Los PNN y los estudiantes

Desde hace m¨¢s de dos meses vengo siguiendo, a trav¨¦s de EL PAIS, las m¨²ltiples noticias y opiniones que, en uno y otro sentido, se han manifestado sobre la huelga de los PNN -que a¨²n contin¨²a-, y creo no haber visto ninguna postura que presente, de forma realista y clara, las posibles causas de que esta huelga no cuente con un claro apoyo estudiantil y s¨ª con la apat¨ªa de la gran mayor¨ªa de los estudiantes.El silencio y pasividad estudiantiles ante dicha huelga podr¨ªa interpretarse como resignaci¨®n y apat¨ªa ante la creencia de que, sea cual fuere el desenlace de la huelga no se van a solucionar nuestros problemas acad¨¦micos y, principalmente, el acuciante de la baj¨ªsima calidad de la ense?anza que padecemos. Desde hace tiempo es un lugar com¨²n entre los estudiantes que ?ir por la facultad es perder el tiempo, porque las clases son aburridas y no te ense?an nada?, y que lo mejor es ?pedirle bibliograf¨ªa al profesor y prepararte las clases por tu cuenta?. De esta forma los profesores -los PNN, desde luego- se han convertido en ?orientadores bibliogr¨¢ficos ?, para los estudiantes que, una vez con la lista de sus libros en sus manos, huyen de la facultad para pre pararse todo por su cuenta. Este desinter¨¦s por la ense?anza profesoral ha creado una poblaci¨®n n¨®mada estudiantil que va muy de vez en vez por las clases para preguntar si ?ha pasado algo nuevo?, y que desaparece hasta m¨¢s ver, una vez lograda la informaci¨®n. Esta situaci¨®n de aton¨ªa universitaria se pone de total relieve con la huelga de los PNN, y nos muestra una realidad que se pretende escamotear continuamente porque es dolorosa: ?En la actual situaci¨®n, la falta de los PNN (por supuesto, hay honrosas excepciones) no se nota apenas.? Los estudiantes -pluralizando, creo recoger un sentir com¨²n- estamos cansados de lo poco que aprendemos en la Universidad, con y sin ?penenes?, y la reincorporaci¨®n a las clases no. despierta en nosotros el m¨¢s m¨ªnimo inter¨¦s si ¨¦stas van a seguir siendo las de antes de la huelga.

Por ello, pienso que si las seguridades de empleo y las reivindicaciones estamentales de los PNN se quedan s¨®lo en eso y no nos ofrecen a los estudiantes una ense?anza que valga la pena, los estudiantes tendremos toda la raz¨®n al expresar nuestro descontento ante lo que ser¨ªa un aut¨¦ntico fraude. El hecho de que los problemas de la Universidad espa?ola sean muchos y complejos no justifica que se invoque constantemente a la ?estructuralidad? del problema universita no por parte de los PNN, pues es toy cansado de ver c¨®mo este len guaje ?estructural? sirve, en muchas ocasiones, para encubrir las propias incapacidades y negligencias.