Al Espa?ol le sienta mal el catalanismo de Vil¨¢ Reyes

Juan Vil¨¢ Reyes, el m¨¢s famoso de los presidentes de club de f¨²tbol que en el mundo han sido, el ¨²nico que ha merecido honores de editoriales extranjeras, ha sido contestado incluso en su propio campo. El domingo en Sarri¨¢, unas octavillas, editadas por la m¨¢s recalcitrante derecha espa?olista, ped¨ªan que Vil¨¢ Reyes saliera al centro del campo a pedir perd¨®n p¨²blicamente. El ex presidente espa?olista, el hombre de Matesa, en una muestra de agresividad comercial deportiva, habla dicho que el Espa?ol deb¨ªa cambiar su nombre por el de Real Club Deportivo Catalu?a. La sugerencia de Vil¨¢ Reyes est¨¢ basada en la necesidad de que la entidad se incardine m¨¢s en la vida catalana.

Sent¨® a cuerno quemado que Vil¨¢ Reyes pidiera m¨¢s catalanismo para el Espa?ol. Vil¨¢ Reyes es por lo visto hombre que cree en la Posibilidad de algunos cambios, pero con su club se ha equivocado. Los espa?olistas est¨¢n donde estaban y no parece que tengan deseos y de cambiar de imagen. Vil¨¢ Reyes, quiz¨¢ inconscientemente, comienza a acercarse al Barcelona, pero de ello s¨®lo se, alegrar¨¢n los amigos de Montal. Pujol y Carrasco. Adem¨¢s los espa?olistas no le perdonar¨¢n nunca a Vil¨¢ Reyes, que, a consecuencia del asunto Matesa, el club tuviera que vender a su gran estrella, Marcial al Barcelona. El Ba?a con el fichaje de Marcial, adem¨¢s de un buen negocio, lo que hizo fue. echarle una mano al Espa?ol para que no se declarara en quiebra total. Lo de Marcial fue un trauma que a¨²n no han superado los periquitos.Los espa?olistas de las octavillas, miren por d¨®nde, van a convertir a Vil¨¢ Reyes en una especie de nuevo rojo, que es una postura en la que no suelen caer los viejos ricos. A lo mejor resulta que si Vil¨¢ Reyes se acerca ahora por el Camp Nou, recibe hasta una ovaci¨®n.

La Jornada de Liga se abri¨® e s¨¢bado con un buen augurio para los equipos de Madrid, ya que el Barcelona fu e derrotado en Las Palmas. Pero no hubo esta vez ocasi¨®n para pensar en- maniobras centralistas, porque el Madrid fue humillado en su propio terreno por el Salamanca y el Atl¨¦tico no supo ganar en M¨¢laga.

Aunque la Real Sociedad jug¨® en casa victoriosamente, el tema de la ikurri?a se traslad¨® esta vez a Santander, en donde estuvo presente el Athletic de Bilbao. Antes del inicio del encuentro y durante una especie de festivai folkl¨®rico que se produjo en el c¨¦sped, tres ?hinchas? pasearon una ikurri?a por el terreno. No llegaron a dar la vuelta completa al campo porque al parecer, un inspector de polic¨ªa se la arrebat¨® y la entreg¨® a un miembro de la Polic¨ªa Armada.

La ikurri?a fue aplaudida en alg¨²n sector de los grader¨ªos, pero en la tribuna encontr¨® repulsa Curiosamente el campo del R¨¢cing ha sido en los ¨²ltimos a?os escenario de las m¨¢s inesperadas situaciones. En septiembre de 1975, dos jugadores racinguistas salieron a terreno de juego con brazaletes negros. Esta vez se supone que los protagonistas de la tarde fueron ?hinchas? vizca¨ªnos. Uno de ellos, a parecer, fue agredido por un espectador. Seg¨²n todos los ind¨ªcios el tema no produjo detenciones de ning¨²n tipo.

Como el Madrid ha vuelto a la andadas la cosa parece clarificada A este paso no juega el a?o, que viene ni la Copa de la UEFA.

Y lo malo es que el entrenado del Salamanca confes¨® al final de encuentro que al Madrid. se le est¨¢ perdiendo el respeto. Y eso.s¨ª que no. Los madridistas son capaces de aguantar cualquier cosa, pero que se les pierda el respeto no entra en sus c¨¢lculos. Si la democracia ha de servir para esto, m¨¢s vale lo otro.