comprensiva y ben¨¦vola a la hora de juzgar la conducta sexual de un hombre. Lo que en ¨¦ste se considera como ?peque?as debilidades sin importancia?, que contribuyen incluso a realzar su prestigio varonil, en el caso de una mujer es pecado mortal y un delito. Por lo visto, ante la tentaci¨®n -algo otra parte tan humano que no distingue entre biolog¨ªas -, el llamado "sexo d¨¦bil" ha de demostrar una mayor fortaleza.
No se trata de sentimientos feministas, sino de justicia. A igual delito, igual aplicaci¨®n de la ley, sin discriminaciones sexistas. Por eso nos adherimos a la protesta elevada a los medios judiciales por la Asociaci¨®n Democr¨¢tica de Mujeres Aragonesas. En este caso particular, la denuncia del marido nos parece un oportunismo ante una ley que le favorece por ser hombre. Una ley que hay que revisar y actualizar, entre otras muchas, para que el proceso democr¨¢tico de Espa?a alcance a ese 50 por 100 de su poblaci¨®n que ya no soporta m¨¢s la marginaci¨®n en algo que le corresponde tan directamente y con tanto derecho como al otro 50 por 100.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.