Pedro Ruiz: "Hay que quitar importancia a todo"
Presenta en Madrid sus "Historias de un Ruiz-se?or"
?No me he propuesto m¨¢s que entretener y romper las apariencias de muchas cosas. Cargarme, en una palabra, tanto decorado como tenemos y hemos tenido en esta Espa?a nuestra. Cargarme tantas apariencias en una sociedad donde era, y es mucho m¨¢s importante aparentar ser algo, que serlo realmente. Los ministros fueron siempre demasiado ministros, como los curas fueron demasiado curas...?, as¨ª comienza su conversaci¨®n Pedro Ruiz, de quien debe hacerse referencia obligatoria en torno a la televisi¨®n. Pedro Ruiz fue durante mucho tiempo el moviolero mayor de la Televisi¨®n, el hombre de Estudio Estadio, el hombre de los deportes, el hombre que despu¨¦s pas¨® por un concurso fugaz, el hombre que hoy, tras todo aquello. se presenta en el teatro F¨ªgaro de Madrid, a pecho descubierto, con un espect¨¢culo de humor, con un espect¨¢culo de cr¨ªtica, con un espect¨¢culo... ?De qu¨¦, Pedro?-De cr¨ªtica, s¨ª, de una sociedad hip¨®crita, vac¨ªa, y de co?a, en una palabra. Es posible que hubiera otro camino para decir todo esto y no solamente: el del humor; pero no s¨¦ de momento decirlo de otra forma. Nadie me ense?¨®. Y lo que s¨¦, lo he aprendido a base de tortazos. Hay inquietud, es verdad, yo siento inquietud por decir cosas y por decirlas de la mejor manera posible; pero el hecho de que haya inquietud no significa forzosamente que tenga que haber capacidad. No s¨¦, yo creo que estoy en el camino, y esta es mi dedicaci¨®n.
Pedro Ruiz, ocho veces por semana, alza el tel¨®n con un espect¨¢culo que provoca carcajadas y que deja en el est¨®mago un regusto amargo. Quiz¨¢ el de la cr¨ªtica. Quiz¨¢ el de la triste realidad vista y vivida all¨ª, porque ese espect¨¢culo es como si la Espa?a de charanga y pandereta pasara por el escenario, y fuera de pronto, con humildad y con certeza, aguijoneada por el realismo. Luego, tambi¨¦n con humildad, Pedro Ruiz comenta:
-Es que el humor es una aut¨¦ntica necesidad para Espa?a. Espa?a es un pa¨ªs excesivamente dramatizado.
-Parece que hay un pesimismo, extra?o en el humorista.
-No, no, no. No es pesismismo, es realismo, de verdad. En el fondo, en la vida somos as¨ª, vamos cre¨¢ndonos ilusiones bastante tontas, que nunca se cumplen. Es como si fu¨¦ramos corriendo cortinas y m¨¢s cortinas y detr¨¢s de cada una encontr¨¢ramos otra, persiguiendo una estupidez que se llama felicidad y que realmente no existe, salvo en contad¨ªsimas ocasiones. Quiz¨¢ es que la vida es un fraude y que todos somos una mierdecilla.
Como lema, Pedro Ruiz declara ,que ?no quiere arremeter contra nada, sino quitarle importancia a todo?. Y a rengl¨®n seguido se le ve imitando a los pol¨ªticos de hoy.
-Es que hasta ahora los pol¨ªticos ten¨ªan inmunidad imitativa en injusto recargo de las folkl¨®ricas. Los dos, pol¨ªticos y folkl¨®ricas, tienen una actividad p¨²blica y cada pa?ol debe aguantar su vela. Que baste decir que por primera vez en cuarenta a?os se imita p¨²blicamente al presidente de Gobierno.
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