La Universidad desquiciada

Soy madre de familia numerosa, que, por desgracia, me est¨¢ tocando sufrir cada d¨ªa m¨¢s las consecuencias de lo que yo creo es una pol¨ªtica de direcci¨®n universitaria catastr¨®fica, pues, no hay otra explicaci¨®n ante lo que estamos observando con perplejidad los padres de estudiantes, y ¨¦stos, a los que est¨¢n llevando desconcertados y desmoralizados.Me explico: Entre mis numerosos hijos, tengo uno excepcional estudiante, que cursa tercer a?o de Ciencias Econ¨®micas y Empresariales, en la Universidad Complutense (Somosaguas).

Por nuestra parte, han sido cumplidas en sus fechas todas las normas y exigencias que se nos han impuesto de inscripci¨®n, pago de las altas tasas acad¨¦micas, inventadas este a?o, fotograf¨ªas sextuplicadas, carnets, impresos, etc¨¦tera.

El curso se declar¨® inaugurado en la Complutense el pasado octubre y ha transcurrido m¨¢s de un mes y en la facultad de Econ¨®micas de Somosaguas no empiezan las clases, ni se sabe cuando ser¨¢ ello, aburriendo y desmoralizando a las estudiantes que quieren cumplir su cometido: estudiar, con largas y evasivas, dici¨¦ndoles que no hay presupuesto o dinero para el pago de los sueldos de los profesores...

La realidad es que Espa?a no se encuentra en condiciones de que toda una flamante Universidad, con su potencial de catedr¨¢ticos, profesores y alumnado, siga inactiva, cruzada de brazos, y sin dar, ni recibir, el esfuerzo que la Patria exige, y el ciudadano tiene derecho a que se le forme sin tantas vicisitudes, imprevisiones y sobresaltos como se le est¨¢n dando a la juventud, lo que crea un trauma social de imprevisibles consecuencias.

?Es que al rector de la Universidad, al decano, a su claustro, a la Direcci¨®n General de Universidades e, incluso al ministro de Educaci¨®n y Ciencia les tiene sin cuidado que la facultad que ha de formar a los futuros economistas de este pa¨ªs lleve dos meses sin cumplir su cometido por las buenas? ?Puede Espa?a y sus contribuyentes, autoridades, etc¨¦tera, dar como normal esto y consentir sin causa justificada la p¨¦rdida de este potencial de horas de producci¨®n intelectual perdidas? ?Es que no hay responsabilidades aqu¨ª para nadie?

Por toda excusa, la de que no hay presupuesto para los profesores... ?Es que no ha habido tiempo-desde junio de apercibirse de ello? ?Y las tasas que nos han cobrado, qu¨¦ ha sido de ellas?

As¨ª las cosas, esta madre de familia numerosa ruega pueda dar un toque de atenci¨®n a quien corresponda y a la opini¨®n p¨²blica, pues las madres s¨ª valoramos el tiempo que hacen perder a nuestros hijos estas actuaciones dimanadas de las autoridades de la Universidad, que resultan inconcebibles y tan nocivas para el futuro de Espa?a.