Francisco Sa Carneiro: "Portugal, entre la bancarrota y el desarrollo paulatino"

EL PAIS. Desde hace meses se viene hablando de una intensificaci¨®n de las relaciones, hispano-portuguesas. ?Cree usted en ello? ?Puede hablarse de un replanteamiento de la vida pol¨ªtica peninsular?Sa Carneiro. Hasta el momento no ha habido una aut¨¦ntica cooperaci¨®n peninsular, hay que reconocerlo. Despu¨¦s del 25 de abril de 1974 las relaciones entre ambos pa¨ªses se deterioraron paulatinamente, sobre todo tras el asalto e incendio de la embajada espa?ola en Lisboa. Pero existen perspectivas razonables de que ¨¦stas relaciones mejoren y se intensifiquen en el futuro. En primer lugar, por conveniencia mutua. Espa?a sigue su camino hacia la democratizaci¨®n; Portugal ha terminado recientemente la institucionalizaci¨®n de sus ¨®rganos democr¨¢ticos y debe ahora estabilizar su vida pol¨ªtica. Ambas experiencias son complementarias y servir¨¢n para estabilizar la vida pol¨ªtica de ambas. Por otra parte, los campos de cooperaci¨®n son enormes, aunque antes de nada conviene tener ideas claras sobre los objetivos que se desea alcanzar.

Una estrategia ib¨¦rica com¨²n

EL PAIS. ?Considera viable una estrategia com¨²n ib¨¦rica, en relaci¨®n con ciertos temas fundamentales?

Sa Carneiro. Espa?a y Portugal pueden cooperar juntos, al igual que han hecho los pa¨ªses escandinavos. Pero antes debe ponerse en marcha, por ambos lados, una pol¨ªtica m¨¢s imaginativa y realista. Nuestros dos pa¨ªses pueden establecer una estrategia com¨²n para temas tan importantes como la Comunidad Econ¨®mica Europea o la OTAN.

EL PAIS. Existen todav¨ªa ciertos contenciosos que no han sido resueltos y que impiden el desarrollo pleno de estas relaciones...

Sa Carneiro. Hay, en efecto, problemas pendientes. Las indemnizaciones a ciudadanos espa?oles expropiados durante los dos ¨²ltimos a?os, por ejemplo. O la indemnizaci¨®n al Estado espa?ol por la destrucci¨®n de la embajada, que va por buen camino. El Gobierno minoritario de Mario Soares ha querido dar prioridad a las indemnizaciones de extranjeros. Se trata, desde luego, de una pol¨ªtica discutible, pero que una vez definida debe ser cumplida hasta sus ¨²ltimas consecuencias, entre otras razones, porque es el ¨²nico modo de tranquilizar a los inversores. Los intercambios comerciales, t¨¦cnicos, financieros y culturales entre Espa?a y Portugal deben ir precedidos de ciertas medidas. Por ejemplo, no comprendo muy bien c¨®mo se pretende que entre nuestros dos pueblos haya lazos duraderos y estables si hasta ahora no existe una libre circulaci¨®n de personas y bienes a trav¨¦s de las fronteras. Por eso hablaba antes de que es necesario delimitar antes de nada una pol¨ªtica de objetivos claros a los que se desea, de verdad, llegar. Hasta ahora, yo creo que por parte de los dos gobiernos hubo buenas intenciones, que no lograban sustituir a los insignificantes resultados. Yo pienso, sin embargo, que los problemas pendientes deben resolverse no s¨®lo a nivel de Estado, sino tambi¨¦n a nivel de partido pol¨ªtico.

EL PAIS. A ra¨ªz del anuncio de su viaje a Espa?a se habl¨®, incluso, de una plataforma socialdem¨®crata ib¨¦rica.

Sa Carneiro. Existen posibilidades de crear algo parecido. Creo que en la Pen¨ªnsula, la socialdemocracia tiene grandes posibilidades, al contrario de los partidos socialistas marxistas. Por supuesto, no creo en el llamado socialismo mediterr¨¢neo, ni en los programas comunes con los comunistas. Al menos en Portugal, donde el Partido Comunista no es dem¨®crata...

Nosotros creemos en una aproximaci¨®n realista con nuestros compa?eros espa?oles, basada en la estabilidad de la democracia. La similitud de situaciones hist¨®ricas entre los dos pa¨ªses (ya que no de situaci¨®n econ¨®mica y social) abona esta posibilidad. Por lo dem¨¢s, los socialdem¨®cratas tenemos una vocaci¨®n peninsular primero, europea despu¨¦s y universal, por ¨²ltimo.

EL PAIS. Sus contactos con los socialdem¨®cratas espa?oles ?se reducen a la Federaci¨®n?

Sa Carneiro. En Madrid, s¨ª, en tanto que la Federaci¨®n engloba a casi toda la familia socialdem¨®crata adem¨¢s de los partidos de este signo de car¨¢cter regional. En Barcelona mantendremos contactos con los socialdem¨®cratas de Jaume Casanova. Consideramos que la Federaci¨®n Social Dem¨®crata es el germen de una gran fuerza pol¨ªtica que en el futuro puede ser decisiva dentro del panorama pol¨ªtico espa?ol.

La socialdemocracia, en alza

EL PAIS. ?En qu¨¦ situaci¨®n se encuentra ahora el Partido Social Dem¨®crata Portugu¨¦s?

