Oriol y Villaescusa, rescatados por la polic¨ªa

Antonio Mar¨ªa de Oriol y el teniente general Villaescusa fueron rescatados ayer tarde por la polic¨ªa, como final de una operaci¨®n que concluy¨® con ¨¦xito, sin necesidad de que se disparase ni un s¨®lo tiro, a excepci¨®n de uno que se produjo involuntariamente momentos antes de que la polic¨ªa liberase al se?or Oriol.A trav¨¦s de la informaci¨®n facilitada anoche por el ministro de la Gobernaci¨®n, Rodolfo Mart¨ªn Villa, y algunos de los inspectores del Cuerpo General de Polic¨ªa que participaron en los respectivos rescates, se ha podido reconstruir el modo como fueron llevados a cabo, que en los primeros momentos aparec¨ªa confuso.

El rescate del teniente general Villaescusa se produjo hacia las dos y diez de la tarde. Varios inspectores se dirigieron al piso bajo -del n¨²mero 8 de la calle Sierra de Alcubierre, en Alcorc¨®n, y llamaron al timbre. Les abri¨® Abelardo Collazo -presuntamente implicado en el reciente atentado contra varios guardias civiles-, quien cay¨® hacia atr¨¢s y fue r¨¢pidamente detenido. El teniente general Villaescusa no crey¨®, en un primer momento -a causa del aspecto desali?ado con que se presentaron los polic¨ªas- que se tratara de sus libertadores. Muy cerca de Collazo se encontr¨® una metralleta.

El rescate del se?or Oriol se produjo hacia las cuatro menos veinte de la tarde en el piso 4? D del n? 33 del bloque 21 de la calle de San Claudio, en la colonia del Sardinero cerca del Pueblo de Vallecas. En este caso abri¨® la puerta una chica de unos veinte a?os, que al intentar cerrar la puerta cogi¨® la mano de uno de los polic¨ªas al que se le dispar¨® el arma. El se?or Oriol, que rog¨® a los polic¨ªas que no hicieran uso de sus armas, abraz¨® al ni?o de once meses, hijo de la joven citada, y dio un beso a ¨¦sta, antes de abandonar el piso. Vigilando al se?or Oriol se encontraba Gil Ara¨²jo, que no portaba armas, aunque se hall¨® en el piso una pistola del 9 largo.

Las operaciones para llegar a este final se han ido produciendo paso a paso, hasta llegar a encontrar a los ¨²ltimos secuestradores. Al parecer, la detenci¨®n de Celdr¨¢n fue decisiva en esta operaci¨®n policial, que ha dirigido con ¨¦xito Roberto Conesa, jefe superior de Polic¨ªa de Valencia.