Conflicto pol¨ªtico-sindical por el desalojo del "Parisien Liber¨¦"

Hoy, como ayer, tampoco aparecer¨¢n los diarios franceses. Seg¨²n el resultado de la reuni¨®n que hoy por la ma?ana efectuar¨¢ la Federaci¨®n Francesa de Trabajadores de Imprenta (linotipistas), la huelga seguir¨¢ o no durante los pr¨®ximos d¨ªas. El motivo de este movimiento, que alcanza pr¨¢cticamente a toda la prensa escrita francesa. fue la expulsi¨®n, por la polic¨ªa, de los empleados que ocupaban desde hace diecinueve meses las antiguas imprentas, del diario de Par¨ªs, Le Parisien Liber¨¦.La justicia hab¨ªa ordenado la evacuaci¨®n hace una semana, pero el Gobierno decidi¨® la intervenci¨®n el domingo, precisamente el d¨ªa en que los medios informativos deb¨ªan dar cuenta del lanzamiento del rassemblement gaullista de Jacques Chirac.

Este incidente de orden pol¨ªtico, ha complicado un contencioso laboral serio, cuyas consecuencias podr¨ªan agravar la fragilidad del Gobierno, muy comprometido ya como consecuencia de la inquietante situaci¨®n econ¨®mica y de la carencia pol¨ªtica que le imputaron los gaullistas resucitados el domingo pasado en el mitin monstruo de la puerta de Versalles.

El conflicto entre los empleados del propietario del Parisien, se?or Amaury (en el desfile del 14 de julio aparec¨ªa en la tribuna oficial, al lado de Giscard y de Poniatowski, ministro del Interior),es el resultado de una confrontaci¨®n inexorable entre un patrono de prensa considerado intransigente y los obreros de imprenta, agrupados en un sindicato de tendencia comunista, la CGT, que monopoliza a este sector de la prensa francesa. La ocupaci¨®n de la imprenta se produjo cuando Amaury quiso despedir a cerca de medio millar de obreros. Despu¨¦s, para seguir tirando su peri¨®dico (ultraderechista y populachero, con una tirada que supera los 600.000 ejemplares), Amaury cre¨® nuevas imprentas fuera de Par¨ªs y en provincias, con empleados que no pertenecen a la CGT.

Las manifestaciones en se?al de protesta, a la vista de lo ocurrido ayer, sobrepasan las previsiones.

Los asistentes se cifraron en muchos millares de personas.