Oriol: "No me sent¨ª nunca en peligro de muerte"

Despu¨¦s de la rueda de prensa con los familiares del se?or Oriol, y de petici¨®n escrita que los informadores hicieron llegar a ¨¦ste, para que los recibiera en su domicilio, los periodistas pudieron entrar en la finca y ver al presidente del Consejo de Estado.

-?C¨®mo se encuentra f¨ªsicamente?-No me puedo encontrar mejor. El haber perdido la libertad durante 61 d¨ªas es una experiencia inexplicable.

-?C¨®mo le trataron sus secuestradores?

-Muy bien. Me trataban estupendamente. Estaba como si estuviese de hu¨¦sped en una casa rural.

-?Se sinti¨® alguna vez en peligro de muerte?

-Yo, personalmente, no. Pero me preocupaba leer en las primeras p¨¢ginas de los peri¨®dicos que iba a ser ejecutado.

-?C¨®mo se enter¨® del secuestro de Villaescusa?

-Por la prensa, que era por donde me enteraba de todo.

-?Le¨ªa la prensa, o¨ªa la radio o ve¨ªa la televisi¨®n?

-S¨ª. Al principio no ten¨ªa humor para leer, pero despu¨¦s le¨ªa todo.

-?De qu¨¦ hablaba con sus secuestradores?

-De todo. Hemos tenido ocasi¨®n de hablar de muchos temas, pero principalmente de temas doctrinales. Ellos respetaban mis puntos de vista.

-?Qu¨¦ hac¨ªan?

-Jug¨¢bamos a las cartas, al mus, al tute. Sesenta y un d¨ªas dan tiempo para muchas cosas.

-?C¨®mo ha soportado sus dolores artr¨ªticos?

-Bien, he hecho mucho ejercicio. Uno de mis vigilantes se preocupaba mucho de que hiciese gimnasia.

-?Qu¨¦ tal era la comida que le daban sus secuestradores?

-Buena. Tengo la suerte de que como de todo.

- -Ha cambiado algo en usted durante estos d¨ªas?

-Fundamentalmente no he cambiado en nada. He confirmado la extraordinaria importancia de la fe. Una fe intensa es una experiencia inapreciable, sobre todo cuando las obras responden con la fe.