Urnas como f¨¢bricas

Las elecciones en la Rep¨²blica Democr¨¢tica Alemana se hicieron el domingo 17 de octubre, pero los resultados se conocieron el 21 de septiembre. Tal como se esperaba, la lista ¨²nica de candidatos presentada por el Frente Nacional obtuvo un triunfo abrumador: 99,86 por 100. Se trata, en verdad, de un resultado realmente abrumador, por muchos conceptos.Los hechos fueron los siguientes: Las elecciones en la RDA se llevaron a cabo quince d¨ªas despu¨¦s que las de la Rep¨²blica Federal de Alemania, que no se, llama democr¨¢tica. Entre el 3 y el 16 de octubre, el Gobierno de Pankow advirti¨® insistentemente a los doce millones de electores de Alemania del Este que deb¨ªan cumplir con su deber democr¨¢tico. A partir de las 7.30 del domingo 17, miles de militantes del Partido Socialista Unificado (comunista), que proporcion¨® los nombres de los candidatos, fueron lanzados a la calle para ayudar a los electores, e incluso para ira buscarlos a sus casas si se quedaban dormidos, tal como lo explic¨® la propia radio de Berl¨ªn Este. Alrededor de 100.000 retratos de los postulantes, presididos por los del se?or Honecker, secretario del partido, observaban las urnas desde lo alto de los edificios y torres de televisi¨®n de todo el pa¨ªs.

Seg¨²n fueron informando las autoridades a medida en que el d¨ªa avanzaba, largos cortejos de ciudadanos, con bandas de m¨²sica al frente, se encaminaron poco a poco, bajo una lluvia inclemente, hacia los recintos electorales.

No hab¨ªa posibilidad de error. El Frente Nacional, formado te¨®ricamente por varios partidos, incluidos el Liberal, el Dem¨®crata Cristiano y otros de car¨¢cter igualmente democr¨¢tico, todos ellos amparados por el Partido Comunista, ya hab¨ªa confirmado la lista de septiembre, y la de los puestos a ocupar en los ¨®rganos de Gobierno, ambas perfectamente coincidentes. Para mayor claridad, el Frente tambi¨¦n hab¨ªa atribuido una mayor¨ªa de tres sobre cuatro al Partido Comunista y a las organizaciones de masas; 591 diputados ten¨ªan que recibir un mandato, y 157 una suplencia. De acuerdo con el mismo principio democr¨¢tico, fueron designados los representantes de las asambleas de distrito. El empleo del cuarto oscuro o de la urna aislada se desaconsej¨® formalmente: en 1971 la lista ¨²nica s¨®lo consigui¨® el 99,85 por 100 de los votos. En esta ocasi¨®n el n¨²mero de alemanes reaccionarios que se las arreglaron para decir que no baj¨® ligeramente, y ello se debi¨® sin duda, a las medidas adoptadas para combatir la claustrofobia democr¨¢tica.

Por lo dem¨¢s, el Gobierno no ahorr¨® esfuerzos por impedir la contaminaci¨®n exterior. Los vopos obligaron a los automovilistas procedentes de la RFA a despegar de sus coches los afiches electorales de Alemania Federal, que muchos, con intenciones aviesas, a¨²n luc¨ªan. Se decidi¨® adem¨¢s no hablar de campa?a electoral en las escuetas noticias oficiales sobre los comicios, sino de campa?a de propaganda. Unas semanas antes de las elecciones, cuando ya se conoc¨ªan los resultados, el Gobierno organiz¨® una campa?a de productividad, a la que hasta fueron invitados los cosmonautas sovi¨¦ticos Bykovski y Axionov. De esta manera se unieron, con perfecta objetividad, ambos conceptos: urna y f¨¢brica, elecci¨®n y fabricaci¨®n.