Oportunidades para Telef¨®nica
El cambio de presidente de la principal ¡®teleco¡¯ espa?ola ser¨¢ juzgado por sus resultados en un entorno internacional hostil

El cambio de presidencia en Telef¨®nica, ejecutado de manera repentina este s¨¢bado, brinda a la compa?¨ªa de bandera espa?ola una triple oportunidad: para la mejora de sus resultados financieros y su valor en el mercado; para adaptarse a los cambios en su accionariado, m¨¢s internacionalizado tras la entrada del grupo p¨²blico saud¨ª, y para competir en un mercado europeo crecientemente complejo y, en algunos aspectos, adverso.
La inminencia del relevo en la presidencia de Telef¨®nica para primavera era casi un secreto a voces. Su principal accionista, la sociedad p¨²blica SEPI (que posee un 10% del capital), se ha limitado a adelantarlo. Y, obviamente, a ejecutarlo aceleradamente un s¨¢bado ¡ªd¨ªa de cierre del mercado¡ª para evitar distorsiones burs¨¢tiles y operaciones en la sombra perjudiciales. El nuevo presidente, Marc Murtra, ejerce ya desde este s¨¢bado.
El cambio era necesario. El presidente cesante, Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez-Pallete, hered¨® de su predecesor, C¨¦sar Alierta, un expansionismo trepidante de grandes resultados, pero de problem¨¢tico futuro. ?lvarez-Pallete corrigi¨® esa estrategia seguramente de manera excesiva, a tenor de los resultados. Las telecos europeas atraviesan una coyuntura dif¨ªcil, con descensos de precios y de facturaci¨®n, y la entrada de operadores low cost y de peque?os competidores. Pero algunos la han afrontado mejor y otros peor. En el mandato de ?lvarez-Pallete (abril de 2016 a enero de 2025), Telef¨®nica (40.000 millones de facturaci¨®n en 2023) ha reducido un 57% su valor en Bolsa. Su competidora Deustche Telekom (112.000 millones de euros) lo ha duplicado en el mismo per¨ªodo. La b¨²squeda de un nuevo liderazgo estaba plenamente justificada en t¨¦rminos empresariales.
La decisi¨®n marca un punto de inflexi¨®n en el modelo de intervenci¨®n p¨²blica. Se ha pasado de una mera tenencia patrimonial pasiva a un mayor grado de activismo sobre la gesti¨®n, lo cual entra?a riesgos de exceso de protagonismo arbitrista o de politizaci¨®n de las empresas de relevancia p¨²blica. Por el momento, este caso desvanece la posible inquietud en tanto que la decisi¨®n ha sido compartida por todo el consejo, tanto accionistas p¨²blicos como privados, nacionales y extranjeros. El movimiento en Telef¨®nica indica un cierto retorno a la creaci¨®n de n¨²cleos duros estables de accionistas habilitados para afirmar la autonom¨ªa estrat¨¦gica espa?ola y europea ante operaciones hostiles.
Las acusaciones de ocupaci¨®n abusiva de espacio empresarial desde el sector p¨²blico son de escaso recorrido y responden a sectores que aspiran a privatizar lo que de ¨¦l queda. Marc Murtra pas¨® por la pol¨ªtica de la mano del PSC hace dos d¨¦cadas. Este nombramiento corona una carrera profesional notable tras su gesti¨®n en Indra, favorecida por el desarrollo en defensa. Pero, adem¨¢s, en la presidencia de Indra, tambi¨¦n con participaci¨®n estatal, lo sustituye ?ngel Escribano, consejero delegado de una destacada compa?¨ªa del sector y sin perfil pol¨ªtico.
Los retos de Telef¨®nica tienen mucho que ver con el contexto europeo de intentar mejorar la competitividad y la apuesta por una cadena de fusiones que otorguen a sus protagonistas un tama?o adecuado, como plantea el Informe Draghi. Ah¨ª habr¨¢ que calibrar no solo la rentabilidad individual de cada empresa, sino la capacidad del sector para aumentar la ¡°autonom¨ªa estrat¨¦gica¡± ante la revoluci¨®n digital y de los datos, y las amenazas de la autocracia china y de la nueva tecnoligarqu¨ªa trumpista. Ser¨¢ la gesti¨®n de estas oportunidades de Murtra y Escribano, y no los prejuicios, el baremo para juzgar esta decisi¨®n.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.