Una pol¨ªtica exterior m¨¢s moral
El Departamento de Estado de EEUU recrimin¨® p¨²blicamente a Checoslovaquia la semana pasada por no respetar los acuerdos sobre derechos humanos f¨ªrmados en Heisinki en 1975. Alud¨ªan, concretamente, a la campa?a emprendida contra los trescientos firmantes de la Carta 77 en demanda de ciertas reformas internas. Al d¨ªa siguiente se volvi¨® a producir por parte del Departamento de Estado otro toque de atenci¨®n, esta vez dirigido a la Uni¨®n Sovi¨¦tica, con respecto a la situaci¨®n del m¨¢s conocido disidente con residencia en la URSS, Andrey Sakharrov, f¨ªsico nuclear y premio Nobel de la Paz en 1975.(...) Los rusos son especialmente sensibles a todo lo que pueda ser considerado como una ingerencia occ¨ªdental en sus asuntos internos Sin tener que remontarse demasiado lejos, el mes pasado Brejnev dej¨® muy claro en uno de sus discursos que cualquier intento exterior para Influir en la pol¨ªtica interior rusa ser¨ªa in¨²til. Existe, sin embargo, en EEUU un deseo nuevo y muy fuerte de una pol¨ªtica exterior rn¨¢s ?moral?, de acuerdo con lo prometido por Carter en su campa?a. El aviso sobre Sakharov ,podr¨ªa haber sido accidental, pero parece ser que la Administraci¨®n midi¨® muy bien su iniciativa en lo que respecta a Checoslovaquia: fue un mensaje lanzado tanto a Mosc¨² como al p¨²blico de los EE UU para dejar claro que, aunque Carter est¨¢ muy interesado en el progreso de las conversaciones SALT, no les va a sacriflicar otros objetivo ni convicciones.
El resultado. intencionado o no podr¨ªa ser que una cierta postura de inflexibilidad de Carter con respecto a Mosc¨² le protegiera eventualmente contra la derecha aniericana en el caso de. en las futuras, conversaciones SALT.ser tachado en alu, (in momento de hacer concesiories innecesarias a los sovi¨¦tico Nueva York, 7 febrero
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