El voto de los emigrantes

Unas horas despu¨¦s de que se publicase mi art¨ªculo El censo inflexible, el ministro de Asuntos Exteriores, cuya rapidez de reflejos pol¨ªticos tuve buena ocasi¨®n de conocer de cerca durante la a?orada etapa Cabanillas al frente del Ministerio de Informaci¨®n, me hace el honor de enviarme un comentario cuyas l¨ªneas informativas creo un deber reproducir ¨ªntegramente. Se refiere el ministro a las ?imprevisiones y rutinas en el servicio exterior para instrumentar el voto del residente en el extranjero en el reci¨¦n celebrado refer¨¦ndum?."El prop¨®sito de la Corona y del Gobierno -dice el ministro- de ampliar la pasada consulta a los emigrantes y nacionales fuera de las fronteras fue firme desde un principio, pero no hab¨ªa precedente. Ni en la ley de 1907, ni en las convocatorias electorales del 31 y el 36 ni en los referenda anteriores se hab¨ªa contemplado esta posibilidad. El derecho comparado tampoco ayudaba. Punto de arranque para la innovaci¨®n fue aquella ley electoral de 1907 que establece la obligaci¨®n de estar censado para ejercitar el derecho al voto, principio que iba a recoger el art¨ªculo 22 del decret¨® de convocatoria. El tiempo no daba margen a grandes modificaciones."

?El procedimiento -contin¨²a el se?or Oreja- cumpli¨® su cometido. M¨¢s importante de lo que pudieran hacer creer las apariencias. A Correos y en valijas especiales se remitieron m¨¢s de 300.000 votos recibidos del exterior. Hay que a?adirles los enviados por los interesados directamente a las Juntas Municipales -era otra opci¨®n, los rendidos por aquellos acogidos a los beneficios de Iberia y los de los tripulantes de buques espa?oles surtos en puertos extranjeros. Cuando se establezcan las cifras definitivas es seguro, pese a las fallas que atinadamente se?alan, que el voto del expatriado espa?ol fue superior relativa y absolutamente al del portugu¨¦s o al del italiano, por darte ejemplos pr¨®ximos.?

El ¨²ltimo p¨¢rrafo de la carta del ministro resulta, como noticia y revelaci¨®n de prop¨®sitos, especialmente importante:

?No te falta raz¨®n cuando insistes en las correcciones normativas y de procedimiento cara a las elecciones pr¨®ximas. Es preocupaci¨®n constante de todos mis colegas de Gabinete y, claro que tambi¨¦n la m¨ªa. Somos, sin embargo, conscientes de que el criterio de igualdad de oportunidades y el de uniformidad chocan con muchas cortapisas para lograr su validez universal. En ello estamos.?

Ante una actitud informativa tan correcta. y tan abierta no me parece procedente dedicar m¨¢s puntualizaciones ni comentarios a una carta que habla por s¨ª misma; y que es, por s¨ª misma, noticia. Hace bien el ministro de Asuntos Exteriores en se?alar la originalidad de la participaci¨®n de quienes, con raz¨®n, ¨¦l llam¨¢ expatriados. La cifra de votantes es, por supuesto, alentadora, pero todos, Gobierno y sociedad, estamos interesados vitalmente en que para las pr¨®ximas elecciones esa cifra se aproxime mucho m¨¢s a la inmensa realidad personal y colectiva de nuestra emigraci¨®n. Me atrevo a interpretar la actitud del ministro como una promesa, en la que desde ahora creo y conf¨ªo.