Owen, un interlocutor abierto para la Pen¨ªnsula Ib¨¦rica

El nuevo presidente de los consejos de ministros de la Comunidad Econ¨®mica Europea (CEE), el brit¨¢nico David Owen, llega al Foreign Office de su pa¨ªs con una experiencia notable en los asuntos de la CEE. De su predecesor, Anthony Crosland, hereda la pasi¨®n por una Europa pol¨ªtica unida. Como el fallecido intelectual del socialismo brit¨¢nico, Owen piensa m¨¢s en las ventajas pol¨ªticas que en los riesgos econ¨®micos de una ampliaci¨®n de la comunidad.

,Su presencia en la presidencia de los consejos de ministros de la CEE durante los meses que quedan hasta junio, mientras Gran Breta?a es la cabeza del Mercado Com¨²n, no significar¨¢ en absoluto una ruptura con respecto a las posiciones que mantuvo Crosland mientras desempe?¨® esa Como el anterior ministro brit¨¢nico de Exteriores, las relaciones ib¨¦ricas que mantiene David Owen parecen ser bastante buenas. Puede decirse que los pa¨ªses de la Pen¨ªnsula Ib¨¦rica encontrar¨¢n en ¨¦l a un interlocutor abierto en el caso de que en efecto Portugal solicite su entrada en la comunidad y en el supuesto de que Espa?a confirme tambi¨¦n sus intenciones de integrarse tras las futuras elecciones.

El primer trabajo diplom¨¢tico que Owen desempe?¨® mientras sustituy¨® interinamente a Crosland fue el de la recepci¨®n del primer ministro portugu¨¦s Mario Soares, cuando ¨¦ste vino a Londres hace dos semanas. Cuando este hombre alto, bien parecido, a quien un peri¨®dico le reprocha ser ?demasiado guapo para su puesto?, entr¨® en la sala de autoridades del aeropuerto de Heathrow, algunos periodistas y diplom¨¢ticos se preguntaron por su identidad. Soares lo conoc¨ªa muy bien y .hablaron muy amigablemente. Luego, en sustituci¨®n de Crosland, ser¨ªan Callaghan y Owen los que le ofrecer¨ªan al l¨ªder portugu¨¦s todo el apoyo brit¨¢nico a una petici¨®n de Lisboa de integrarse como miembro de pleno derecho en la CEE.

Para los brit¨¢nicos, Owen, el ministro de Relaciones Exteriores m¨¢s joven que ha tenido este pa¨ªs despu¨¦s de la ¨¦poca de Anthony Eden, tampoco era un desconocido. Al rev¨¦s, su actitud en 1972, cuando dimiti¨® del gabinete fantasma de Harold Wilson como protesta por la posici¨®n antieuropea de sus compa?eros laboristas, lo hizo extremadamente popular con el centro del partido, que ya entonces representaba Roy Jenkins, el actual presidente de la comisi¨®n de la CEE. Jenkins dimiti¨® tambi¨¦n en aquella ocasi¨®n como vicel¨ªder laborista.

Un refuerzo para Callaghan

Despu¨¦s, en 1974, su especializaci¨®n m¨¦dica y su obsesi¨®n por los ni?os le llev¨® a compilar un proyecto de ley sobre la infancia que no pudo introducirse mientras estuvieron los conservadores en el poder, pero que luego fue ley con los laboristas. En Europa, este m¨¦dico de 38 a?os ha defendido hasta ahora espec¨ªficamente los intereses brit¨¢nicos, mientras que Crosland interven¨ªa en los asuntos m¨¢s generales de la construcci¨®n europea. El balance fue perfecto. El consigui¨® que se resolviera favorablemente para el Reino Unido el tema de la pesca y fue ¨¦l quien llev¨® ¨²ltimamente las negociaciones con los sovi¨¦ticos sobre esa cuesti¨®n. Ahora Callaghan lo ha elegido como sucesor de Crosland porque considera que nadie como un proeuropeo de tanta convicci¨®n como Owen puede proseguir la tarea iniciada por el autor de El futuro del socialismo.