Funcionarios sindicales

Hasta nosotros han llegado los ecos de la pol¨¦mica entablada acerca del futuro de los funcionarios sindicales, ante la inminente desaparici¨®n de la Organizaci¨®n Sindical como hasta ahora estaba estructurada.Nos referimos m¨¢s en concreto a determinados funcionarios o voces de la Administraci¨®n que han amnifestado su oposici¨®n a la integraci¨®n posible de los funcionarios de la Organizaci¨®n Sindical en sus departamentos respectivos.

Esta postura ha venido avalada por el farisaico pretexto de la categor¨ªa pol¨ªtica de estos funcionarios, y de otro lado por la presunta facilidad qu en su ingreso han tenido dichos funcionarios.

Ante estas posturas, creemos preciso hacer las siguientes puntualizaciones:

1: Que los funcionarios sindicales, como cualquier otro tipo de trabajadores. manuales, t¨¦cnicos o burocr¨¢ticos, realizan una funci¨®n totalmente al margen de pol¨ªticas espec¨ªficas, que se cuecen a m¨¢s altos niveles que el de simples t¨¦cnicos o bur¨®cratas.

2. En todo caso, todos los funcionarios al servicio de la Administraci¨®n del Estado en todas sus vertientes, podr¨ªan sentirse implicados en la creaci¨®n, gesti¨®n y ejecuci¨®n de la pol¨ªtica general seguida en las ¨²ltimas d¨¦cadas.

3. Respecto al punto que se argumenta, de que la cesi¨®n ser¨ªa por finalizaci¨®n de funciones o clausura de la Organizaci¨®n Sindical, es problema que ya se ha planteado (recuerde Planificaci¨®n del Desarrollo ... ), y podr¨¢n plantearse en el futuro, porque no creemos que ning¨²n organismo ministerial tenga asegurada su continuidad. Las reorganizaciones administrativas se efect¨²an en todos los pa¨ªses, y en el nuestro muchos especialistas la consideran imprescindible, e inminente.

4. La otra raz¨®n aducida, es el modo de captaci¨®n de que han sido objeto los funcionarios sindicales, a cuyo respecto dos cosas son precisas decir:

a) Este m¨¦todo no ha sido general, sino que se ha aplicado en unas ocasiones, pero no en todas.

b) No creemos que ning¨²n organismo dependiente del Estado pueda tirar la primera piedra, pues todos sabemos que estos m¨¦todos han sido pr¨¢ctica frecuente de nuestra Administraci¨®n.

5. Por ¨²ltimo, a?adir que adem¨¢s de todas las servidumbres que como funcionarios p¨²blicos han tenido los servidores de la Organizaci¨®n Sindical, en ocasiones han tenido que representar el papel de comparsas, sin gozar de la consideraci¨®n efectiva que obtentan los funcionarios de la Administraci¨®n del Estado. Es decir, que aunque legalmente los funcionarios sindicales no han sido funcionarios p¨²blicos, de hecho, y como servidores de una corporaci¨®n de derecho p¨²blico, s¨ª lo han sido.

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