Sa Carneiro. Despu¨¦s de1as elecciones municipales, el partido sigue creciendo y consolid¨¢ndose. Las elecciones demostraron la importancia de la opci¨®n socialdem¨®crata en Portugal. En estos momentos, por ejemplo, controlamos m¨¢s c¨¢maras municipales que el Partido Socialista que, seg¨²n parece, es el primer partido del pa¨ªs. Pero este ¨¦xito espectacular resulta dif¨ªcil de perdonar por algunos. S¨®lo as¨ª se explican ciertos comentarios malintencionados y radicalmente falsos de que preparamos con ?militares de derechas? una acci¨®n ?no democr¨¢tica?. O que hay graves escisiones en nuestras filas.

EL PAIS. ?A qui¨¦n responsabiliza de estas acusaciones?

Sa Carneiro. Como dije, la reaparici¨®n con fuerza renovada de nuestro partido en las municipales no les gust¨® a algunos. Los ?gon?alvistas? nos acusaron ya en su ¨¦poca de golpismo. Ahora quienes eso dicen son la extrema izquierda y otros compa?eros de viaje antidem¨®cratas. En cuanto a la escisiones son siempre miembros de otros partidos quienes las anuncian. La verdad es que nuestro partido est¨¢ cada vez m¨¢s unido, es cada d¨ªa m¨¢s fuerte, y s¨®lo cree en una alternativa democr¨¢tica que d¨¦ la voz a las grandes mayor¨ªas nacionales.

EL PAIS. Seg¨²n eso, el Gobierno socialista de Mario Soares no representar¨ªa a todo el pa¨ªs...

Sa Carneiro. Exacto. El Gobierno de Soares es minoritario, y representa s¨®lo al tercio del pa¨ªs.

EL PAIS. ?No podr¨¢, entonces salir adelante?

Sa Carneiro. Hemos dicho muchas veces, y lo repito ahora, que no tenemos confianza en el Gobierno de Soares. Este Gobierno no tiene el apoyo de la mayor¨ªa de los portugueses y, por tanto, mal podr¨ªa resolver los grav¨ªsimos problemas que enfrenta ahora mi pa¨ªs. Portugal est¨¢ al borde de la bancarrota y en ella caer¨¢ si no se toman decisiones urgentes y prudentes. El Gobierno socialista ha demostrado en estos meses que es incapaz de proponer y llevar a t¨¦rmino una pol¨ªtica coherente. Los portugueses sufren un grave des¨¢nimo, una falta de perspectivas que a, la larga puede ser fatal. Al pa¨ªs se le ofrecen ahora dos caminos: o el caos econ¨®mico y social, o un desarrollo paulatino, apoyado internacionalmente. Este desarrollo no puede ser promovido ya por un Gobierno minoritario y por un partido en el que se dan grav¨ªsimas contradicciones entre su programa de Gobierno y su programa ideol¨®gico.

Hacia un acuerdo nacional

EL PAIS. ?Propone usted, entonces, un Gobierno de coalici¨®n con otros partidos de la derecha y el centro?

Sa Carneiro. No se trata solamente de formar un Gobierno de coalici¨®n, sino de, impulsar un acuerdo nacional entre todos los partidos democr¨¢ticos que pueda abrir nuevas perspectivas.

EL PAIS. ?Incluido el Partido Comunista?

Sa Carneiro. Ya dije antes que el Partido Comunista Portugu¨¦s no es un partido democr¨¢tico, que no ha jugado nunca el juego democr¨¢tico, y que por tanto mal podr¨ªa integrarlo entre los grupos democr¨¢ticos. Pero los comunistas existen como fuerza pol¨ªtica y por eso hay que tenerlos en cuenta. No se puede esperar de los comunistas una cooperaci¨®n democr¨¢tica.

EL PAIS. Hay quien habla tambi¨¦n de un nuevo Gobierno militar como salida al actual impasse. ?Cu¨¢l es su opini¨®n?

Sa Carneiro. Nuestra opini¨®n la hemos expuesto tambi¨¦n en muchas ocasiones. No queremos m¨¢s militares en el Gobierno. Los militares deben estar en los cuarteles y no intervenir en la pol¨ªtica coyuntural del pa¨ªs. La experiencia de estos dos ¨²ltimos a?os es significativa, y cuando nosotros propusimos la neutralidad de los militares, aparte de los ataques de ciertos. partidos, sufrimos la incomprensi¨®n, de algunos oficiales. Ahora han variado de opini¨®n, tras varios meses dif¨ªciles de poder.

EL PAIS. ?Cu¨¢les son, a su entender, los errores m¨¢s graves cometidos. por el Partido Socialista desde el Gobierno?

Sa Carneiro. Adem¨¢s de que ha sido incapaz de desarrollar un programa econ¨®mico arm¨®nico, que evitase, al pa¨ªs los traumas de la crisis, ha sectorizado la vida nacional, imponiendo a sus hombres de confianza en los puestos claves, y escogi¨¦ndolos no por su capacidad, sino por su adhesi¨®n. En el pa¨ªs est¨¢ aumentando espectacularmente lo que yo califico de sector clandestino, es decir, un sector econ¨®mico que se basa en la realizaci¨®n de operaciones (financieras, profesionales, etc¨¦tera) ?legales, seg¨²n la legislaci¨®n ahora vigente. De lo que se trata en estos momentos es de superar la situaci¨®n actual entre todos, dejando a un lado los intereses partidistas e inventando una aut¨¦ntica pol¨ªtica nacional que sea el reflejo de lo que quieren la gran mayor¨ªa de los portugueses.